"¿En qué piensas?".
El sonido repentino de aquella voz, hizo que Cha de inmediato saliera de sus pensamientos. Al voltear se encontró con los ojos y la cercanía de Shenxing, entonces inconscientemente retrocedió. Al estar tan absorta, perdió el equilibrio y casi se cayó.
Pero Shenxing reaccionó rápido y la tomó por su delgada cintura, estrechándola entre sus brazos.

¡La inercia, sacando provecho de la situación, arrojó a la pareja sobre la gran cama!
Todo el cuerpo de Cha yacía sobre Shenxing, y sus pechos se presionaban contra el torso del hombre. Estaban tan cerca que incluso pudo sentir los latidos de su corazón y esa fragancia fresca y única de su cuerpo recién bañado.
¡Qué inesperado!
¡Tan inesperado que Cha quedó estupefacta!
Con sus grandes y brillantes ojos, Cha miró a Shenxing. Por un instante se sintió tan hipnotizada que no pudo apartar su vista de él.
Shenxing por su parte, también se encontraba cautivado. El ver los rasgos faciales de la chica enmarcados por su cabello y acentuados por la sombra de la cálida luz del candelabro de cristal, le resultó todo un sueño.

Tal vista, por alguna razón, lo motivó a acariciarle la mejilla...
Pero ella recuperó el sentido y se levantó de inmediato diciendo: "Lo siento...". Como una conejita asustada, corrió y se escondió en el baño. Desde adentro gritó: "¡Me daré una ducha! ¡Vete a dormir primero!".
Justo después la puerta del baño se cerró.
Casi enseguida, Shenxing se sentó en el borde de la cama y mirando a la puerta, sonrió.

¡Vaya día!
......
En el baño, Cha se paró frente al lavabo de mármol y miró sus mejillas sonrojadas en el espejo, también sus pupilas dilatadas... ¿Qué le pasaba? ¡Sentía una loca atracción por Shenxing!
Ella debía admitir que él era bastante guapo. ¡Pero casi hace el ridículo!
¡Por suerte eso no pasó!
¡Ah, estaba acabada! ¿Cómo podría sobrevivir? ¡La próxima vez sin duda perdería la compostura!
Bueno, si eso pasaba, ¡simplemente se acostaría con él! De todos modos ya estaban...
¡No! ¡Solo eran una pareja por contrato!
Además, ¡el contrato lo escribió ella misma!
Cha estaba tan nerviosa como un ciervo a punto de ser cazado. Se dejó seducir por la belleza de Shenxing ¡y ahora no sabía qué hacer!
¡Toc! ¡Toc! En ese momento, ¡alguien llamó a la puerta!
Al segundo se escuchó la voz de Shenxing. "Aquí te dejo la pijama. Las toallas están en el estante".
"¡Bien!", respondió Cha. Ella esperó a que el sonido de los pasos del hombre se desvaneciera y luego abrió.
Después de ducharse, Cha se cambió y salió del baño. Entonces se encontró a Shenxing aún despierto y leyendo un libro.
Al ver a Cha, cerró el libro y susurró: "¿De qué lado de la cama quieres dormir?".
Cha quedó atónita ante su pregunta. "¡¿Qué?!".
Shenxing señaló la cama y le dijo: "¡Elige primero!".
"Mmmm...". Ansiosa, se mordió el labio. "Dormiré en el suelo. ¡La cama es toda tuya!".
"Cha, no estamos en nuestra villa. Si duermes en el suelo aquí, los sirvientes le dirán a la abuela mañana", le dijo Shenxing con una mirada desaprobadora. "Estamos recién casados. ¿Cómo crees que se sentirá la abuela al enterarse de que no dormimos juntos?".
"Pero...". Cha se encontraba contrariada.
Antes de que pudiera terminar la frase, Shenxing la interrumpió: "No te preocupes, no me gustas. Así que no te tocaré".