Por fin llegamos al hotel, un auto nos había recogido al llegar al aeropuerto de la pequeña ciudad, nos dejó justo frente a él, nos bajamos del auto y a simple vista se veía muy hermoso el lugar, a medida que nos fuimos adentrando lo pude ver de cerca, este no se trataba de un lugar lujoso solamente, lo que realmente resaltaba e impresionaba y por lo que me gustó era por lo familiar que se sentía el estar allí, no era como otros hoteles, este por sus cimientos se veía como si tuviera una historia que contar.
Por lo que Kiram me había apenas contado, su hermana desde pequeña siempre quiso hacer su boda de ensueño aquí, y ahora que lo podía ver por mí misma, ¿quién no lo hubiese elegido? era un lugar perfecto, Kiram también me comento mientras veníamos en el automóvil que todo por aquí era zona costera por lo que solo había paisajes hermosos alrededor, un verdadero paraíso.
También me había explicado que estaríamos toda una semana ya que era tradición reunir a la familia y amigos allegados del novio y de la novia, y así ambos círculos podrían familiarizarse, en esa semana se harían recepciones, comidas, entre otras múltiples actividades, ¨cosas que solo se podían permitir los ricos¨ pensaba yo.

Eche un vistazo al lugar y solo veía sitios aún más encantadores, no podía dejar de ver todo alrededor como tonta, es que esas paredes blancas otras echas a base de rocas, algunos troncos como cimientos que sostenían, el piso de madera opaca que lo hacía ver aún más rústico pero elegante al mismo tiempo, el diseño era de verdad maravilloso a la vista de quien ¿es lo podían apreciar "Este sería mi nuevo lugar favorito".
Antes de que pudiéramos decir algo dado qué ya estábamos en la parte que parecía ser la recepción, salto una mujer detrás del mostrador.
-Buenas tardes señor Kiram, esperamos que haya tenido buen viaje- Saludo amable, aunque un poco coqueta a mi parecer.
Ella lo saludo como si lo conociera de toda la vida, aunque puedo imaginar que a él lo debía de conocer medio mundo, pero tomando en cuenta lo que me había contado antes me dio a entender que de siempre su familia frecuentaba este hotel, y era obvio porque, de verdad parecía ser mágico el lugar.
-Buenas tardes señorita Carol, muchas gracias, por favor me puede dar la tarjeta de acceso de mi habitación- El hombre fue amable, pero con su característica seriedad.
¿Señorita Carol? No pensé que el tipo se tomara el tiempo de saber el nombre de una simple trabajadora por más veces que hubiera visitado el lugar, vaya sorpresa.

-Ya toda la familia y amigos están instalados? – Pregunto a la mujer.
-Si señor, aunque aún faltan unos pocos miembros por llegar, pero son la minoría- Dijo mientras le entregaba la tarjeta de acceso.
-Excelente- Dijo satisfecho.
Nos fuimos a la habitación, y cabe destacar que yo por dentro estaba un poco en pánico ya que estaríamos los dos en una misma habitación solos, solo esperaba que tuviera al menos dos camas.

