Capítulo 52
1606palabras
2023-05-22 00:02
Con el entrecejo ligeramente fruncido, Jayden entró al hospital corriendo en dirección a la sala de emergencias.
Ayer, Susan se veía muy animada mientras me amenazaba. ¿Por qué ahora estaría en estas condiciones? No pude evitar sentir curiosidad, así que los seguí.
Él llevó a Susan directo a la sala de emergencias, y como la puerta quedó abierta, me paré directamente en frente, ya que no quería esconderme.

Jayden me daba la espalda, mientras que la mujer estaba sentada en la silla con el rostro pálido y se cubría la parte inferior del abdomen con las manos. Parecía que estaba sintiendo un dolor insoportable.
Cuando la doctora apareció, la cual tenía entre 40 o 50 años, miró a Jayden divertida y dijo: "Realmente eres un buen esposo. Ella solo tiene una dismenorrea común, pero estabas tan ansioso que la trajiste al hospital".
Me quedé impactada mientras mis oídos zumbaban. Mi pecho se sentía un poco apretado y una extraña sensación invadió mi cuerpo.
En ese momento, recordé que cuando a mí me dolió así de mucho el estómago, simplemente me dijo con indiferencia que buscara a Olivia. 
Sin embargo, ahora Susan solo tenía dolores menstruales, pero él se había preocupado tanto que la trajo de inmediato al hospital.
Estaba claro quién era más importante para él, y pensar que había sido tan ingenua como para creer que no tenía nada con ella.

Con esto en mente, sonreí amargamente y me apresuré a volver al área de pacientes hospitalizados.
No obstante, el dolor en mi corazón me hizo saber claramente que aún no lo había olvidado. Incluso aunque dijera que quería cortar toda relación con Jayden, todavía fantaseaba con tenerlo.
"Mia, todo son ilusiones. Deberías renunciar a él", me dije a mí misma en silencio.
......

