Una hermosa, pero muy sensible joven se enamora de Leonardo, un universitario extremadamente promiscuo y dominante, además de ser hijo de un multimillonario que maneja empresas en diferentes países y qué, pensaba que nunca se enamoraría, que tenía todos sus sentimientos bajo control, pero una niña se colará en su sistema y lo volverá loco física y psicológicamente, Camila dudará de hacerle caso a su corazón nuevamente, luego de ya haberse decepcionado de Leonardo.

Caí tan redondo que perdí la particularidad de mi personaje. Una chica sensata y de pocas palabras que prefería hacer su trabajo y evitar el mínimo contacto. Algo que lo hice mío por mucho tiempo. Mi muro, esa gran pared imaginaria que no dejaba que nadie ajeno a mí, entrara. Aunque debo ser sincera no era feliz, solo tenía la idea de una felicidad, a causa de creí que no la merecía. Él lo hizo todo. Sus lanzamientos de quarterback eran siempre certeros. Porque sus pequeños detalles de ternura. Formatearon mi mente y mis sentimientos dándome la mentecata idea de que lo merecía. Y me la creí. Merecía ser amada y amar. Lo hice. Deje que mi personaje se derrumbara. Y mi arriesgue amar, a sentir, a vivir, me deje guiar por él, acepte todo hasta lo más ridículo y por primera vez me divertí. El rebaso todos los estándares de los chicos de lo que había escuchado. Hasta el punto de usarlo como escudo y mi salvavidas. Porque de cierta manera lo valía.

¡Fui engañada por mi papá y mi mamá! Me convencieron de que llevara el bebé de un extraño, ¡entonces podrían ganar 20 millones! Entonces podrían usar los 20 millones para brindarle a su otra hija una vida acomodada. En cuanto a mí, nunca estuve en sus planes. Decidieron expulsarme de la familia una vez que di a luz al niño. Los ayudé a ganar los 20 millones con el costo de perder mi vida universitaria y mi novio. Aunque mi novio trató de no dejarme, mi media hermana hizo todo lo posible por seducirlo y logró comprometerse con él... Sí, eso es lo que mi familia me había hecho. Gracias a Dios, después de dar a luz al bebé, me admitieron con éxito en una universidad extranjera, donde realicé mi sueño: ser intérprete. Cinco años después, trabajé en la Mansión del Presidente como intérprete... ¡¿Pero por qué me sentí familiarizado con el niño que era el hijo del presidente?!

Qin Yuyue no entendió por qué el banquete de He Qiao la llevó a la Oficina de Asuntos Civiles para casarse a primera vista. Después de casarse, se divertían todas las noches. Qin Xiyue sostuvo su cintura medio rota y dijo con una cara triste: "El banquete de He Qiao, ¿qué estás mirando? ¿No puedo cambiarlo?" "¡No!" La sonrisa del hombre descalzo era particularmente atractiva, y sus ojos brillaban con entusiasmo. "Me moriré de cansancio si sigues haciendo esto". "¡No, no lo haré!" "¿Por qué no?" "No estoy de acuerdo. ¡¿Quién se atreve a dejarte morir?! ¡Yama tampoco puede hacer eso!" Qin Yuyue: "..." He Qiao miró a la mujercita desordenada en el viento y la sostuvo en sus brazos. Para ser una mujer en su banquete Heqiao, debe haber tres condiciones: que le guste que la mimen, que le guste que la mimen y que le guste que la cuiden de todas las formas posibles. ¡Esta mujer acaba de cumplir con todos sus requisitos, por lo que tenía que tener una conciencia que solo le pertenecía a él!

"¡Felicitaciones! Vas a ser viuda en tres meses". Era la segunda vez que Kendall experimentaba un matrimonio forzado. La primera vez, sus padres la obligaron a ser la quinta concubina de un millonario. ella escapó La segunda vez, sus padres la ataron y la enviaron a la cama de un tipo medio muerto. Se decía que su futuro marido era un bicho raro viejo y feo, que iba a morir pronto. Nadie esperaba que ella se casara con la familia Michaelson de esta manera. La familia Michaelson era la familia más rica del mundo. ¡Su heredero, Alexander, era un caballero súper atractivo con el que casi todas las chicas se esfuerzan por casarse! Sin embargo, se enamoró de Kendall a primera vista. Para atrapar a Kendall en su dulce amor, fingió ser un hombre moribundo e hizo uso de la bondad de Kendall...

Cha Chu iba a pasar una noche maravillosa con su novio, ¡pero no esperaba pasarla con un total desconocido! No sólo eso, ¡sino que el hombre la trató como a una mujer inmoral! Para colmo, su novio la engañó con su hermanastra y su familia incluso quería casarla con un viejo por dinero. Cha huyó y volvió a encontrarse con el guapo de aquella noche, quien la cargó en su auto, inconsciente y cubierta de barro, y la llevó a casa. Él tenía misofobia, pero no se resistió lo más mínimo al contacto con ella. Cuando se despertó al día siguiente, tenía delante un contrato de matrimonio. Con el corazón roto por su familia, se limitó a firmar el acuerdo. Pero ella se quedó de piedra cuando vio la firma de él. Su marido, el guapo desconocido, era en realidad el hombre más misterioso, rico y noble, ¡Shenxing Li !

Song Bei, se suponía que era un heredero acomodado, pero desde que sus padres desaparecieron, la empresa sufrió un gran ataque y estuvo al borde de la quiebra. Entonces, ¡su compromiso con su amada había sido anulado sin ningún motivo! Justo cuando estaba en un estado de absoluta desesperación, ¡se recuperó un día y se convirtió en un médico mágico supremo!

Scarlett se casó con su único amor, Eduardo, y ahí empezó su pesadilla. Después de que se casaron, solo se acostó con ella pero nunca le dio amor. El día que dio a luz a su hijo, perdió la custodia de su propio hijo y se le otorgó un acuerdo de divorcio. A partir de ese momento, finalmente se dio cuenta de que solo era su herramienta para cargar al bebé. Ante el horrible hecho de que siendo abandonada y utilizada por él, decidió dejarlo. Se esforzó por olvidar todo y comenzar una nueva vida. Desarrolló una relación con otro hombre y decidió casarse con ese hombre. Pero el día antes de su boda, supo la verdad de que Eduardo nunca trató de lastimarla, sino que secretamente estaba ayudando a su vida. Es más, él se acercó a ella y le dijo que la había amado durante mucho tiempo...