Capítulo 24
1245palabras
2023-04-12 06:15
Entramos al laboratorio de bilogía y me ubiqué en un puesto al lado de mi amiga por si tendríamos que hacer un extraño experimento, ya que ella no se negaría a ayudarme. A Valeria realmente no la había considerado mi amiga de corazón, pocas eran las cosas que le confiaba, pero estaba aprovechando su compañía diariamente para que me fuera bien en las clases. Y esta era una materia de mi poco entendimiento.
Saqué mi cuaderno para copiar cualquier palabra que estuviese escrita en el pizarrón, sabía que las informaciones sobre genes y microorganismos celulares y esas cosas que se diera no quedarían grabadas en mi cerebro, de igual manera debía próximamente buscar en internet para realizar las tareas.
La profesora empezó a hablar y hablar y de repente paré la oreja.

-Por este motivo el ADN es importante aprenderlo, diariamente los doctores requieren hacer estudios para detectar enfermedades y este es el principal protagonista –expresó la profesora mostrando un dibujo que parecía serpientes encadenadas.
Y esa simple palabra captó mi atención, la clase de la profesora se asociaba con esa idea que caminaba en mi mente de día y soñaba conmigo por las noches.
Al seguir escuchando la explicación empecé a prestar más atención.
-¿Ese es el dibujito del ADN que se utiliza para comprobar el parentesco de una persona?
-Sí así lo pintan –me explicó Valeria cuando escuchó mi pregunta-. La biología es tan importante. Imagínate que salgas embarazada y no sepas de quién es el papá. A través de una prueba de ADN simplemente podrás obtener el resultado.
-Ah sí, ya veo que es interesante –Le dije cuando mis pupilas se abrieron de la impresión por su comentario- ‘‘Si supiera que eso es verdad’’ –Pensé y luego negué con la cabeza- ‘‘Jamás se lo diré’’ ‘‘Si ella conociera la adolescente desastrosa que fui se decepcionaría de mí y ya no sería más mi inteligente compañera de apoyo’’.

-Existen varios métodos para descubrir si un niño es hijo de un hombre o una mujer o no, estos son…
-¿Por qué no lo copia en el pizarrón? Más lento profe, más lento. Susurré en voz baja mientras mi lápiz trataba de alcanzar las palabras y que todo estuviese plasmado en mi cuaderno.
-Porque es para investigarlo, ella lo dice al aire pero se supone que no todos lo van a captar, hay que esperar las indicaciones de la evaluación.
-Silencio Valeria, no me dejas escuchar a la profesora –dije cuando mi atención enfocaba más allá del escritorio.

