Capítulo 15
1254palabras
2023-06-07 04:24
DAVID
Su presencia aún se exhibe antes mis ojos sin mover un musculo que lo acompaña con la respiración lenta. Y no me puedo quejar es una gran vista de su estructurado cuerpo. ¡Dios ya me excité!
-Señor Stewart necesito hablar con usted es de mucha importancia. ¿Me regalía unos minutos de su tiempo?

-Claro dime en que puedo ayudar
- ¿Podemos hablar a solas? Si no es mucha molestia.
Y esa es una indirecta muy directa para mí para que los deje solos. Aun así es inútil puedo escuchar todo.
-Estaré por allá si me necesitan –Indico el árbol más grande de mangos.
-Como si lo necesitáramos –Murmura Sara. Aun así, la logro escuchar.
-Si lo haremos David ahora si podrías el favor de retírate. –Puedo sentir como intenta aguantar la risa y doy promesa de que esta me las cobrara.

-Muy bien me retiro –Y así lo hago dejarlos solos, pero estando pendiente a cada palabra que salgan de sus bocas.
-Primeramente, Buenas tardes. Lo que hablare con usted a continuación es mucha importancia y necesito que sea totalmente sincero con las preguntas que le hare a continuación.
-Muy bien Sara pregúnteme y prometo responder a todas sus preguntas con la verdad.
- ¿Cuántos años tenía Meredic cuando vio a su tío por última vez?

-Tres años ¿Por qué?
-Lo que diré ahora es muy delicado, pero por favor solo escúcheme y atiéndame nada de preguntas. Estamos claros.
-Bien.
-Cuando vine el día de ayer para el trabajo. Meredic se comportó de una forma cariñosa que me gusto y lo vi normal. Sin embargo, al irme ella lloro y me dijo que no la dejara sola. En ese momento no lo entendí y luego recordé la historia que me conto de ella. Y bueno su mamá tuvo que convencerla que el día de hoy me volvería a ver. Logre comprender que ella al ser una niña se encariño conmigo y no quería que yo me alejara de ella. No obstante, hoy en la mañana me asuste ver la casi afuera y lo que me respondió es que me estaba esperando.
>> Pero esto no es solo sobre ella. También es de usted, su y su tío –Toma aire -Bueno Meredic me comento que a lo largo de estos años usted y al igual que la señora Luna no le han dado toda la atención que necesita una niña de su edad. Porque al su tío ser la persona que se encargaba de entretenerla y cuando se fue no huno nadie hay para consolarla.
>>Y aunque que me contrataron para cuidar de Meredic no puedo dejar de preocuparme por ella y necesito que ahora que usted está aquí pase más tiempo con su hija y le muestro que la ama y la quiere con todo su corazón.
-Gracias Sara.
-No es nada Señor. Y de antemano perdón si me he pasado con mis palabras.
-No debes disculparte. Tú eres un ángel. Gracias a ti sé que tengo la oportunidad a recuperar el cariño de mi hija.
-No es nada. Para mí esa pequeña es todo y solo deseo su bienestar al igual que el de todos ustedes.
-Entre ellos está mi cuñado ¿Verdad?
-Señor...
-Dime Connor.
-Connor para serle sincera su cuñado no es de mi agrado.
-Pero aun no lo conoce..
-Tiene razón no lo conozco completamente sin embargo lo poco que he llegado a tratar con él es un persona que se cree el rey del universo y no lo tolero. Y con su permiso debo ir con Meredic ella me necesita.
-Oh no te detengo mas puedes retirarte y gracias. Pero por favor date la oportunidad de conocerlo.
-Estoy a sus órdenes y sobre el otro tema lo pensare.
Y así la pisadas resuenan en el húmedo césped alejándose y dejándome desconcertado.
-Sé lo que piensas David no te culpes –Habla Connor en tono bajo. Y no si lo dice por Meredic y por Sara.
Giro mi rostro hacia el sintiéndome culpable y él se encamina hacia mi sin quitarme la mirada de mi persona en ningún momento. Me asusta.
-¿David?
-Fue mi culpa –Pronuncio con pesar –Todo es mi culpa Meredic se quedó sola por mi culpa y Sara me odia.
-David sabes que no lo es. No te atormentes.
-Sí lo es. Por mi culpa desde que tome la decisión de irme para rehacer mi vida. Y lo único que provoco es destruir a mi pequeña mariposa ¡Soy un idiota!
-Vamos David recapacita aquello ya es pasado ahora céntrate en borrar los momentos tristes que paso mi hija. Porque tu no solo eres el culpable yo también estoy ahí ya que deje a un lado a mi hija y solo me centre en mí. Ahora solo te pido que no la alejes de Meredic la necesita.
-¿A quién?
-A Sara ¡Idiota!
-Lo hare pero debes tener presente que ella es mi mate y mi deber es protegerla de todas las personas que quieran hacerle daño y eso será solo a mi lado. Tomando el lugar que le corresponde como mi compañera. "Mi Luna"
-Lo tengo muy presente no tienes que repetirlo cada cinco segundos para que lo entienda no soy tonto. Sin embargo solo quiero que me entiendas gracias a ella tengo la oportunidad de recuperar el amor de mi hija el cual descuide por mi irresponsabilidad. Así que no lo arruines.
-Connor –Advierto.
-Solo compréndeme mi hija es mi vida y hare hasta lo imposible para que mi ella vuelva hacer la niña alegre y cariñosa que era cuando tu estabas a su lado. Así aunque me quieras golpear, patear escupir, aniquilar hasta saciarte Sara no se ira de aquí. Y sin ofender ella aun te odia.
-No es cierto.
-¡Enserio! Te dio una golpiza haya arriba.
-No me lo recuerdes. Aun los golpes siguen intactos en mi rostro como un tatuaje de mal gusto
–Ríe –Fue un gran espectáculo digno de ver y le debo dar las gracias porque es la única que te ha puesto en tu lugar.
-Eres un idiota Connor – Vuelve a Reír.
-Amigo desde ahora te doy mis grandes sentidos pésames.
-No lo intentes Meredic está presente –Escondo mi puño porque Meredic no debe ver como maltrato a su padre.
-Esta me las pagas idiota. No me quedare de brazos cruzados. Te va a costar.
-Ahora lo importante ¿Cómo vas conversarla? Porque se nota que te quiere –Ironiza.
-Connor no tientes a la suerte porque ella te puede dar dejar un gran moretón en el trasero.
-Bien. Bien. Dejando a un lado las bromas se nota que ella es una chica difícil y es muy difícil de sobrellevar.
-Nada difícil para mí. Me fascinan los desafíos.
-Eso temo. Cuando te trazas una meta no dejas de trabajar hasta conseguirla.
-Como mi lema
-¿Cuál? HH. Si... Siempre ganar en cualquier adversidad.
-Corto y preciso. Un gran lema el cual aplicare en esta ocasión me querido y apreciado Connor.
-Solo quiero ver como ella te arrastra por lo suelo y lo digo literalmente.
Cuando pienso responderle el sonido del agua atrae nuestras atenciones y miramos rápidamente hacia la piscina donde Sara y Meredic juegan algún juego desconocido para mí. Brotando un sinfín de risas de sus bocas.
-Lo entiendes ahora David mi hija es feliz a su lado no les quites el privilégielo de que vuelva a reír como antes.
-Pero....
-Solo piénsalo –Y así sin más se aleja dejándome con la interrogante rodando por mi cabeza.
¿Hare lo correcto alejando a Sara