Capítulo 71
1421palabras
2023-08-31 02:03
Caminamos hasta el lago alejándonos de todos.
Daimon me sigue pero su nerviosismo me tiene estresado.
- ¿Que ocurrió? ¿Que ocultas? - se deja caer contra el árbol y esconde su cara entre sus rodillas.
- Dániel solo prométeme que me dejarás hablar hasta el final, nunca he actuado con la intensión de lastimarla, yo la amo - Si antes tenia curiosidad ahora no puedo esperar para saber que put*s hizo. - Cuando expulsaste a Ashley yo la recibí en la manada por petición de Joseph. Pero eso fue antes de que todo esto pasará. Yo... quería vengarme de ti y él me ofreció su ayuda. Pero luego ocurrió lo de la reunión y me di cuenta que prefería verla contigo antes de causarle daño. - Ni siquiera levanta la mirada.
- Daimon me asustaste, pense que habia sido algo mas grave. Fue un error haber echo eso, yo la saque porque era una amenaza para Victoria. Pero esto tiene solución solo es cuestión de expulsarlos a todos y listo hermano. Nos estamos ahogando en un vaso de agua. Le explicaremos como ocurrieron las cosas y ella entenderá - Le digo pero él sigue preocupado.
- Eso no fue todo. El dia siguiente a la reunión Joseph me busco para decirme que Nala le había dado un té con llama celo, pero yo no lo pedí. Te lo juro! Ella me reconoció, el vínculo que tenemos es genuino, tu lo haz visto! - Levanta su mirada y la angustia es palpable en su rostro. Me quedo callado recordando mientras a mi mente llegan las imágenes de su sufrimiento cuando entró en calor, yo sabía que no podía ser algo natural! Ese celo era animal.
- Dime algo! Por favor! Dime que me crees! - Me suplica, mientras sujeta con fuerza su cabeza!
- ¿Que sabe ella de todo esto? ¿Quien le contó? - Le pregunto
- No lo se! Esta mañana cuando salimos Samuel me pidió que lo acompañará porque ellos estaban dando problemas. Joseph me pidió que le cediera terreno y le permitiera formar una nueva manada con parte de nuestros hombres, pero me negué. Les pedí que se fueran. Yo te iba contar todo! Pero cuando regresamos a casa ella estaba molesta conmigo tú viste! Me pregunto por Ashley, no se quien le contó y ni que le habrán dicho, pero ella no quiere verme! Y yo me muero si la pierdo! Me muero sin ella! - Me dice con su voz temblorosa y la furia me invade. Me pongo de pie y él me mira esperando mi reacción.
- Fuiste un estúpid* al dejarte manipular! Vamos a buscarlos y acabar con este problema! - Duda en levantarse pero al final lo hace.
- ¿Me crees Dániel? - Su mirada está vidriosa
- Claro que te creo! Eres mi hermano. Y eres mi compañero igual que ella! No vamos a permitir que nadie nos lastime! - Sus brazos me rodean y siento sus lagrimas caer.
- Cálmate hermano! Lo vamos a solucionar! - Le digo y nos transformamos para ir a buscarlos. Esos maldit*s no saben con quién se metieron!
Samuel esta en la puerta y al llegar nos avisa que ellos se han ido vociferando amenazas. Menos mal porque si los hubiera pillado les habría arrancado las cabezas!
Regresamos a casa y Susy esta en la entrada.
- Alfas, los iba a llamar, ella ha estado vomitando y no ha querido recibir nada. - Esta preocupada.
- Hablaremos con ella y llamaremos al médico, pueden irse a descansar - Les digo mirando a Frank - Gracias Susy, no se que haríamos sin ti. - Nos despedimos y veo a Daimon dudoso en entrar.
- No me digas que tienes miedo! - Le digo mientras me dirijo a la escalera y poco a poco él me sigue. Al entrar ella esta sentada en la cama, se ve pálida.
- Mi pequeña! ¿Podemos pasar? Tenemos que hablar - Se gira y me mira, esta dolida, sus ojos reflejan que ha llorado mucho. Maldit*s perros!
- ¿Por qué me hizo esto? ¿Por qué estaba con ella? Daimon no me ama Dániel! - Me dice y el llanto la consume.
