Me siento tan segura entre sus brazos como si el fuera mi refugio, ignoro todo lo que sucede a mi alrededor en el momento, dejándome cautivar con el aroma natural que desprende la piel de este hombre mientras dejo que mi estrés y preocupaciones pasen a segundo plano entre sus fuertes brazos. Pero como todo lo bueno en su momento tiene un final, siento que el cuerpo de Mort se pone rígido de pronto, seguido de llegar a mis oídos el sonido de flashes consecutivos y en gran cantidad; ni siquiera quiero voltear porque ya sé que es lo que me espera, recuerdo que al entrar en la comisaria ya había todo un ejército de periodistas, lo menos que quiero es que me fotografíen con mi rostro rojo como un tomate por la vergüenza de a ver sido atrapada siendo afectiva con mi escolta personal. Me separo de Mort sintiéndome apenada de a vernos expuesto a esta situación a ambos.
— Lo lamento me deje llevar, estaba tan estresada y preocupada...- me tomo unos segundos en considerar mis próximas palabras, al final las dejo salir no queriendo quedarme con eso atorado dentro — Por ti.
Siento nuevamente mis mejillas arder, escucho una pequeña risita ronca de Mort, reúno el valor para levantar el rostro y verlo directamente a esos ojos celestes hermosos que tiene, veo algo de calidez en ellos, pero también algo más, una chispa de nostalgia.

— My Lady, me siento honrado por ello, pero no debe darme espacio en su cabeza para ser una preocupación más para usted, recuerde que soy muy poderoso, puedo cuidarme solito. - sonrío ligeramente
— Creo que tenemos mucho de qué hablar, lo mejor será irnos a casa. - el rostro de Mort cambia drásticamente tornándose más serio
— Totalmente... tengo demasiado que contarte y es serio.
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Tuvimos que salir por la parte trasera del edificio ya que cada vez llegaban más y más reporteros al lugar, yo y Mort estamos de acuerdo que alguien lo planeo con toda la intención de incriminarnos, me dio solo detalles mínimos de nuestra situación, me dijo que el tema de Jair lo discutiríamos a mayor detalle cuando mi padre no estuviera presente, eso me inquieta un poco pero quizás sea porque ara mención de algunos de sus habilidades sobrenaturales que utilizo para investigar.
Al llegar a casa y entrar en el interior fuimos abordados por mi padre y Consuelo que estaban en la sala de estar mirando televisión.

— Oo gracias al cielo! ya están aquí
— Que es lo que está sucediendo Valeria, todo esto es tan confuso... - justo en ese momento apareció un boletín informativo en la televisión, Mort se acercó para subir el volumen mientras todos observábamos atentos
— 'En la tarde de hoy la exitosa empresaria Valeria Palacios dueña de Industrias Carraga, fue detenida junto a su escolta personal por ser los principales sospechosos del asesinato de su ex esposo Jair Castañeda, se presume que la señorita palacios envío a su escolta personal para realizar el atentado, fueron liberados hace poco por falta de pruebas incriminatorias cuando ambos se reencontraron se dieron un... muy cálido abrazo"- después de decir eso pusieron en pantalla las fotos que nos tomaron a Mort y a mi juntos abrazándonos, niego con la cabeza simplemente, después un hombre en la televisión habla — "Pero claro que la iban a liberar, no tienen pruebas y como tenerlas es una mujer con mucho poder y dinero es más que obvio que está haciendo uso de ello para silenciar testigos y eliminar pruebas, es que en verdad a lo que se ve ella tiene un amorío con su escolta personal en primera que falta tan grande de ética personal y laboral, en segunda todos sabemos que su ex marido le fue infiel con su mejor amiga, a parte de la humillación publica es una mujer dolida y despechada y déjenme decirles que una mujer en esos estados emocionales y con dinero es capaz de cualquier cosa, no es la blanca paloma que finge ser, ahí está de ejemplo lo que hizo a sus padres que tan mal hijo tienes que ser para hacerle algo así a tus propios padres...."
Un florero se estrella con fuerza contra el televisor dañando la pantalla y haciéndola caer al piso en una aparatosa escena, el televisor cae al suelo apagándose completamente soltando algunos pedazos plásticos de los bordes, se mueve un poco hasta quedar completamente estática en el charco de agua cubierto de trozos de cristal y flores; Las miradas vuelan en dirección en donde provino el florero hasta llegar a mí.

Mi pecho se mueve arriba y abajo de una manera excesiva, inhalo y exhalo tanto aire como puedo ya que en algún momento el que estaba respirando me parecía insuficiente, estoy tan molesta, como jamás en mi vida había experimentado estar, no importa lo que haga siempre soy juzgada por alguien y todos esos malos comentarios de ese hombre, esas deducciones estúpidas hacen que mi interior se consuma por las llamas de la ira, supongo que ese fuego se desborda por mis ojos ya que todos me miran asustados, Mort pretende acercarse a mí pero me alejo, comienzo a gritar histérica señalando a Mort.
— ¡Quiero que descubras quien es ese maldito estúpido! - no recuerdo cuando fue que dije palabrotas de esa manera o si alguna vez lo había hecho en mi vida, pero no me pondría a recapitular eso ahora.­— Me encargare de destruir su carrera, como se atreve a decir esas estupideces quieren un monstruo pues lo tendrán, estoy harta de que la gente me acuse y juzgue, todos se dan cuenta cuando exploto pero nadie de lo que tuve que soportar entes de llegar a ese punto, aquel idiota me lastimo mucho, se burló de mí y aun así tuvo el descaro de burlarse de mi llamándome resentida y despechada, yo no mate a Jair ojala lo hubiera hecho ya que de todas maneras me están culpando y aun todavía se atreven a juzgar mi vida privada.... qué sentido tiene ser buena? cuando no lo eres con quien no lo fueron contigo te tachan de lo peor y se aprovechan de esa nobleza
Las lágrimas retenidas comenzaron a arder en mis ojos y comenzaron a salir como una corriente salvaje recorriendo mis mejillas hasta caer al suelo, me siento tan mal, tan molesta tan inestable, de siempre ser juzgada, mis acciones malas siempre son juzgadas mientras las buenas a nadie parecen importarle; Dentro de mí se está llevando toda una revolución, siento que en cualquier momento tendré alguna crisis por tanto estrés y ansiedad que se me están aglomerado.
Pero de pronto unos cálidos brazos me envuelven y no es Mort ya que en todo momento que he estado gritando lo he mirado fijamente para que no intentara abrazarme, pero ese afecto llego del lugar menos imaginado, mi padre me envuelve con un poco de fuerza mientras acaricia mi cabello.
— Calma mi niña, tranquila tu eres un ser de puro amor no creo ni una sola palabra que ese idiota dijo, él no sabe por todo lo malo que has tenido que pasar y aun así tienes un gran corazón, entiendo que estés enojada yo también lo estoy, pero no estás sola en esto todos estamos contigo y yo no te dejare sola esta vez, aquí estoy para cuidarte como siempre debió de a ver sido.
Al escuchar esas palabras de mi padre el enojo desaparece y ahora solo tengo unas enormes ganas de llorar como una niña pequeña en los brazos de él.