Capítulo 66
1639palabras
2023-01-17 09:30
Era otro día normal de trabajo y Elissa estaba en su oficina completando sus labores cuando Benjamin la llamó para pedirle que le trajera unos archivos que necesitaba. Entonces, ella tomó la carpeta donde tenía archivado los documentos y se dirigió a su oficina, atravesando el área común de trabajo. 
Sin embargo, justo cuando pasaba por ahí, vio a Georgina junto a una mujer que parecía estar en sus cuarentas saliendo del ascensor, y cuando sus miradas se cruzaron, Elissa pudo sentir el rencor aún en la mirada de aquella mujer.
Para colmo, ambas se dirigían al mismo lugar, lo cual hacía todo más incómodo. "¿A qué vas a la oficina de Benjamin?", preguntó Georgina descortésmente.

"El jefe me pidió un archivo, así que se lo voy a entregar", respondió Elissa educadamente.
"¿Cuál es su nombre, señorita?", preguntó la mujer desconocida con una sonrisa apretada y evidentemente falsa.
“Elissa Williams”.
Al escuchar su nombre, la mueca que se dibujó en el rostro de la mujer implicaba que ya sabía quién era ella, a pesar de estar conociéndola por primera vez. “Yo soy la madre de Georgina, Britanny", se presentó entonces la señora, aunque Elissa ya presentía que ese era el caso, ya que ella y su hija tenían el cabello rubio fresa, unos rostros brillantes con forma de corazón y el mismo color de ojos.
"Dame eso; yo puedo entregárselo”, insistió Georgina, arrebatándole los documentos a Elissa de las manos.
"No, no puedes, porque tengo que explicarle algunas cosas”, respondió la joven, quitándole los archivos de vuelta.

Ante esta afrenta, Georgina se quedó mirándola mientras apretaba los dientes, hasta que su madre apareció y le dijo que la dejara ir por esta vez. Así, Elissa llamó a la oficina de Benjamin y entró con la madre y la hija siguiéndole los pasos.
Cuando Benjamin vio a Elissa entrando, le dedicó una cálida sonrisa, la cual se desvaneció inmediatamente cuando vio a Georgina y su madre detrás de ella. "¿Britanny? ¡Qué sorpresa!", exclamó él.
"Me alegro de que estés sorprendido", dijo Brittany con una sonrisa al tiempo que se acercaba para abrazarlo. Benjamin también se inclinó para abrazarla con formalidad, pero al instante se echó para atrás y le preguntó sobre su repentina aparición.
“Cuando me enteré de que tus padres vendrían aquí, pensé en unirme a ellos y venir también. Al fin y al cabo, me hubiese aburrido sola en B City de todas formas".

