POV KIRAM
La salvaje se había acabado de ir, un instante luego me sumergí en mis pensamientos durante un momento, tras pensarlo una y otra vez no podía creer que habíamos acordado todo esto que estábamos a nada de hacer, muy dentro de mí, me sentía como un niño que inventaba mentiras a su madre, aunque esto era un poco peor, realmente era un hombre de 33 años llevando una novia falsa mucho menor que el a un evento importante de su familia, que en esta ocasión, era la boda de su hermana donde estarían las dos mujeres más importantes de su vida, mierda sí que estaba demente por pensar en hacer algo así. No pude evitar que una sonrisa se escapara cuando pensé en que quizás se me había pegado algo de locura a consecuencia de haber conocido a esa chica lunática.
Habíamos dejando ya los puntos en claro cómo era debido en un caso de estos, que era casi lo mismo que hacer un acuerdo comercial, a pesar de eso, estuvo bien para mí que no quisiera hacer un contrato legal, normalmente no me hubiese tomado un acuerdo de ningún tipo tan a la ligera, pero luego pensé que sería una semana y que no era un papel difícil de llevar a cabo, solo se pondría difícil si existiera la posibilidad de que alguno de los dos se enamorara del otro, pero eso era básicamente imposible de que sucediera.

Cada vez estaba viendo con menos repulsión a la chica y eso estaba bien, ya que pasaría una semana entera con ella.
Respecto a los negocios, Liam mi amigo y mano derecha se haría cargo de forma presencial por esa semana y viajaría para la boda justo un día antes de su realización, por mi parte solo estaría de forma remota durante ese tiempo, pues no podía darme el lujo de desaparecer por completo.
...
Ya era la noche, las horas habían pasado mientras arreglaba algunos pendientes en mi estudio en casa, también había resuelto la salida en mi Jet con el piloto, me informó que podríamos ir saliendo mañana a las 05:00pm, es por eso que decidí escribirle a Isabella alias la salvaje, para darle la información y que pudiera tener listo todo.
MENSAJE.
Kiram: Mañana en mi casa a las 04:30pm, se puntual novia.

¨Si, decidí bromear un poco¨
Bella: Muy bien, estoy ansiosa por volverte a ver novio (nótese el sarcasmo).
No pude evitar sentirme algo divertido por la falsa dulzura de mi novia falsa…
...

Pensé que quizás debía llamar a mi madre para no tomarla por sorpresa solo llegando sin más, además sé que iba a emocionarse mucho tras darle la noticia, solo esperaba que no lo viera sospechoso.
Le marque, sonaron al menos dos tonos antes de que respondiera...
-Hijo? te acordaste de que tienes madre- Hablo del otro lado como siempre tan sarcástica y divertida.
-Hola madre, ¿cómo estás? siempre tan divertida-
-Muy bien cielo, espero que me hayas llamado para informarme que ya vienes-
-Si madre, mañana saldremos al final de la tarde, quería decirte que no iré solo- Listo lo dije.
-Entonces vienes con Samantha? - Pregunto entre sorprendida y entusiasta.
-No. Aún no quería decirlo sin embargo mañana lo ibas a descubrir, la verdad es que iré con mi novia- Y justo aquí comenzó la mentira.
-Novia? Si apenas la última vez que hablé contigo estabas renuente a tener una- Repuso con algo de duda.
-Mamá sabes que soy alguien reservado, debido a que es poco el tiempo que tenemos juntos, preferí no contar los pollos antes de nacer, no sabía si saldría algo de esta relación y como resulto que si, es por eso que te lo cuento ahora- Explique de forma convincente.
-OH hijo, que sorpresa, ¿y cómo es ella? Y ¿cuál es su nombre? - Pregunto con ilusión, tal parecía que se lo estaba creyendo.
-Es realmente hermosa, su nombre es Isabella, ya mañana la podrás conocer-
-Que bueno mi niño, lo que me importa es que te sientas feliz, no puedo esperar para verlos mañana-
-Está bien madre, nos vemos mañana- Y sé que más que verme a mí, quería conocerla a ella.
-Te amo hijo-
-Y yo madre- Nos despedimos.
"MIERDA primera etapa superada" Pensé al tiempo que solté el aire retenido en mis pulmones durante esa conversación, cuando se trataba de mi madre no era fácil llevar a cabo este tipo de mentira ni básicamente ninguna.