"Niña compórtate como una mujercita grande y no muestres miedo ante el" Me decía a mí misma a medida que íbamos camino a la habitación.
-Puedo ver que eres muy popular por aquí- Mencione por lo que había visto, aunque lo que quería lograr era distraerme un poco de mis nervios.
-Algo así- Vi de reojo que medio sonrió. -Aquí es- Abrió la puerta de la habitación.
" Y Wow..."
-Es realmente bella- Musite.
Me observo. - Lo es-
Exploré un poco los espacios ya que era enorme, tenía una pequeña sala de estar, había dos puertas así que decidí descubrir que había tras ellas, una era el baño tenía un jacuzzi "perfecto" me dije, y la otra puerta solo parecía ser un closet bastante espacioso, la gran habitación en una esquina tenía una mini cocina y bar, las ventanas eran enormes con una vista espectacular que daba al mar.
Por un momento mi vista se fue a un punto de la habitación el cual no me había percatado al entrar, por la impresión hasta se me había olvidado los nervios que tenía en principio, justo ahora preste más atención al pequeño detalle ¿Una sola cama? "Mierda".
Si lo pensaba bien, mi lógica me decía que este hombre por supuesto no iba a permitir que ambos compartiéramos la cama, no con alguien a quien soportaba tan poco como a mí, y en este momento lo que sentía por mí me parecía más beneficioso de lo habitual.
-Ye terminaste tu exploración? – Pregunto.
-Digamos que si- Medio sonreí.
Continuaba algo interrogante de lo siguiente que iba a pasar...
-¿Kiram? -
-¿Sí? -
-Porque hay solo una cama? - Me sentía algo avergonzada por preguntar eso, pero lo disimule bien, eso creía.
-Porque se supone somos una pareja, y si a mi madre se le da por venir a visitarnos y ve dos camas, ¿no crees que eso nos pondría en evidencia? -
-Eso creo- Le quité la vista, y comencé a ver para todos lados. -Pero tu madre no tendría por qué venir ¿no? - Hice una mueca de duda.
-Se ve que no la conoces, ella hará de todo para saber que esto es real- Soltó con evidencia.
-Mmm...- No supe cómo más refutar, al menos por ahora.
-Puedes ducharte si deseas y cambiarte a algo más ligero, por esta noche puedes explorar el lugar, mañana conocerás a mi madre y demás familiares- Comento.
-Okey... y tú que harás? - Pregunte, ¿se suponía que estaría sola? Aunque si era así no me importaba.
-Yo estaré aquí revisando algunas cosas en mi laptop- Respondió con desinterés.
-Que divertido eres- Me burle. -Ahora entiendo mejor tu soltería- Eso lo mencioné más bajito.
El me devolvió una mueca... Me adentre al baño tomándole la palabra al imbécil respecto a tomar una ducha, estaba segura de que apenas puse un pie ahí dentro ese jacuzzi me hizo ojitos para que entrara en él.
Pero antes de que me relajara y olvidara del mundo externo, le escribí rápidamente a mi mamá para decirle que había llegado bien, también le dejé un mensaje a mi mejor amiga Anna, ella sabía la verdad de todo esto que estaba haciendo, le conté que había aceptado el trato y todo un día después del día que acepte en el hospital.
...
Luego de mi relajador baño, me vestí con unos jeans y una blusa fresca, me peiné y salí.
No había traído ropa adecuada para este lugar además solo metí unas cuantas cosas por lo que me había dicho el hombre, de que llegando iba a tener que comprar algunas cosas nuevas.
-Y no es eso algo incómodo y caluroso para este lugar? - Me miró de arriba abajo.
El hombre estaba sentado en la salita de estar con su laptop.
-"Lleva maleta ligera"- Lo imite recordándole lo que me había dicho en su casa ayer. -Además no me dijiste a donde iríamos, pensé que no se, estaríamos en la ciudad o algo así-
Y eso pensé, como él y su familia son tan elegantes me imagine que no se, quizás la boda seria en uno de esos lugares de super lujo, no es que esté lugar no diera la talla, en definitiva, si, solo que era un lugar más acogedor y no pensaría que a personas de la élite más alta lo tendrían como primera opción para sus eventos.
-Preferirías estar en la ciudad? - Pregunto curioso.
-Obvio no, mira este lugar, es más que perfecto- Dije señalando todo alrededor con evidente entusiasmo.
-Bueno, mañana iras de compras-
-Bien, por el momento saldré mis ojos necesitan ver todo este lugar mejor- Dije.
Puede que esto sea trabajo, puede que no haya viajado con la persona más divertida o que me agrade, pero lo cierto era que sola o no iba a aprovechar lo más que pudiera este lugar.
-Okey, ten cuidado, trata de no hacer nada que yo no haría-
Una carcajada salió de mí.
-No me creas tan aburrida- Y sin esperar respuesta, salí.
Estaba caminando por los pasillos del hotel admirando cada detalle uno era más bonito que el otro, me encantaba como a algo rústico se le podía dar tanta elegancia, y por otro lado tenía un toque vintage, continúe caminando hasta que llegue a la recepción, las personas que se encontraban allí se me quedaron viendo con curiosidad, suponía que era porque me habían visto llegar con Kiram.
-Buenas noches- Salude. -Me indica por favor por cual salida se llega a la playa? - Pregunté a la rubia que nos había recibido antes.
-Buenas noches señorita, por la de allá- Señaló la puerta.
-Muchas gracias- Sonreí y me puse en marcha.
Al salir era aún más hermoso, estaba haciendo un clima perfecto la brisa fresca despeinaba mi cabello, pase por una piscina enorme al final en una esquina pude ver un bar, había una que otras personas allí, camine y camine hasta que llegué a la playa quite mis zapatos y me senté a la orilla del mar, respirar el aire libre era la mejor terapia del mundo, el agua llegaba a mis pies y se sentía realmente satisfactorio cuando los mojaba.
-Esto es vida- Inhale y exhale con profundidad.
...
Me relajé tanto que cuando vi en mi teléfono ya eran las 09:30pm era algo tarde, el tiempo siempre pasaba rápido cuando nos estábamos divirtiendo. Me levante y así descalza como estaba camine con mis zapatos en las manos de regreso a la habitación.
"Lo mejor es que vaya a dormir, mañana sera un dia duró" Pensé.
Regrese por el mismo camino de antes, pase por la piscina, no sé si era el único, pero era el que yo conocía, cuando pase justo por allí de nuevo pude ver que había más personas y el ambiente estaba aún más activo, tenían música suave y las personas bebían y hablaban.
Aceleré un poco el paso para llegar más rápido a la entrada trasera del hotel, y en eso se me atravesó una persona "Mierda" para cuando me di cuenta ya la había empujado sin querer, ella callo botando toda su bebida encima de su ropa.
-Lo.. Lo siento- Musite avergonzada.
-Acaso eres estúpida o qué? ¿no vez por dónde vas? - La mujer dijo con furia.
"Pero que le pasa a esta? solo fue un accidente"
- ¿Es que aparte de torpe muda, que no hablas mocosa? – Espeto nuevamente.
Esta tipa ya me estaba colmando la paciencia con su actitud altanera y arrogante, si no paraba ahora mismo no iba a poder contenerme luego.
-So.. Solo fue un accidente- Dije apretando los dientes con fuerza.
Y ni hablar de mis puños, que ya se estaban formando en mis manos por la rabia que me estaba causando su extrema actitud.