Daimon se deja caer en la pared abatido. No es justo que sufran. Me duele verlos así.
- No Victoria! Daimon daría su vida por ti! Él te adora mujer, su corazón solo late por tu amor! - Me mira incrédula.
- ¿Donde esta? - Me pregunta y él se levanta y se asoma mirándola con el alma rota.
- Mi tesoro, déjame explicarte lo que pasó, yo no te he faltado! Te lo juro por la diosa que jamás te engañaria! -
- ¿Quién te contó? - Le pregunto, pero ella sale corriendo al baño y la escucho vómitar. Daimon corre a su lado y sujeta su cabello.
- ¿Te dieron algo? ¿Que te hicieron? - Sus manos tiemblan mientras habla. La ayuda a levantar y le alcanzó un vaso de agua. La llevamos a la cama para que se recueste.
- Ella vino y me dijo que tu estabas en su cama... Que yo no te complacía... que no me amabas - Rompe en llanto cubriendo su rostro con sus manos.
- Por Dios Victoria! Tú eres todo lo que tengo! Eres mi vida entera! Esa mujer solo quiere separarnos. Yo si fui a su casa hoy, pero lo hice para pedirles que se fueran! Desde que te encontré mis ojos no han visto a otra mujer! Créeme por favor! Créeme mi tesoro! - Le dice sujetando su carita que refleja tanto dolor.
- Pero ella me dijo. Ella dijo que solo me estaban usando para que no la atacarán a ella, que ella era la luna de esta manada. Que solo la estaban protegiendo del peligro que se acercaba! Yo... yo no entiendo nada. - Dice entre sollozos y mi sangre hierve por el deseo de desollarla viva! No debimos tener compasión con ella y su familia!
- No es verdad amor, no es verdad! Tú eres nuestra Luna, nuestra compañera. Tú eres todo! - Le dice mientras las lágrimas ruedan por su mejilla. Ella lo mira y me mira.
- Victoria, Daimon no te miente! Yo pondría mis manos al fuego por él. Perdonalo, su error fue no haber hablado a tiempo, pero eso no fue culpa suya, él trato de contarme y yo no lo deje. Esa gente ya está fuera y jamás se volverán a acercar a ti. - Los latidos de él son tan fuertes que se escuchan claramente en la habitación.
- Yo te amo. - Le dice mirandolo - Los amo! No quiero que nada nos separe, no quiero volver a sentir ese temor, me dolió mucho pensar que era verdad - Sus manos recorren su rostro limpiando las lágrimas que aún caen. Sólo lo habia visto llorar el día que enterramos a nuestros padres. Se ve vulnerable.
- Perdóname mi tesoro! Perdóname por causarte dolor! Fui un tonto! Yo permiti que te lastimaran, te puse en riesgo. - Dice aganchando la mirada. Mi hermano podrá ser lo que sea, pero sus sentimientos son genuinos y me duele verlo sufrir.
- Perdóname por dudar! - Dice ella y él atrapa su rostro llenándola de besos.
- No me beses, acabo de vómitar - Se sonroja al decirlo. Pero él no se detiene.
- Eso es lo de menos. Solo quiero sentirte en mis brazos, temí tanto perderte! -
- ¿Recibiste algo de ella? ¿Te dio alguna cosa? - Le pregunto y ella niega. - De todas maneras llamare al médico. No es normal que estés vomitando - Pero ella me detiene.
- Solo se me bajo el azúcar, debió ser por el malgenio. Ya me siento bien, no lo llames. Solo quiero descansar - Dice mientras se acomoda en la mitad de la cama y nos llama para que nos acostemos con ella.
A mi mente llega algo que leí en uno de los libros que le compramos hace poco.
- "Le bastaba tocarme para trasformar mi llanto en suspiros y mi enojo en deseo. Qué complaciente es el amor que todo lo perdona" - Le susurra al oído Daimon y ella lo mira alegre.
- ¿Lo leíste? - Le pregunta mientras sus ojos ruedan al libro que tiene en el nido.
- Lo leímos. Victoria del alma nuestra. "Te amé desde el primer momento en que te vi y te amaré por toda la eternidad" - Le susurro y ella suspira enamorada.