...
POV BELLA
Al despertar, lo primero que vino a mi mente es que ya era domingo, no pude dormir muy bien la noche anterior, los nervios estaban carcomiéndome, eso de actuar no lo había hecho antes, al menos no a ese nivel.
Ayer había hablado con mamá, le había dicho la pequeña mentira que Kiram me sugirió contarle, al principio dudo, pero luego solo de forma dudosa lo acepto, termino por decirme que me cuidara mucho y todo ese tipo de cosas que decía una madre preocupada por su hijita.
Aun sentía una pequeña punzada de culpa en mi pecho por tener que mentirle, nunca lo había hecho, bueno si, en cosas tontas como cuando era una adolescente y me escapaba por la ventana de mi habitación porque estaba castiga, solo para hacer ese tipo de travesuras de la edad, pero esto era por mucho peor. Lo cierto, es que ella entendía que yo ya era una adulta y respeta mis decisiones, pero como es normal, temía, toda madre que amaba siempre lo haría.
Como me había levantado temprano, pude hacer mi maleta dejando todo en orden, aproveche parte de la mañana y la tarde para estar con mamá y Camila, compartimos y llegada la hora de irme me despidieron hasta la puerta de la salida de casa donde un taxi ya me esperaba, así me dirigí a casa del hombre como se había acordado.
Una vez llegue a su casa, esta vez con puntualidad, él de igual manera estaba listo para que saliéramos, no fueron muchas las palabras que compartimos solo un simple ¨Hola¨ de mi parte y un ¨Llegaste a tiempo¨ de su parte, montamos nuestras maletas en el auto y nos dirigimos a donde se encontraba nuestro transporte aéreo.
Al llegar al lugar un hombre nos recibió y junto a dos más tomaron nuestras maletas, de esa forma nos adentramos al lugar que en realidad era un sitio abierto y lo suficientemente espacioso para que entraran allí una flota de aviones. Cuando por fin visualicé el jet, me sentí sorprendida de lo realmente impresionante que era por fuera, era de un color negro con algunas rayas entre doradas y platas, tenía un brillo que lo hacia lucir muy lujoso y nuevo. Cuando entramos en él, confirmé que era realmente el Jet más lujoso del mundo, nunca había estado en uno así, reí por las tonterías que estaba pensando, pues este era el único Jet que me había montado en toda mi vida. Los asientos eran de cuero con mesas en medio, había más atrás otras partes con muebles que parecían más para descanso, y más allá vi un par de puertas, estaban cerradas por lo que no podía ver que había tras ellas, pero pensé que quizás sería el baño o alguna habitación privada.
Tomé asiento me puse el cinturón de seguridad siguiendo los movimientos exactos que Kiram hacia, él estaba justo a mi lado, segundos luego de que nos informaran que iban a despegar sentí como el Jet se comenzó a estremecer de forma algo violenta, yo por inercia cerré los ojos tomándome con fuerza de los extremos del asiento, casi sentía que los iba romper por la fuerza que ejercía con mi agarre. De pronto, me tomo por sorpresa cuando sentí una mano cálida arriba de la mía.
- ¿Estas bien? – Pregunto casi pareciendo preocupado.
Mierda todo ese numerito del miedo lo había acabo de hacer frente a él, era imposible no sonrojarme y no solo por de vergüenza, si no por su suave e inesperado toque en mi mano, un gesto muy extraño viniendo de él.
-S...si- Titubee un poco. -Estoy bien-
-Entonces ya puedes abrir los ojos-
Abrí uno. -Seguimos vivos? - Mire a los lados con mi cara algo arrugada. -Ah si- Sonreí al confirmar que todo estaba bien e intenté calmarme un poco frente al hombre.
-No tienes que hacerte la valiente todo el tiempo- Dijo de lado.
-Es primera vez que vuelo- Confesé.
-Tranquila, la primera vez siempre da algo de pavor- Sonrió confortante.
Alguien pellízqueme, ¿este tipo que se estaba comportando simpático era Kiram? ¿El mismo al que le llamaba imbécil? será que se estaba tomando enserio su papel de no ser un cretino, o estaba practicando de una vez ser amable conmigo, si, debía ser eso, solo que no dejaba de sorprenderme.
-Si supongo- Ya no se estaba estremeciendo el Jet. -Supongo que ya puedes soltarme- Le di una risita viendo en dirección a nuestras manos.
