"Cha, ¿tienes una relación con el Sr. Li? ¿Estuviste con él estos días?", le preguntó Aiguo tentativamente.
Ella asintió y le dijo deliberadamente: "Papá, no me culpas por haberte hecho sufrir un poco ese día, ¿verdad? Él es así. No soporta que me hagan daño. A quien se atreve a intimidarme, se lo devuelve diez veces".
"No, no lo hago...", le mintió Aiguo. Su rostro se había puesto pálido y luego rojo. Ese día, lo habían arrastrado a una fábrica abandonada y lo habían encerraron en una jaula. Dejaron que decenas de ratones lo mordieran. Había sufrido mucho y se había desmayado varias veces. Esas personas lo despertaban echándole cubos de agua helada. ¡Le había costado mucho aguantar hasta el día siguiente!

¿No la culpaba?
¡Cómo no iba a hacerlo!
Ja, si no fuera por salvar a su empresa, ¡No podría esperar para matar a esa pequeña b*starda!
"No interferiré con tu relación amorosa, pero todavía no sé quién es. ¿Cómo puedo entregarte a él?" Todo eso eran tonterías. ¡Aiguo solo quería saber quién era el Sr. Li!
"No es una persona que puedas conocer a antojo", dijo Cha con voz fría.
Al escuchar eso, ¡su padre estaba aún más seguro de que la identidad del Sr. Li no era ordinaria!

"¡Entonces dile que no le ponga las cosas difíciles a mi empresa!"
Ella lo miró fríamente. Después de un rato, le dijo sarcásticamente: "Papá, estuviste dándole vueltas al asunto. Finalmente dices la verdad".
Él sonrió torpemente. "Sé que eres una buena chica. Ciertamente no soportaras ver que se arruinen todos los esfuerzos de tu abuelo".
"Él tiene mal carácter. No le gusta que me hagan daño, pero tampoco le importa el dinero de la familia Chu. De todos modos, como me lo pediste, se lo diré". Se sentía adicta a fanfarronear y que podía inventar mentiras fácilmente.

Cuando vioque su padre se tragaba sus mentiras, ¡se sintió muy bien!
"¡Entonces esperaré buenas noticias!" Él estaba un poco emocionado.
"De acuerdo, tengo algo que hacer. Volveré a verte la próxima vez". Se levantó.
"¡Está bien, vete rápido! No dejes que el Sr. Li te espere demasiado". Había conseguido su objetivo. ¿Cómo podía importarle si ella había comido bien o no?
Él le provocaba asco y le daban ganas de volver a reírse. Incluso cuando actuaba, no podía dar lo mejor de sí. ¡No era nada profesional!
En la puerta de la villa de la familia Chu, Aiguo vio a su hija subirse a un coche. Entonces vio el número de matrícula.
Era un Rolls-Royce Phantom de edición limitada y ¡solo habían fabricado diez en todo el mundo!
¡Estaba seguro de que el hombre que la respaldaba era insondable!
El automóvil se alejó de la villa.
Dentro, Cha se reclinó en su asiento y miró aturdida la colorida noche a través de la ventana.
Se sentía tan cansada. Había torturado a la familia de Aiguo una vez y se había sentido muy cómoda. Sin embargo, ahora que todo se habían calmado, y se sentía muy sola.
Si todo eso fuera cierto, ¿qué lindo sería?
Si su padre no fingiera, y fuera realmente amable y tolerante. ¿Qué agradable sería eso?
Hoy había estado disimulando todo el tiempo.
No obstante, su actuación era distraída.
¿Cómo podía ser su padre biológico una persona tan inmoral y desvergonzada?
Si la gente pudiera elegir a sus padres, ¡ella no lo aceptaría jamás!
Pero, por desgracia, no había tenido elección.
Sus lágrimas rodaron silenciosamente por sus mejillas.
Se limitó a mirar por la ventana y dejó que estas fluyeran libremente.
Hoy, había tomado prestado el prestigio de Shenxing para asustar a su padre, haciéndole pensar que tenía un respaldo poderoso. Su patrocinador era realmente poderoso, pero sin él ¿qué debería hacer en el futuro?
Aquella medida no era una solución a largo plazo.
No importaba. Por el momento, solo podía dar un paso a la vez.
Shenxing...
Repitió su nombre en su cabeza.
¡Había desaparecido durante tres días!
De repente descubrió que ella... ¿lo extrañaba un poco?