Capítulo 38
1026palabras
2023-07-19 12:14
(Desde el punto de vista de Victoria)
Estoy aterrada de lo diligentes y rápidos que han sido al construir todo esto.
La verdad ha quedado tan lindo que deseo pedirle a Dániel que antes de desarmarlas nos quedemos una noche a dormir acá.

La visión de las estrellas debe ser hermosa!
Un poco más alejado, esta el sitio donde será la reunión. Tienen mesas y sillas en forma de mesa redonda.
Me pregunto si todos los Alfas serán como él, igual de apuestos.
Me emociona mucho esta complicidad que tenemos, las bromas, el amor! Ojalá todos los días fueran asi!
Camino de su mano sin temor.
El sol está en lo alto y decidimos regresar a casa para almorzar.

Él continúa su trabajo y yo me quedo para poder organizarme, siento algo de nerviosismo por conocerlos a todos.
Temo que me puedan rechazar por ser humana.
Abro el ropero y paso las manos indecisa sobre que usar.
Descarto algo abrigado, porque entre lobos la temperatura es tan alta que parece que estuviera en pleno verano.

Estoy entretenida sacando opciones, cuando unos golpecitos en la puerta me hacen sobresaltar.
Me asomo y es una señora vestida muy elegante, me parece haber visto su cara antes, pero no estoy segura de donde.
Trae una bandeja de té en sus manos.
- Buenas tardes Luna ¿como estas? Soy Nala, hacia días que quería venir a saludarte. Debes sentirte sola y me gustaría ofrecerte mi amistad y apoyo.- No se que decir.
Es realmente muy poco lo que me he relacionado con el resto de la manada.
- Te he traído un té para ayudarte a calmar los nervios - Me dice levantando la bandeja cuando nota mi silencio.
- Si, muchas gracias. Disculpa mi mala educación, sigue, por favor. - Abro la puerta dando espacio para que ella entre.
- Si quieres después del té, te puedo ayudar a peinar. Era algo que hacía siempre con mi hija. - Dice con una sombra de tristeza en los ojos.
Quisiera preguntar que le sucedió a ella, pero temo ser imprudente.
- Eso sería fabuloso! - Le digo y nos sentamos en la mesa que queda cerca de la ventana.
El té es un poco amargo, pero me lo tomo sin decir nada.
Luego ella me ayuda a elegir un vestido lila a medio muslo, de hombros descubiertos y escote en forma de corazón, unas sandalias color nude de tacon ancho.
Me alisa el cabello y ondula las puntas.
Al verme al espejo realmente el trabajo a sido fantástico! Me veo preciosa!
No dejo que me maquille, prefiero ir natural, un brillo y un poco de rubor son más que suficientes.
Apesar de tener las ventanas abiertas el calor en mi cuerpo es muy alto!.
Ella revisa el reloj y recoge rápidamente todo!
- Me voy antes de que el Alfa regrese. Si ve que te busque sin pedir permiso, se podría molestar. - Me dice acercándose a despedirse dándome un fuerte abrazo.
- Te deseo la mejor de las suerte conociendo a los Alfas! Será una gran noche! - Dice cruzando la puerta y alejándose por el pasillo de nuestra planta.
No pasa tanto tiempo hasta que llega Dániel.
Me mira de arriba a abajo con deseo.
Y rápidamente se mete al baño a ducharse.
Elige un pantalón de dril color caqui y una camisa manga larga blanca que lo hacen ver guapísimo! Todo se ajusta perfecto a ese cuerpo musculoso!
Toma mi mano y salimos pronto de casa, si estamos más tiempo solos en la habitación presiento que mi vestido terminará en el suelo y mis piernas abiertas para él.
El camino es corto, ahora que esta anocheciendo las farolas lo hacen ver hermoso! Cálido!
Llegamos a la entrada y Frank se acerca a avisarle que ya pronto estarán acá.
Estoy nerviosa, ansiosa y emocionada!
Oleadas de calor recorren mi cuerpo concentrándose en mi centro.
No se que me pasa! Me siento extrañamente excitada!
Tomo más fuerte su mano, y pronto los vemos llegar, van entrando por grupos y todos son muy amables a excepción del que dice ser nuestro vecino, es joven y prepotente.
Me hace sentir incomoda su presencia.
Ahora solo falta él por entrar, tiene un pantalón azul oscuro y una camisa blanca de mangas. Se que no debería verlo tanto, pero no puedo controlar mis ojos!
Se acerca indeciso, mi corazón amenaza con salirse de mi pecho!
Siento taquicardia, sudor.
No quiero que se vallan a atacar, recuerdo lo mucho que le afecta a Dániel hablar de él o pensar en que pueda estar cerca, así que supongo que se debe sentir incómodo de tener que presentarnos.
Se saludan de manera seca y más formal de la necesaria.
Luego Dániel me presenta haciendo énfasis en que soy su compañera, su Luna. Suya!
Estiro mi mano para saludarlo.
Pero el calor me gana, siento como si estuviera bajo fuego, como si no pudiera respirar sin su contacto y cuando me doy cuenta estoy colgada de su cuello, aspirando el delicioso y embriagador olor que emana su cuerpo. Abro los ojos y soy consciente de lo que he echo!
NOOO!!! Esto no puede estar pasando.
Me suelto asustada y me giro hacia Dániel que tiene los ojos vidriosos.
Mis ojos van de uno a otro.
Ninguno dice nada.
¿Por qué lo hice? Mis lágrimas corren sin control.
- Perdón! Perdón! No se que me pasó! Perdón por favor! - Digo mirándo a Dániel, se lo digo con el corazón en la mano! No entiendo lo que me pasa. No quiero lastimarlo!
- Tranquila Victoria, calmate, no llores. - Es la voz gruesa e hipnotizante de Daimon. Lo veo dejar caer su cuerpo como si la impresión no le permitiera estar de pie.
Deseo tocarlo sin tener que soltar a Dániel.
Quisiera gritar y echar a correr, pero mi cuerpo no reaccióna, el temblor aumenta, me siento absolutamente confundida.
Temo tocar a Dániel y sentir su rechazo.
El mundo se ha congelado, no logro escuchar nada aparte de mis sollozos
Luego unas manos cálidas toman las mías y sopla, en mis ojos, en mis oídos. Sopla trayendo calma.