Capítulo 44
766palabras
2023-06-28 18:46
Entramos en el comedor y nos sentamos en los sofás. Mi padre y mi madre se sientan en el grande y nosotros dos en el pequeño, que forma una ele. Eros sigue sin soltarme de la mano y aunque sigo sintiéndome nerviosa, me tranquiliza saber que está a mi lado.
“Bueno, creo que tenemos algo de lo que hablar” dice mi padre. No parece enfadado, pero sí está serio, mi madre en cambio sigue sonriendo, tanto que parece que se le ha quedado así la boca para siempre.
“Papá, anoche Eros y yo decidimos empezar una relación y ser pareja”, digo con toda la serenidad que puedo, aunque siento que el corazón va a salirme por el pecho y la boca la tengo seca.
“Pero cariño, ¿qué ha sido de tu decisión de esperar a tu compañero? A penas faltan dos meses para tu cumpleaños, ¿crees que es sensato empezar con esto ahora? ¿Qué pasa si encuentras tu compañero? ¿O si la encuentra él? No es que me oponga a esto, ni mucho menos tengo ninguna oposición contra el alfa Eros, de hecho, creo que pocos podrían cuidar mejor de ti que él, visto lo visto, pero no quiero que sufras”. Mi padre suena sereno pero firme. Entonces entiendo que efectivamente no siente rechazo u objeción a mi relación con Eros, si no al hecho de que salga herida de esta relación.
“Alfa David, sé que falta poco para su transformación, pero también sé lo que siento yo por ella. Si encuentra su compañero y decide estar con él, no seré yo quien se oponga. Me apartaré y dejaré esta relación atrás si de esa manera ella es feliz, por qué no quiero lastimarla, no quiero ser yo quien le provoque sufrimiento a tu hija.” Eros habla tranquilo, y el corazón se me encoge, creo que es sincero cuando me dice que me quiere, y lo miro con cariño.
“Hija, has dejado atrás todas tus convicciones, ¿estás segura de lo que sientes y de que no te arrepentirás después?” me dice mi madre. Suena un poco seria, pero creo que dice esto para que me reafirme ante Eros y mi padre.
“Lo estoy. He estado mucho tiempo dudando, pero prefiero llorar por haber perdido que por no haber tenido de ninguna manera. Llevo tiempo ignorando lo que siento, y sé que voy a sufrir en cuanto él encuentre su compañera, por eso estaba evitando caer en algo así. Pero he comprendido que prefiero el sufrimiento si al menos tengo el recuerdo de haber estado con la persona a la que quiero”.
La persona a la que quiero. Lo he dicho, ¿en serio? Acabo de decirlo, ¿y delante de mis padres? Mierda. Eros me ha mirado sorprendido, igual que mis padres. Siento como mi nuca arde, no quería decir eso…aunque en el fondo sé que si lo he dicho es porqué lo siento.
“Voy a renunciar a mi compañera, si esa no eres tú, Ellie. Te lo dije ayer y lo digo ahora delante de tus padres, te quiero, y si tú estás dispuesta, serás mi luna”. Eros habla serio mirándome, y después mira a mis padres mientras yo trago saliva.
“Alfa Eros, sé que lo dices convencido, pero no sabes cómo es el vínculo de compañeros, probablemente no puedas mantener tu promesa…” empieza a decir mi padre.
“Soy consciente, pero estoy dispuesto a rechazar a mi compañera por Ellie”, vuelve a repetir. Mi padre suspira, sé que no cree que sea posible, pero mi madre lo está calmando constantemente agarrándole de la mano. Se levanta y se acerca a nosotros.
“Está bien, tú ya eres adulto y a Ellie le queda nada, se supone que ya sois responsables de vuestros actos y decisiones, así que, aunque yo pueda opinar otra cosa, de poco va a servir. Eso sí, si mi hija sale destrozada de esto, prendo fuego a tu manada”. Mi madre se ríe, pero yo no tengo demasiado claro si ha sido una broma o una amenaza velada. Tengo un poco de miedo, nunca he visto a mi padre así, pero siempre ha sido bastante protector conmigo.
“No le hagas caso, no le prenderá fuego a tu manada, solo a ti” dice mi madre a Eros riendo. Mi padre le da la mano a Eros mientras mi madre me abraza a mí y me dice en la oreja “lo sabía, ya era hora”, sonriendo. Cuando mi padre me abraza lo hace apretándome fuerte y me dice en el oído “una palabra y lo destrozo”, se aparta, sonriendo. Creo que nunca he sudado tanto como hoy.