A la mañana siguiente, el abuelo se despertó y, tal como había dicho el doctor, tuvo un derrame cerebral, el cual fue bastante serio.
Además de hablar con dificultad y presentar síntomas de parálisis media, también le resultaba difícil recordar ciertas cosas...
La noche anterior me la pasé todo el rato pensando en cómo consolarlo por la muerte de mi madre, pero debido al derrame, ni siquiera recordó eso al despertar...
Así, me senté junto a la cama y sostuve su mano mientras las lágrimas se agolpaban en mis ojos, pero las contuve. No fue sino hasta que fui al baño que me derrumbé y lloré, sintiéndome completamente desconsolada.
Durante los días siguientes, me quedé en el hospital. Brandon me había dicho que no me preocupara por el trabajo y que solo cuidara de mi abuelo. En cuanto a Eastern Star, le pedí permiso a Olivia para ausentarme.
Apenas escuchó que quería pedirle una licencia, ella no me hizo más preguntas y me la concedió de inmediato.
Sin embargo, Jayden parecía no saber nada al respecto. De todos modos, ni siquiera había intentado contactarme, por lo que probablemente ni se enteró de que no había ido a trabajar en los últimos días.
En fin, tampoco estaba de ánimos para preocuparme tanto por eso. Lo único que hacía era estar todo el día en el hospital sintiéndome culpable.
A veces, sentía que realmente le traía perdición a quienes se preocupaban por mí, ya que todas esas personas parecían acabar mal.
Mi tía tenía que trabajar para mantener a la familia, así que no podía venir aquí todos los días. Allison tampoco se había mostrado durante tres o cuatro días, pero Brandon ya había venido varias veces.
Cuando la condición de mi abuelo se estabilizó, miré el saldo que me quedaba en mi cuenta bancaria y decidí contratar a un cuidador de tiempo completo para que velara por él.
Después de confirmar que tenía suficiente dinero en para cubrir sus gastos médicos, salí del hospital, decidida a volver al trabajo al día siguiente.
No obstante, solo había podido pagar por el plan hospitalario más básico para mi abuelo, por lo que no podía permitirme estar sin ingresos en este momento tan crítico.
Ya estaba oscureciendo, mas tan pronto como salí del hospital, un Audi se detuvo frente a mí: era el vehículo de Brandon.
Tras bajar la ventanilla, él me dijo: "Sube al auto. Te llevaré a casa".
Después de tantos días en el hospital, estaba agotada tanto física como mentalmente, así que accedí de inmediato y me subí al auto.
"Muchas gracias por venir al hospital a visitar a mi abuelo", le dije, apretando los labios.
Él sonrió suavemente y me dijo: "No es necesario que me agradezcas. Esto es lo que un líder debe hacer por sus empleados".
Sus palabras me hicieron sonreír, mas guardé silencio.
En vez de ir directamente a mi casa, él tomó un desvío y pasó al supermercado a comprar verduras antes de llevarme de regreso.
Yo creí que solo estaba comprando víveres para él porque le quedaba de paso, pero, inesperadamente, al bajar del auto, tomó las bolsas de verduras frescas recién compradas y me dijo: "Tú me cocinaste fideos la última vez, así que déjame devolverte el favor. Solo necesito que me prestes tu cocina. ¿Lo harías?".
Sus palabras me dejaron impactada y no tuve tiempo de reaccionar, y para cuando quise negarme, él ya había cerrado la puerta del auto, así que le dije cortésmente: "Por supuesto. No hay problema. Pero permítame que yo cocine".
Después de todo, no había razón para que un jefe le cocinara a su asistente.
Entonces, él me miró con lo que parecía ser lástima y me dijo: "Mírate. Estás completamente demacrada. Será mejor que llegues a sentarte y esperes a que esté lista la cena".
Como llevaba varios días de guardia en el hospital, mi rostro realmente estaba hecho un desastre.
Por lo mismo, decidí no resistirme más, por lo que tomé algunas bolsas y le dije con una sonrisa: "Está bien. Muchas gracias, señor Johson".
Cuando me di la vuelta para entrar al edificio, alcancé a divisar un automóvil estacionado no muy lejos, y parecía ser el auto de Jayden, pero no le presté mucha atención.
Simplemente sacudí la cabeza y entré en el ascensor. Seguramente estaba viendo cosas. ¿Por qué razón vendría a visitarme si no?
Como creí que Brandon no sabía cocinar, estaba preparada para ayudarlo en cualquier momento, pero me sorprendí al darme cuenta de que sus habilidades culinarias eran mucho mejores que las mías.
A lo largo de estos días había comido mucha comida rápida, y ahora que veía comida casera, mi apetito fue tan bestial que me comí 3 platos y un tazón de sopa.
Después de comer y lavar los platos, ya era bastante tarde, así que acompañé a Brandon a su auto.
Cuando estaba a punto de darme la vuelta para volver a casa, él me detuvo y me dijo: "Mia".
"¿Qué sucede?", le dije sin pensar al tiempo que me detenía.
"Si lo que dije la última vez fuera cierto, ¿qué harías?", me preguntó con un tono serio y cauteloso.
Yo no entendí lo que quiso decirme, así que alcé la mirada y le dije: "¿Qué fue lo que dijo?".
Entonces, me tomó de la muñeca y, acariciándola suavemente, sentenció: "Eso sobre querer estar contigo".
Sus palabras me dejaron completamente impactada, por lo que lo miré aturdida, sin poder decir nada por un buen rato.
Él era un hombre bueno y excelente en todo aspecto, mas cuando lo escuché decir eso, no me sentí para nada feliz.
¿Por qué? Probablemente porque había otra persona en mi corazón y, a excepción de ella, nadie más podía ganarse mi amor.
"Señor Johnson, es muy amable de su parte...", balbuceé mientras pensaba en qué decir.
De improviso, él sonrió con impotencia e, interrumpiéndome, me dijo con un tono cariñoso: "Mia, no tienes por qué responder ahora mismo, ¿de acuerdo? Tengo mucho tiempo para esperar a que me des la oportunidad de cuidarte".
No dijo que esperaría a que me enamorara de él, solo dijo que quería que le diera la oportunidad de cuidarme.
De inmediato entendí que estaba haciendo muchas concesiones par conmigo porque no quería presionarme.
Al tener un hombre tan increíble diciéndome esas palabras, mentiría si dijera que no me conmoví un poco.
De hecho, sentí un poco de calidez en mi corazón, pero no podía soportar mentirle, así que me disculpé en voz baja y le dije: "Es un poco difícil para mí comenzar una nueva relación ahora..."
"Sé lo que quieres decir, pero no importa lo difícil que sea y cuánto tiempo te tome, estoy dispuesto a esperar", volvió a interrumpirme con un tono firme, como si me lo estuviera jurando.
Al ver su actitud tan humilde, abrí la boca para decir algo, pero no supe qué.
"Pensé que podría mantener esto en secreto y cuidarte de esa manera, pero al verte en el hospital estos días, realmente no pude evitarlo. Quiero cuidarte y no quiero verte sufrir tanto sola".
"Pero no te obligaré a nada. Ya me voy, así que vuelve a casa", me dijo a la vez que me daba lentamente un cálido beso en la frente.
A continuación, regresó a su auto y se marchó mientras yo seguía estupefacta.
Yo ya había intuido que podía ser cierto eso de que Brandon quería algo conmigo. Al fin y al cabo, las mujeres somos sensibles a esa clase de cosas.
Sin embargo, no esperaba que me lo dijera en este momento, así que me tomó por sorpresa.
Mientras presionaba el botón del ascensor, mi mente estaba hecha un lío.
De pronto, a mis espaldas escuché una voz a la que había extrañado mucho decir con tono enojado:"¿No viniste a trabajar estos días solo para estar con él?".