“Qué genial, pero si me hubieras dicho antes, habría ido a buscarte al aeropuerto”, acotó el hombre. Georgina sonrió satisfecha al ver cómo Benjamin hablaba con su madre como si fuera la suya propia, lo cual le dio ganas de que ese lazo se mantuviera por siempre y se fortaleciera todavía más.
No obstante, Benjamin estaba tan sorprendido por la llegada de la señora que por un momento se olvidó de Elissa, pero cuando cayó en cuenta, le dijo a esta: “Oh, mmm, Elissa, puedes dejar el archivo sobre mi escritorio y una vez que hayas terminado el proyecto de dibujo, regresa aquí".
Elissa se dio cuenta de inmediato de que tenía que retirarse ya, antes de que el ambiente se tornara más incómodo, lo cual era completamente comprensible, pues no era agradable estar parada allí mientras Benjamin saludaba a Britanny como si fueran familia. Por lo mismo, la joven suspiró y salió de la oficina, cerrando la puerta tras ella.
"Bueno, ¿qué te parece si te doy un recorrido por la oficina, Brittany?", preguntó Benjamin.
La señora miró a su hija y luego volvió a mirar al hombre, y dijo: “Bueno, sí. Me encantaría hacer un recorrido por la empresa… pero hay algo que quiero comentarte”.
"¿Qué cosa?".
“No sé qué pasó entre ustedes dos, pero esto es serio”, dijo ella a modo de advertencia, lo que hizo que él se pusiera un tanto nervioso y pensara si Georgina ya había hecho alguna estupidez, mas después de una pausa, la madre sentenció: “Gina está embarazada”.
A Benjamin le tomó un par de segundos registrar lo que acababa de escuchar. ¿Georgina embarazada? "¿Disculpa, qué fue lo que dijiste?", preguntó entonces, consternado.
“Mira hijo, cuando dos personas pelean, siempre encuentran una manera de arreglar las cosas. Por eso, tienen que hablar sobre esto, ya que terminarlo aquí no resolverá nada”.
“Brittany, no estoy seguro de lo que estás insinuando. ¿Me estás diciendo que Gina está embarazada?", inquirió él, sin poder creerlo todavía, y enseguida miró a la supuesta embarazada y le preguntó: "Gina, ¿es esto verdad?".
Sin embargo, la chica solo desvió la mirada mientras se mordía el labio inferior, por lo mismo, Britanny, que ya sabía cómo manipular a Benjamin, prosiguió hablando: "Sí, hijo, claro que está embarazada ¡Nos enteramos de esto ayer y creíamos que eran buenas noticias! Pero mi bebé no se ve feliz porque me dijo que rompiste vuestro compromiso ¿Es eso cierto, Ben?".
"¿Estáis seguras de eso? porque yo nunca-", dijo Benjamin sin poder creerlo, mas se detuvo, pues pensó que sería inapropiado decir lo que iba a decir frente a Brittany. La verdad es que él nunca había tenido una relación física con Georgina; solo la había besado una vez en un juego de verdad o reto y eso fue todo. Por eso, no había forma de que ella estuviera esperando un bebé de él.
“Ben, sé que esto puede ser impactante para ti, pero no puedes ignorar que estoy cargando a tu bebé en mi vientre”, dijo Georgina a la vez que derramaba unas falsas lágrimas de angustia y colocaba la palma de su mano sobre su estómago plano. Sin embargo, a Benjamin le resultaba difícil de creer esto, dado que ya se había enterado de la clase de tácticas que ella había usado contra Elissa.
"¿Ya le contaste a mis padres sobre esto?", preguntó él, aunque creía que no, ya que había hablado con su padre esa misma mañana y este le había sugerido que persiguiera a Elissa y que él ya no lo obligaría a casarse con Georgina. Esto lo dejó sumamente sorprendido, pues no entendía como su padre, siendo tan estricto, había cambiado su opinión sobre la joven, pero le alegraba saber que al fin estaban de acuerdo. Por otra parte, Diane, su madre, lo apoyaba en todas sus decisiones, y aunque él no le había contado sobre Elissa específicamente, sí le había dicho que existía alguien que realmente le gustaba.
“No, no lo hemos hecho todavía. Creo que sería razonable que ustedes dos hablaran primero. Quiero decir, ambos son responsables de esto”, dijo Brittany con el semblante serio.
"Cierto, cierto”, respondió Benjamin, un tanto aliviado, y luego preguntó dulcemente: "Brittany, ¿podrías darnos unos minutos a solas?".
“Oh, claro. Por supuesto. Buscaba las cosas rápidamente. Haré un recorrido para entonces”, dijo con una sonrisa, su cabello corto rebotando de un lado a otro. Brittany salió, dejándolos a los dos solos.
Una vez que se hubo ido, Benjamin miró a Georgina y, frunciendo el ceño, la increpó: “Dime la verdad, Gina. ¿Qué estás planeando? ¡Está claro que no pude haberte embarazado!”.
Georgina lo miró boquiabierta y dijo: "¿Hablas en serio, Ben? ¿Por qué mentiría sobre esto?".
"No lo sé, pero nunca hemos tenido contacto físico de ese tipo. Dime, Gina. ¿Cómo diablos pude dejarte embarazada si ni siquiera nos hemos acostado?".
“¡Dios mío, Ben! ¿En serio no te acuerdas?", exclamó asombrada a la vez que se cubría la boca con los dedos.
"¿Acordarme de qué?".
"¡Pasamos una noche juntos, Ben!", susurró molesta.
"¿Qué? No es posible", espetó él.
"¡No intentes negarlo, Ben! Ese día que viniste a cenar a nuestra casa… bebimos demasiado vino y después terminamos revolcándonos en mi cama”, dijo ella.
Benjamin se frotó la frente con frustración, pues claramente no tenía idea de lo que ella estaba hablando, ya que él no tenía ningún recuerdo sobre dicha noche. ¿De verdad se acostó con ella?
“A la mañana siguiente, me desperté antes que tú porque tenía trabajo que hacer y no pude darte los buenos días, pero pensé que sabías. Ben, realmente estás comportándote como un imbécil”.
Después de escucharla, él consideró que ella podía estar diciendo la verdad. Por eso, cuando ella comenzó a llorar, él se sintió mal, así que para consolarla le dio un cálido abrazo y le dijo con ternura: “Oye, perdóname. Lo que pasa es que no tengo ningún recuerdo de lo que me dices... .y todo esto es tan repentino...  que realmente no sé cómo reaccionar”.
"Está bien, pero, ¿qué hacemos ahora?", preguntó ella.
Benjamin no podía decirle que no quería tener un bebé con ella ni podía pedirle que lo abortara, pues eso sería una canallada. Entonces, como él había cometido el error, él tenía que hacerse cargo, así que, suspirando, dijo: “Tenemos que contarle a mis padres”.
"¿Eso significa que te casarás conmigo?", preguntó Georgina, y su voz sonaba tan espranzada que él quedó confundido.
"No lo sé. Lo único que importa ahora es el bebé”.
“Ben, no puedo criar al bebé sin un padre. ¿Sabes a lo que me refiero, verdad?”, dijo ella lastimeramente, dando un paso hacia él.
"No te preocupes. No te abandonaré a ti ni al bebé”, le aseguró él. lo cual dejó a Georgina extaciada, pues su plan había tenido éxito, y todo gracias a que su madre había tenido una idea tan brillante.
"Gracias. Ahora tengo que irme, pero podemos vernos en tu casa esta noche, ¿te parece?", dijo ellá.
Benjamin asintió con la cabeza y luego sae dio la vuelta mientras metía las manos en los bolsillos. "Entonces nos vemos luego, Ben", se despidió ella para después dejar la oficina sonriendo por dentro.
A georgina no le preocupaba que descubrieran su mentira, porque para cuando alguien comenzara a sospechar, ella ya habría transformado la mentira en verdad, pues tendría mucho tiempo y oportunidades para tener un bebé con Benjamin.