Capítulo 77
726palabras
2023-11-28 00:01
Shenxing se sentía incómodo e incluso disgustado, pero no sabía por qué. Así que se quedó en silencio y con la mirada perdida hasta que Cha, sin darse cuenta de su estado de ánimo, habló.
"No creerás mi suerte. Me encontré con Sisi en mi primer día de trabajo. ¿Y sabes quién es mi superior? Su tía, o sea, la hermana de Dehua", murmuró.
Cuando ella le dijo eso, él no se extrañó de que la hubieran golpeado en la frente y también pedido que comprara 20 tazas de café a la vez.

Sin duda haría que esa mujer pagara por haberle hecho eso a Cha.
Nadie tenía el derecho de intimidar a su esposa.
"¿Quieres que me vengue por ti?", le preguntó Shenxing.
Su tono de voz fue serio, lo que no dejó lugar a dudas de que no bromeaba. Solo una palabra o un simple gesto de aprobación de parte de Cha y él llamaría y desahogaría su enojo.
Cha, al escucharlo hablar de esa manera, se rio, y no porque no lo creyera capaz de hacer lo que él le acababa de decir, sino porque a pesar de su seriedad, le pareció tierno. "¡No te preocupes! Yo puedo lidiar con personas como ella. Estaré bien".
Ella tenía la plena seguridad de que podría enfrentarse a Sisi, tampoco es como si necesitara hacer mucho esfuerzo. Quien en realidad le preocupaba era Yun, porque ¿y si esa mujer le pedía que pagara el vestido, de dónde sacaría el dinero?

Si bien eso la atormentaba, no quería molestar a Shenxing. Ahora que trabajaba bajo el mando de esa tal Sun, era muy posible que se enfrentara a uno que otro inconveniente en el futuro. Si cada vez ella le pidiera ayuda, le causaría muchos problemas; y eso era justo lo que ella quería evitar.
Después de todo no eran más que una pareja casada por contrato. No tenía la confianza para ponerle las cosas difíciles a Shenxing.
Ante su respuesta, Shenxing solo tarareó un leve "hmm" que ocultó su molestia.
Aproximadamente media hora después, llegó Jin.

Tan pronto como entró por la puerta, preguntó: "¿Quién está herido que has hecho que venga con tanta prisa?".
Shenxing señaló a Cha, quien se encontraba sentada en el sofá y dijo: "Ella".
En ese momento, Cha estaba de espaldas a Jin, así que él no pudo ver su cara. Pero al acercarse, una sonrisa se extendió en su rostro. ¿No era esta la mujer que Shenxing ocultaba en su cama?... "¡Oh, nos volvemos a encontrar!".
Aquella noche las heridas en el cuerpo de Cha la hacían lucir lamentable. Se podía notar que era muy hermosa, pero con los ojos cerrados parecía sin vida. Sin embargo, ahora que ella lo saludó y le dio una sonrisa, no pudo evitar que su corazón temblara. "Este monje Li en realidad es muy bueno ocultando cosas. Después de tantos años, ¿al fin se decidió a tener pareja?", pensó.
Pronto Jin se acercó al sofá, se sentó y le preguntó: "¿Dime dónde te lastimaste otra vez?".
"¿Otra vez?", dijo Cha, confundida.
Al notar su reacción, él le comentó: "Fui yo quien trató tus heridas aquel día. Mi nombre en Jin Sun".
Cha dijo en sus adentros: "Así que este es el tal Jin...".
"Hola, Doctor Sun. Mi nombre es Cha. Lamento molestarlo de nuevo", dijo ella e hizo una reverencia.
Shenxing quien estaba a su lado, la miró con los ojos oscurecidos.
"Oh, no, no hay necesidad de que hagas eso conmigo... Solo dime, ¿dónde te lastimaste?".
En respuesta, Cha señaló su frente. Jin llevó su mano hacia la bandita que la chica tenía en la frente, pero antes de poder retirarla, Shenxing se adelantó; la arrancó y la botó a la basura con notable disgusto. "Es tan fea. ¿Por qué te la pusiste?".
Era más que evidente que a Shenxing no le había gustado que un extraño le regalara una curita a su esposa.
Cha se quejó adolorida: "Ay... ¡Duele!".
Al verla así, Shenxing se arrepintió de su acción, pero lo ocultó y guardó silencio.
Jin miró la herida en la frente de Cha y luego volteó a ver al hombre que lo llamó: "¿Por esto me pediste que viniera?".
"¿Tienes alguna objeción?". Shenxing lo censuró con la mirada y lo amenazó con dejarlo mudo si se atrevía a decir alguna otra tontería.