Capítulo 19
597palabras
2022-06-09 09:44
Mientras tanto, Lexi esperaba sentada en un inodoro.
Se frotaba los brazos con ambas manos tratando de calentarse.
Por las noches, el frío se sentía mucho más fuerte en el baño.

"¡Achú!"
Comenzó a estornudar sin parar.
Recién se había recuperado. Si pasaba toda la noche ahí, se resfriaría y le volvería la fiebre.
La chica se sentía impotente. Estaba agotada y solo se podía sentar a esperar. No tenía otra alternativa.
"¡Pum!"
De pronto, se escuchó un golpe.

Sus ojos se abrieron de inmediato. Sintió un poco de esperanza y rápidamente se acercó a la puerta.
"¿Quién anda ahí? Por favor, ¡sáquenme de aquí!".
Parecía que ya habían notado que estaba encerrada. De inmediato se escuchó un golpe aún más fuerte y al instante, la puerta del baño se abrió con fuerza.
Lexi estaba feliz. ¡Finalmente, alguien vino a rescatarla! Después de todo, no tendría que pasar la noche en el baño.

"Gracias", dijo.
Pero antes de terminar la frase, Lexi vio la figura de un hombre justo frente a ella.
"¿Señor Barrett?".
Creía que uno de los guardias la había escuchado. Jamás hubiera pensado que Jamie vendría a rescatarla.
Como había tenido que correr hasta ahí, el hombre venía muy agitado.
Cuando la miró, se dio cuenta que su rostro estaba extremadamente pálido. Como hacía tanto frío, el cuerpecito de la chica estaba temblando.
Jamie entrecerró los ojos y se quitó el saco. Lentamente se acercó para ponérselo sobre los hombros.
Lexi se sintió mejor de inmediato. La reconfortó el calor del saco cuando cubrió su piel fría.
Estaba atónita, completamente sorprendida.
Jamie no le puso atención durante la reunión y se había portado como si fueran dos extraños. ¿Por qué la trataba tan bien ahora?
Al darse cuenta de que ella estaba paralizada, Jamie le preguntó con voz profunda:
"¿Puedes caminar?".
Lexi asintió con la cabeza y rápidamente se dirigió hacia la puerta.
Jamie apretó los labios mientras miraba la pequeña espalda de la chica.
Se veía muy débil y se preguntó cuánto tiempo habría estado encerrada. Tenía miedo de que se volviera a enfermar.
Sacó su teléfono y le llamó a Mason: "Ve a Noble Oak Manor y espérame allí".
Cuando salió del baño, Lexi notó que todo estaba en silencio. No había nadie al rededor. 
Sin embargo, sabía que el personal de seguridad estaba en el vestíbulo.
Tomaron el ascensor y, cuando iban llegando al primer piso, se quitó el saco de Jamie.
Se lo devolvió cortésmente y le dijo: "Gracias señor Barrett".
Sin embargo, Jamie no se veía contento.
"No me lo devuelvas. Póntelo y vete a casa".
“Es que hay gente en el vestíbulo. Si alguien me ve con su saco, podrían pensar mal”, explicó.
Jamie se puso serio. Hubiera sido mejor que Lexi no dijera nada.
Mirándola, le preguntó indignado: "¿Por qué? ¿Te avergüenza que crean que tenemos una relación cercana?".
"No, eso no es lo que quise decir".
"¿Ah no?, entonces, ¿qué se supone que significa eso?".
De pronto, el director se acercó a Lexi. se veía muy dominante en el estrecho ascensor, como una enorme montaña moviéndose hacia ella.
Estaba demasiado cerca, por lo que el corazón de la chica se aceleró de inmediato.
Pero, sin darse cuenta, ella dio un paso atrás.
¿Dijo algo malo?
Parecía haber dicho algo que lo ofendió.
Lexi estaba nerviosa. Vio que la puerta del ascensor se abría despacio. Rápidamente dijo: “Señor Barrett, ya llegamos".
Sin embargo, Jamie se le quedó viendo sin ninguna intención de moverse.
Se oyeron pasos.
El guardia se acercó en cuanto escuchó el sonido del ascensor.