-Si- Me la devolvió. -Bueno, ya que estaremos aquí una hora aprovechémosla al maximo para conocernos- Lo mire dudosa.
-Conocernos cómo? - Pregunte con el entrecejo fruncido.
-Conocer cosas básicas del otro como que estudias, cuáles son tus pasatiempos, tus gustos, no se esas estupideces que los novios saben del otro con regularidad- Explico en un tono desinteresado.
-Mmm ya, claro es para hacerlo creíble ante los demás- Era obvio, porque más querría el conocerme a no ser por eso. -Comienzas tu? - pregunte.
-Si-
-La pregunta que hagas luego de responderte, la devolverá el otro, así será más fácil- Propuse.
-Muy bien, ¿qué estudias? - Comenzó.
-Historia del arte-
-Yo estudie, negocios primero y luego arquitectura-
-Mi turno, que haces en tus tiempos libres? – Pregunte curiosa.
-Práctico artes marciales, hago ejercicio a diario, o solo estoy en mi estudio en casa aprendiendo cosas nuevas o trabajando-
-Mmm ahora lo entiendo... Como fue que supiste defenderte tan bien esa noche en el callejón- Dije con una sonrisa en mis labios entendiendo todo mejor. -Yo suelo aprovechar el tiempo que tengo libre para descansar, también comparto con mi madre y Camila mi hermanita menor, no es mucho mi tiempo libre la verdad, aunque cada que puedo si hago algo de ejercicio y practico al igual que tú las artes marciales, ya sabes hay que mantenerse en forma- Sonreí divertida.
-Eso ya lo pude notar- Dijo con atisbo de sarcasmo, supongo hacía referencia a las veces que me encontró peleándome con alguien más. -Cual es el nombre de tus padres? – Pregunto cambiando de pregunta.
-Mi mama se llama Emma Johnson y a mi padre nunca lo conocí-
-La mía se Llama Amanda Carter y mi padre se llamaba Frederick Adams, falleció hace 5 años-
-Lo siento mucho- Di mi pésame. -No tienes que responder si no quieres, pero, ¿porque tu madre tiene otro apellido? – Pregunte con curiosidad.
-Ellos se habían divorciado 5 años antes de que el falleciera- Respondió sin inconveniente.
-Mmm entiendo- Siguiente pregunta. -Alguna vez has tenido una novia de verdad una con la que hayas durado? - Lo observe curiosa sin apartar la mirada de su rostro, por algún motivo esta pregunta era la primera que quería hacer, pero no podía hacer tan evidente mi curiosidad.
-Esa pregunta es necesaria? - Enarco una ceja.
-Pues claro toda novia debe saber el pasado de su novio- Rei medio nerviosa.
La verdad no era tan necesaria, pero me daba mucha curiosidad la respuesta , pues quien sería tan paciente para aguantarse a este hombre genuinamente, a no ser por todo lo que poseía.
-Si claro- Hablo no muy convencido. -Si tuve una en la universidad estuvimos los 2 últimos años de la carrera- Respondió.
-Y te enamoraste de ella? - Me arriesgue a preguntar, estaba consciente de que estaba siendo entrometida.
Lo vi titubear un poco antes de responder. -Digamos que sí, eso creo- No quiso dar mucho detalle. -Te toca, ¿tu cuantos? -
Mierda no recordaba que esta era la dinámica, poque hice esa pregunta, rápidamente comencé a sudar frio.
-Mmm he tenido también uno- Mentí.
El me miró con incredulidad, supongo como otros, ya se había hecho una imagen de mí y no esperaría a que le dijera solo uno, quizás y ni había creído mis palabras, si supiera la verdad, no la creería ni en mil años.
-Te enamoraste? - Pregunto exactamente lo mismo.
-Mmm eso creo- Respondí de forma ambigua como él lo hizo, solo que volví a mentir.
Nunca había tenido novios, pero eso no se lo iba a confesar obviamente, digamos que si había besado a unos dos chicos, pero nada más allá, y menos habían sido mis novios realmente.
...
Había pasado casi una hora, duramos poco más haciéndonos preguntas y luego me contó cosas que debería saber de su hermana, como era su futuro esposo y de su madre, y claro de él, todo era muy externo casi todas cosas que leerías en Google si ponías su nombre, algunas otras pocas no, y así pasó el tiempo, hasta que por fin aterrizamos.