Capítulo 70
705palabras
2024-01-30 00:02
Tan pronto como Fernando terminó de hablar, Fabián le dijo enojado: "¿Qué es lo que quieres?"
"Estoy en la puerta de la habitación 1701 del Hotel Hilton. Si quieres saber qué quiero hacer, ¿por qué no vienes a verlo?"
Y sin dejar que hubiera respuesta alguna, Fernando colgó el teléfono.

Luego, envió un mensaje a alguien, que Elisa no vio con claridad.
Después de enviarlo, Fernando la miró y dijo: "¿Qué te parece si entramos?"
Sin entender lo que estaba sucediendo, la joven le preguntó: "¿Estás seguro de que no nos echarán?"
Puede que Luna no la conociera, pero desde que Elisa abofeteó a Cecilia, ya no era bienvenida en ese lugar.
Fernando le sonrió: "Tal vez Luna te esté esperando".
Antes de que la joven pudiera reaccionar, él llamó a la puerta.

"Disculpe...".
Cecilia abrió, y al ver a Elisa y a Fernando, la expresión en su rostro cambió de repente.
En ese momento, la voz de una mujer llegó desde el interior de la habitación: "Cecilia, ¿es Fau?"
Al escuchar la forma en que Luna habló de Fabián, Elisa se rio por dentro, '¿Fau? '

Durante sus tres años de matrimonio, jamás se habían llamado por apodos entre ellos.
Fernando habló con Cecilia y Luna de algo mientras Elisa estaba perdida en sus pensamientos. Para su sorpresa, Cecilia abrió la puerta y los invitó a pasar.
Fernando le dijo a Elisa: "Adelante".
La joven asintió, y al mirar a Cecilia sintió cómo le clavaba su mirada con odio. Entonces, con una sonrisa en sus labios, le dijo: "Me alegro de verla de nuevo, señorita Linn".
Cecilia se endureció de la furia, cerró la puerta de un golpe, y luego se tocó la cara, donde Elisa la había abofeteado no hacía mucho. Apretó los puños con ira y los siguió.
Era la primera vez que Elisa conocía a Luna, y ella no se parecía en nada a su hermana.
Mientras que Cecilia era una chica del tipo más s*xy, Luna era todo lo contrario. Tenía una cara ovalada y sus pómulos no eran prominentes, la curva de su rostro la hacía lucir dulce e inocente, como una joven Britney Spears.
Luna pareció ponerse nerviosa al ver a Elisa: "Señorita Marques".
Ella la miró y sonrió levemente: "Señorita Linn".
Después de saludar, Elisa inclinó la cabeza para mirar a Fernando.
Ella no tenía idea de por qué estaba allí, e incluso no creía que fuera correcto que estuviera en ese lugar en primer lugar.
Fernando la miró y arqueó las cejas: "Ahora ya la conoces, ¿qué te parece?"
Elisa seguía sin saber qué era lo que buscaba ese hombre llevándola allí.
Antes de que ella pudiera hablar, Fernando continuó: "Te dije que ella no era rival para ti".
Entonces todos entendieron lo que estaba sucediendo.
El rostro de Luna empalideció, y Cecilia se desencajó por completo.
Miró a Elisa con ira y le gritó: "Señorita Marques, si no tiene nada importante que decir, váyase. No es bienvenida aquí".
Ella no quería estar allí, pero las palabras de Cecilia la molestaron, entonces cambió de opinión: "¿Quién dijo que no tengo nada importante que decir?"
Como hacía muy poco su hermana había sido golpeada, Luna dio un paso adelante y tiró de su brazo para que no contestara.
Entonces, mirando a Elisa, le sonrió gentilmente: "¿Hay algo en lo que podamos ayudarla, señorita Marques?"
Elisa contestó con una sonrisa: "Pensé que querías que viniera".
La joven no había pensado en ello antes, pero eso no significaba que fuera est*pida.
Había pasado más de medio año desde que se había divorciado de Fabián, ya no tenía nada que ver con él ni con las personas con las que se rodeaba actualmente.
Sin embargo, estaba siendo involucrada en todo rumor sobre Fabián. Y ahora que conocía a Luna, Elisa parecía tener mucho más claro el panorama.
Incluso, antes de entrar, Fernando le había dicho que tal vez Luna también la estuviera esperando.
Ahora que estaban frente a frente, esperaba no decepcionarla.
Al escuchar la respuesta de Elisa, el rostro de Luna cambió de inmediato: "No entiendo muy bien a lo que se refiere, señorita Marques".
Elisa arqueó las cejas: "No importa. Lo entenderás en un tiempo".
"¿Qué quieres decir?"