Capítulo 60
1255palabras
2024-05-18 00:51
"¡Sí! ¡Pienso lo mismo! Como está en el hospital... Ya no me siento tan sola. Si tengo tiempo, vendré a conversar con usted. Por favor, no me haga caso", la sonrisa de Esme era radiante.
Frank contestó sonriente: "Desde luego, me alegrará verte aquí. A veces me siento solo en el hospital".
"Con razón Layla es capaz de sacrificar cualquier cosa por usted. Si yo tuviera a alguien tan bueno como usted, también lo haría", se afligió Esme.

Frank se sorprendió y entró en un estado de nerviosismo. Preguntó a toda prisa: "¿Qué ha sacrificado Layla? ¿Qué hizo por mí?"
Enseguida, Esme se cubrió la boca y se puso nerviosa como una niña que hubiera hecho algo malo. "No, me refería... A que... No es extraño que Layla sea capaz de sacrificar cualquier cosa por usted. No... Me refería a que está dispuesta a sacrificarse por usted..."
"¡Buena muchacha! ¡Cuéntame! ¿Qué le ocurrió a Layla? ¿Qué sacrificio hizo por mí? Yo ya soy viejo, por lo que no importo, ¡pero ella aún es joven! Por favor, no me hagas preocuparme. ¡Vamos, dímelo!", Frank tenía los ojos enrojecidos.
"Es que...", la voz de Esme estaba algo entrecortada por los sollozos, como si no quisiera que Frank se inquietara. Entonces respondió con tristeza: "Layla se casó con Camron en representación de Zoey, de la familia Boyer. Por este motivo, esa familia está dispuesta a pagar sus gastos médicos".
Frank se quedó perplejo.
"Camron se quedó huérfano de padres y abuelo desde pequeño y rechazaba mucho a los extraños. Él y yo... Se suponía que nos íbamos a casar. Sin embargo, después, el tío de Camron lo obligó a casarse con Layla. Como es tan buena pero tan testaruda, quiso ser la persona que lo salvara. Ni siquiera me atreví a contarle lo de mi relación con su esposo. Tenía miedo de hacerle daño..."

Frank abrió los ojos de par en par. Creyó que el id*ota de Dylan lo había ayudado a pagar los gastos médicos porque se sentía culpable por su hermana. Pero no esperaba que fuera Layla la que sacrificara su felicidad por él.
Con razón Holly y Chester le habían comentado en repetidas ocasiones que Layla se había casado con una familia rica y poderosa.
Frank siempre creyó que era un truco de la madre y el hijo para quitarle dinero. No suponía que fuera cierto.
"Por favor, no le digas a Layla lo mío con Camron. Temo que se ponga triste. Es una chica muy buena. Ella me agrada mucho...", comentó Esme ansiosa: "Además, la persona más inocente en esta situación es ella. Lo único que quería era salvarte".

A Frank le temblaban los dedos. Le hizo un gesto con la cabeza a Esme, con la mirada apenada. "¡Tú y Layla son chicas buenas! Tranquila... ¡No permitiré que Layla intervenga entre tú y Camron!"
"¡No pretendía eso! Estoy pensando en irme al extranjero... Cuando mi mano esté curada, me iré", ella tapó su mano herida con un gesto nostálgico. "Es que no soporto separarme de mis padres..."
En cuanto Esme dejó de hablar, la enfermera empujó la puerta y entró para darle la medicina a Frank.
Esme alzó la cabeza y le sonrió a Frank. Se puso en pie y exclamó: "Tío, antes deberías descansar. Mañana vendré a verte. Por cierto, mi madre hace una sopa deliciosa. Le voy a pedir que te prepare más".
Frank se sintió tan apenado con Esme que no supo qué decir. Y se limitó a contestar: "¡No, no! Es muy incómodo".
"¡No se preocupe! El tío de Layla es como el mío", le hizo una reverencia y abandonó la habitación.
A Frank le dolía el corazón. Con tal de curar su enfermedad, su sobrina se sacrificó casándose y se involucró en la vida amorosa de otras personas sin saberlo.
¿Qué diferencia había entre esto y que antes su hermana se metiera en el matrimonio de Dylan y Quinn sin que se diera cuenta?
¿Y si al final Layla acabara como su madre?
De solo pensarlo se le erizaron los vellos a Frank. "Layla es la única hija que mi hermana me ha dejado. No puedo permitir que ella sacrifique su felicidad para ayudarme a mí, un viejo medio muerto".
Entonces él sacó el teléfono de debajo de la almohada y se dispuso a llamar a Layla, pero antes de marcar se detuvo.
No podía tomar una decisión tan precipitada y preocupar a Layla. Primero tenía que pensarlo...
¿Acaso esa chica llamada Esme no estaba también ingresada en este hospital? Antes se calmaría y llamaría a Layla cuando hubiera llegado al fondo del asunto. Si no, tendría problemas si había un malentendido.
...
Aunque no era la primera vez que Layla iba a casa de los Floyd, había visto pocas veces al padre de Jaylah.
Al fin y al cabo, el padre de Jaylah vivía ocupado con los asuntos de la empresa, así que casi nunca estaba en casa.
Layla consiguió mantener las tierras de la familia Floyd, y eso supuso un gran favor para el padre de Jaylah. Así pues, cuando esta última mencionó que su amiga vendría esta noche, su padre se fue a pescar y a cocinar.
Sin embargo, para sorpresa de todos, además de Layla, había otra persona no invitada a la mesa de la familia Floyd, Garrett Britt.
En una ocasión, Layla y Garrett se habían visto en la mansión Walsh. Después, fue esta quien apuñaló a Luca y lo hirió. Garrett había mandado a alguien para que la v*olara y dejara marcas para que Camron las viera.
No obstante, Layla no era más que una veinteañera. Enfrentarse a un hombre como Garrett, tan astuto y despiadado, le producía miedo.
Garrett acudió hoy a casa de los Floyd para conversar con el padre de Jaylah sobre las tierras, así que también se sorprendió al ver a Layla ahí.
Una vez que el padre de Jaylah pidió a los criados que prepararan una vajilla para Garrett, comentó con una sonrisa: "Layla es la mejor amiga de mi hija. Tiempo atrás, el derrochador perdió mis tierras en una apuesta con el señor Harper. Pero gracias a la ayuda de Layla... El señor Harper dejó pasar por alto la travesura del mocoso".
"¿Conoces bien al señor Harper?", Garrett le preguntó a Layla.
La vez pasada, los hombres de este tomaron una foto de Layla subiéndose al auto de Michael. En esa época, tenía la mente llena de venganza por su hijo, así que buscó información. Ahora, tras oír lo que contó el padre de Jaylah, se interesó por la relación entre Michael y Layla.
Layla no quiso responder nada ante Garrett. Agarró los palillos con fuerza entre las manos y contestó: "No soy cercana al señor Harper, pero Camron está teniendo conversaciones de cooperación con él. Gracias a él... El señor Harper nos dejó tranquilos".
Garrett asintió con la cabeza. Contempló la hermosa e inocente carita de Layla. Sin darse cuenta, sus dedos acariciaron la alianza de su dedo anular izquierdo.
Además, como era hombre, podía adivinar lo que pensaba Michael. Tal vez le gustaba esta hija ilegítima, y posiblemente quería llevársela a la cama.
En su calidad de sucesor del actual rey no coronado del grupo Golden Age y señor desconocido de la familia Walsh, Garrett estaba muy al corriente del estado físico de Camron. Este último jamás gozaría de un amor verdadero en su destino. Con el fin de expulsar a Garrett de la empresa, era posible que le diera su esposa legítima a Michael.