Capítulo 14
1200palabras
2023-09-23 18:56
— Seúl había retrocedido mientras la mirada fulminante de Killian lo doblega considerablemente sin importar que la posición de Beta era inferior a la de un Alfa, pero los desterrados tenían mayor fuerza asesina que la de los lobos tradicionales, en ocasiones eran dominados por completo por su instinto salvaje, no obstante la fragancia de otros desterrados se había percibido, puesto que se había mezclado con la llovizna que caía en ese momento - ¿cuántos desterrados habitan en esta zona? - Preguntó Seúl, pero la consulta del Alfa no fue aclarada, puesto que los 10 guardias se habían acercado a Killian, además Lillith se posicionó al lado de Killian.
— Cierra la jodida boca y ordena a tus guardias custodiar los perímetros - Fue la orden dada por Killian.
— Estás en mi territorio, no puedes venir a ordenar - Antes de que Seúl terminará de hablar el lobo del Beta rugió, Lillith sintió que su piel se eriza ante aquella acción, a los desterrados era fácil hacerles perder la calma y Killian Vankfort era uno de ellos.
— Que des la jodida orden de que tus guardias custodien los perímetros si no quieres que tomen tu territorio— Killian se llevó por delante el cuerpo de Seúl.
— Basta Killian - Lillith se interpuso ante el Beta grave error de la Loba porque la furia del Beta fue mayor.
— Son desterrados que pueden consumar tu manada en cuestión de minutos has que la fragancia de tus guardias sustituyan la nuestra de manera inmediata - Killian había vuelto a ordenar - Ahora— Espeto el Beta y para Seúl había sido muy fácil obedecer las órdenes de Killian esta vez, el Alfa ordenó que los guardias se desplieguen por todo el territorio mientras la presencia de más desterrados cada vez se sentía más cercana, Seúl se había alejado el Alfa parecía estar rendido, pero a través del enlace mental sus guardias habían sido movilizados y más custodias eran muy fuertes, pero quién había dado aquellas órdenes y aquella manera intensa para realizar el patrullaje no había sido Alfa Seúl, la mente de cada guardia y del mismo Alfa eran manipuladas y controladas en su totalidad por Killian para evitar que los guardias de la Hermandad se acerquen más mientras el Beta se había quedado en la cabaña en compañía de Lillith mientras los guardias también se mantenían en las cercanías.
— ¿Has defendido en mi presencia al Alfa? - Killian había encarado a Lillith la imponente figura masculina cubría por completo
el pequeño cuerpo de la loba.
— Y si así es ¿Tiene algo que ver contigo? - Lillith tampoco estaba de humor para soportar que el Beta le hable en aquel tono que estaba empleando - Pero te diré la verdad, lo estuve protegiendo, lo defendí de ti que eres un salvaje porque más allá de que él me haya rechazado él y yo tuvimos lo nuestro un lazo.
— Basta no existe ningún jodido lazo que los unía, él te rechazó.
— Y yo lo quiero - Lillith había levantado la voz - Él es al que yo quiero y la marca que tú tienes en tu cuello, solamente es un error, no quería marcarte.
— Así que lo quieres— la voz de Killian era mortalmente calmada, pero si rostro tenía la maldad impregnada en ella - ¿Lo quieres? - volvió a preguntar el Beta.
— No hagas el intento de manipular mi mente porque no soy una loba cualquiera tus trucos conmigo no funcionan - Lillith sintió una pequeña molestia y efectivamente Killian había hecho el intento de enlazarse mentalmente y leer los pensamientos de la loba, pero aquello con Lillith no funcionaba - Tú y yo estamos en igualdad de condiciones, pero no es por presumir ahora que lo pienso yo soy superior, porque te he marcado tengo cierto poder en ti, en cambio, nadie tiene algún poder en mí, pero tú tienes mi marca aquí— el dedo índice de Lillith tocó la marca que reposa en el cuello de Killian - Me perteneces, pero no me interesa nada de lo que tenga que ver contigo.
— Cuida tus palabras porque puedo hacer que te las tragues - Killian la sostuvo de la barbilla, la nariz de ambos rozando entre sí.
— Prueba, has el intento de que me las trague, pero es más probable que me trague esto - Las manos de Lillith ejercieron fuerza con un movimiento inesperado para Killian al sentir las pequeñas manos de la Loba por encima de su pantalón dejando en evidencia que su masculinidad había reaccionado ante la acción de la Loba - ¿Qué pasa? - Lillith se mordió los labios mientras.
— Loba - susurró Killian- No creas que estás a salvo - Con aquellas palabras Killian se alejó de la cabaña, pero Lillith había tomado la decisión de seguir los pasos del Beta, la fragancia de los desterrados parecía evaporarse. El Beta también se había dado cuenta de aquello, pero sus pasos se detuvieron de manera inmediata al encontrar el cuerpo malherido de un lobo desterrado al otro lado del territorio de Saúl.
— ¿Rox? - Lillith también se detuvo al percatarse de que Killian se había detenido, sus ojos azules captaban desde la distancia que el Beta se había puesto en cuclillas y algo se había encendido en su interior al observar con el cuidado que Killian tomaba la cabeza de la mujer en sus manos.
— ¡Killian! - Murmuró la loba tosiendo - Pensé que habías muerto— Su voz se escuchaba con ronquera - El Alfa de la Hermandad ordenó que me den un castigo porque piensa que yo te ayude a escapar o.
— No hables - Killian le acarició el rostro.
— Killian protégeme el Alfa vendrá a matarme - Rox buscó refugio en los brazos del Beta, pero la siguiente acción de la loba tomó por sorpresa a Killian y había enfurecido a Lillith y es que Rox había unido sus labios con los de Killian y el Beta no hizo nada para apartarla es más había continuado con el beso ante la atenta mirada de Lillith.
— Rox - Unos segundos después, Killian se apartó cariñosamente - Conmigo no vas a estar a salvo.
— ¿No quieres tenerme contigo por la marca que tienes en tu cuello? - Rox agachó la cabeza mientras las lágrimas brotan de sus ojos.
— Ni siquiera la marca puede impedir que tú estés conmigo, ella no es nada para mí, tú si lo eres - Killian cargó en brazos a la loba colocándose de pie con ella en brazos, pero al darse la vuelta se encontró con Lillith.
— Bájala, ella no va a estar en donde yo esté - Lillith se escuchaba segura.
— Quítate te doy 5 segundos para que te pierdas de mi vista - Killian la fulminó con la mirada entones Lillith solamente había dejado escapar una sonrisa y se apartó, Killian avanzó, pero Lillith no se había quedado callada.
— Que se siente saber que el macho que calentaba tu cama y tu cuerpo ahora tiene la marca de otra, mi marca - Lillith había logrado que Rox endureciera sus facciones.