-Qué raro ¿tu mandándome a callar para atender una clase? Pensé que odiabas esta área… aunque detestas casi todas las materias, lo habías mencionado.
Yo sabía que Valeria entendía todo lo que se daba sin tener que prestar atención, aunque yo predecía que se burlaba de mí al verme copiar sin parar. El tema era algo nuevo y sumamente interesante para mi vida personal.
-¿Hay que hacer una maqueta entonces? Que fastidio, yo no sé de manualidades –refunfuñe cuando salíamos del laboratorio.
-No es una simple maqueta Nathalia, es una escultura de cincuenta centímetros de la cadena del ADN y el ARN con sus componentes y sus descripciones.
-Como sea, la harás tu ¿verdad? –Le pregunté a Valeria que me acababa de dar una explicación complicada.
-La haremos todas, es de tres personas –Intervino Sofía.
-Y deberíamos ir a investigar de una vez y pasar por la tienda para comprar los materiales –habló Valeria.
-¡Pero si es para la próxima semana! Aún tenemos tiempo de hacer eso –expresé con repulsión.
-Lo fastidioso es que hay que exponerla, debemos grabar en nuestra cabeza todo ese tema –dijo Sofía hojeando su cuaderno mientras caminábamos.
-Por eso, debemos dividirnos los puntos, vamos a pasar por la tienda e ir a mi casa a investigar –expresó Valeria.
-Adelántense, yo voy más tarde, debo hacer algo importante –dije frenando mi paso para andar en otra dirección.
-¿Que más importante que esto? –expresó Valeria frunciendo el ceño.
Levanté la mano para dar un saludo de despedida; les di la espalda para cruzar la calle.
-Esa chica es muy rara, jamás le gusta reunirse. ¿Qué es lo que hace en su tiempo libre?
-Al parecer sus padres son muy estrictos y no la dejan salir –Escuché ese comentario de la voz de Valeria respondiéndole a Sofía.
-¿Ni para estudiar? Eso no me lo creo, hace semanas subió una foto en sus redes donde andaba en una fiesta. Para eso si tiene tiempo.
Me enojé al escuchar ese tonito de Sofía quejándose de mí antes de que la distancia apagara el sonido de las palabras.
Mi rostro se demacró al instante, era cierto que ya poco socializaba, detestaba reunirme con compañeras, el tiempo que pasé internada alrededor de locos me hizo desconfiar de todo el mundo. Me costaría ser como antes. Pero más adelante lo intentaría –‘‘Por ahora tengo que concentrarme en lo que es más importante para mí’’.
-Necesito conseguir información para realizar una prueba de ADN, por favor. Le dije a la secretaria del laboratorio médico.
-Ok, ¿quiénes serán? –Ella preguntó.
-Mi hija y yo. Quiero que se certifique que soy la madre.
-¿Y la niña está aquí? –Indagó ella mirando a su alrededor donde solo habían personas y niños en la sala de espera.
-No, no vino conmigo. ¿Es necesario que la traiga?
-Sí, para hacer la prueba mediante la extracción de sangre intravenosa.
Me mordí los labios al escuchar la explicación de la secretaria. Era imposible que yo pudiera trasladar a la bebé hasta allí. Más aún cuando todavía no conocía a la hija de Darwin.
-¿Y no hay otro tipo de método para sacar el resultado del ADN? –Le pregunté rogando que mi respuesta fuese afirmativa. Ya que viniendo de la clase de biología sabía que la extracción de sangre no era la única manera existente.
-Sí, pero las demás pruebas no están avaladas por el ministerio de salud. Debido a que como los individuos no estarán presentes se estará irrespetando el derecho personal.
-Pero había escuchado que aquí las hacían por medio del cabello o la saliva, algo así –le dije sin tener certeza de mis palabras, pero intuyendo que ella me ocultaba algo.
-Para evitar esos rumores solo se les da la información a aquellos que puedan pagarla –expresó mirando de arriba abajo mi uniforme de colegiala.
-¡Es algo muy importante para mí! Solo porque soy una adolescente no debe pensar que no tengo dinero. ¿Por qué? ¿Las otras pruebas son muy costosas? –Pregunté frunciendo el ceño.
-Un precio más elevado.
-¡Dígame cuánto! Mi tío tiene mucho dinero. ¿O acaso usted cree que me mantengo sola? –Hablé golpeando las palabras del enojo que salía de mi boca.
-Ya que inste aquí tiene toda la información –Me dijo seriamente- Cuando tenga la cantidad estimada venga en el horario indicado y traiga las muestras.
-Gracias –le contesté y guardé el papel.
-Solo debo conseguir convencer a mis tíos para que me den ese dinero -dije mientras andaba por la cera de la avenida-. Eso me será un poco difícil, debido a que ellos la creen muerta, aunque tengo en mi poder la constancia que… -A mi mente llegó el recuerdo de todo el escándalo que armé hace semanas cuando mis tíos no quisieron escucharme, ya había intentado explicárselo… ¿qué más puedo hacer? –Sin poder responderme esa incógnita a mi mente llegó otro enunciado-. Además me hace falta la muestra directa. ¿Cuándo tendré la oportunidad de conocer personalmente a la niña?