Capítulo 31
519palabras
2023-11-09 13:37
"Gracias, señorita Chu. Agrégueme a WeChat. La próxima vez que venga, puede llamarme...", le propuso a punto de tomarla en sus brazos.
Antes de que ella pudiera decir algo, Shenxing se interísp entre los dos y le ordenó con frialdad: "¡Déjanos solos!".
El asistente se asustó. El recién llegado tenía un aire autoritario y noble. ¡Debía ser un cliente!

Las personas que podían permitirse el lujo de disfrutar de los servicios del club eran millonarios o famosas. Él no podía permitirse el lujo de ofenderlo.
"Sí, señor... Discúlpeme".
Cha estaba acurrucada en el pecho de Shenxing con ojos soñadores. Bajo los efectos del alcohol, pensó que la estaba abrazando el asistente que acababa de marcharse. Sonriendo, le tocó la barbilla y murmuró:
"¡Te pareces a mi marido! ¿No cobras demasiado por tus servicios?".
El hombre arqueó las cejas sorprendido y una sensación extraño cubrió su corazón. No podía identificarla, ya que no estaba acostumbrado.
"¡Vete a casa!", le ordenó de mal humor.

"No tengo adonde ir... No tengo un hogar... ¡Déjame aquí! ¡Quiero beber más!", balbuceó mientras intentaba liberarse de su agarre.
"¿No me estás escuchando?".
"¡No! ¡No quiero escucharte!".
Las cejas de Shenxing se hundieron e inmediatamente la tomó en sus brazos. Sin embargo, ella se negó a comportarse e hizo todo lo posible por zafarse.

"¡No te muevas!", le ordenó enojado propinándole una bofetada en el trasero.
Cha soltó un jadeo sorprendido y se hizo un ovillo en los brazos del hombre.
Zhou los siguió de cerca, sin entender lo que estaba pasando.
¿Qué de*onios estaba haciendo su jefe?
Llevaba más de cinco años a su lado y nunca lo vio comportarse de esa manera con una mujer.
Ran había salido en su búsqueda y presenció el espectáculo con ojos incrédulos.
"¡Mi*rda! ¡Shenxing tiene una mujer!", maldijo.
¿Quién era ella ella?
¿Cómo había logrado someter a alguien tan extraño como su amigo?
"¿Estás borracho? Shenxing lleva décados soltero. ¿Cómo podría tener novia?", argumentó uno al escuchar su relato.
"¡Estás diciendo disparates! Él es demasiado raro como para entablar una relación".
Nadie le creyó.
Estaban seguros de que Ran estaba borracho y se había imaginado todo el asunto. Después de todo, Shenxing estaba destinado a una vida solitaria.
......
En el auto, Cha se acurrucó en los brazos de su esposo como si fuera un gatito. Su silencio le indicó que estaba a punto de dormirse. Agarró su camisa con ambas manos y presionó su rostro contra su pecho con un suspiro aliviado.
Sus labios rojos y regordetes rozaron su pecho y su respiración se infiltró en su pecho.
¡Shenxing no podía creer que un movimiento tan pequeño e involuntario podría provocarle una erección!
A partir de ese momento, no se atrevió a moverse. Un solo paso en falso lo llevaría a acabar con ella allí mismo.
Bajo la tenue y cálida luz, vio el suave aleteo de sus pestañas rizadas. Su rostro rosado parecía tan suave como el jade. Sus bonitos y delicados rasgos no eran deslumbrantes, pero daban una sensación de comodidad. Era como si una corriente fresca y límpida calmara el corazón caliente de Shenxing.