Giselle frunció los labios y lo miró furiosamente.
Maverick se adelantó en silencio y abrió la puerta. "¡Fuera!"
Giselle negó con la cabeza. "Dejaste entrar a Gloria, ¿por qué no puedo entrar yo?"

"¿Quieres discutir conmigo?" Maverick resopló con frialdad y dio un paso adelante. Luego, le sujetó la barbilla y la miró a los ojos mientras se burlaba: "¿Qué derecho tienes?"
"Porque yo..." Giselle se atragantó con sus palabras. Maverick nunca reconoció que fuera su novia, así que se mordió el labio y trató de usar su táctica infalible. Se hizo la empalagosa mientras abrazaba la cintura de Maverick. "No me importa. Eres mío, así que nadie puede alejarte de mí."
El agarre de Maverick se detuvo por un segundo antes de ejercer aún más fuerza.
Maverick le levantó la barbilla lentamente mientras la obligaba a levantar la cabeza y mirarlo a los ojos.
"Giselle, ¿por qué sigues acercándote a mí?"
La mirada de Maverick era intensa. Giselle no pudo descifrar lo que pensaba, pero tuvo una vaga sensación de que podía ver a través de ella.

Quería evitar la mirada de Maverick, pero él la atrajo de nuevo.
"¿Tienes miedo?"
Giselle respondió con voz dulce: "No." 
"Entonces dime."

Maverick estaba decidido a escuchar la respuesta.
Giselle palmeó su mano. "Suéltame la barbilla primero, me duele." 
Maverick aflojó un poco su agarre y vio lo roja que se le había puesto la barbilla. Su piel era tan blanca y delicada que se enrojecía con un suave pellizco. Esto lo hizo entrecerrar los ojos mientras fruncía el ceño.
Después de que la soltara, esta puso sus brazos alrededor de su cuello y sonrió ampliamente. "Obviamente es porque me gustas." 
Maverick la contempló en silencio con una mirada reservada como si no le creyera en absoluto.
A Giselle no le importaba si le creía o no y simplemente aprovechó la oportunidad para besarlo. De nada servía que siguieran discutiendo, así que la forma más sencilla y efectiva para solucionarlo era besarlo.
Pero Maverick estaba inmune. Cuando Giselle se le acercó, simplemente la agarró por el cuello y la empujó.
Era demasiado tarde cuando Giselle recobró el sentido y Maverick ya había cerrado la puerta con fuerza.
Definitivamente no tenía modales.
Llamó a la puerta enfadada. "¡Maverick, b*stardo! Abre la puerta." 
Maverick se dio la vuelta con indiferencia y se sentó en el sofá. Al cabo de un rato, el ruido al otro lado de la puerta fue cesando.
Maverick se puso de pie y se rio secamente.
Giselle siempre había usado aquellas dulces palabras, pero estas no guardaban nada de sinceridad.
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Giselle sabía lo inexorable que era Maverick, así que no quiso perder más el tiempo. Fue directamente al ascensor y salió del estacionamiento. Luego, caminó hacia su auto y abrió la puerta.
"Giselle." 
De repente, una figura salió de las sombras.
Giselle se dio la vuelta y vio a Gloria.
Gloria tenía una expresión muy fea en ese momento cuando se acercó a Giselle y le preguntó: "¿Qué haces aquí?"
Giselle se apoyó contra el auto y le contestó: "Hmm... ¿Qué haces tú aquí?"
"¿No sabes que Rick vive aquí?"
Giselle pareció sorprendida. "¿En serio?"
Gloria apretó el hombro de Giselle en cuanto terminó de hablar, y sus ojos estaban llenos de malicia. "Estás seduciendo a Rick, ¿verdad?"
Inconscientemente una sonrisa apareció en el rostro de Giselle mientras miraba a Gloria.
Su actitud tranquila y serena molestó a Gloria, que apretó los dientes. "¿De qué te ríes?"
Giselle no dejó de sonreír en ningún momento, e incluso entrecerró los ojos burlonamente. "Gloria, me temo que todos se sorprenderían si vieran tu expresión en este momento." 
Gloria frunció profundamente el ceño. "¡Oye! Hablo en serio." 
Giselle puso cara de confusión como si no recordara lo que Gloria le estaba preguntando, pero luego lo recordó. "¿Por qué estoy aquí?" Sonrió suavemente después de decir eso. "Bueno, porque mi novio vive aquí." 
Las manos de Gloria comenzaron a temblar cuando miró a Giselle. "¿Rick?"
Giselle inclinó la cabeza y sonrió. "¿Por qué debería decirtelo?"
Giselle era muy buena molestando.
Gloria se mordió los labios y le recordó: "Giselle, Rick me eligió a mí. No tienes ninguna oportunidad." 
Giselle simplemente levantó las cejas y no dijo nada.
No le correspondía a Gloria decidir si tenía una oportunidad o no.
Sin embargo, Giselle solo se atrevió a criticarla en su interior. Como no admitió que tenía una aventura con Maverick, si Gloria lo adivinaba por sí misma no tendría nada que ver con ella.
"Puedes hacer un berrinche aquí si quieres, pero por favor apártate de mi camino." 
Giselle no estaba lo suficiente abrigada y hacía frío por la noche.
No estaba de humor para confrontar a Gloria en este momento, así que la empujó y se subió al auto. Gloria se mordió el labio tratando de no demostrar vulnerabilidad. "Giselle, no puedes vencerme. Siempre has perdido contra mí, y esta vez no será una excepción." 
En ese momento, Giselle simplemente pisó el acelerador y se fue.
Finalmente Gloria se dirigió hacia su auto con pasos tensos al rato de que Giselle se fuera. Si no hubiera venido esta noche a buscar a Maverick y no se hubiera perdido, no habría terminado en la sección equivocada del estacionamiento y encontrado el auto de Giselle.
¿Le ocultarían la verdad para siempre?
Apretó los puños con fuerza y respiró hondo.
¿Cómo se atreve Giselle a quitarle a Maverick?
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Cuando Gloria llegó a casa, Davina todavía estaba despierta y bebía agua en la sala.
Gloria se veía muy desanimada cuando entró, lo que sorprendió tanto a Davina que preguntó apresuradamente: "¿Qué pasa? ¿Por qué tienes la cara tan pálida?"
Gloria miró a Davina e inmediatamente se acercó a abrazarla. "Mamá..."
Davina se preocupó aún más. "Oh cariño... ¿Qué pasa? Cuéntamelo."
Gloria no se atrevió a decirle nada. Como hija, era la que mejor conocía el temperamento de Davina. No podía permitir que Maverick se diera cuenta de que había descubierto la verdad, así que solo pudo reprimir sus sentimientos. "Mamá, quiero casarme con Rick lo antes posible. ¿No puedes pedirle al tío Oscar que acelere las cosas?"
"Bueno, acordaron anunciarlo en tu cumpleaños."
"No, es demasiado tarde." Gloria negó con la cabeza. "¿No puede adelantarlo?"
Davina se puso seria. "Hija, Un mes no es tanto tiempo. Todos te mirarán mal si te muestras demasiado ansiosa."
"Pero..."
"¿Pero qué?" Davina notó que algo estaba pasando. "¿Pasó algo con Rick?"
Gloria negó con la cabeza repetidamente. "Nada, solo tengo... miedo."
Davina la consoló. "No hay nada que temer. No puede huir de la alianza matrimonial, puesto que ya lo tenemos todo concertado con el tío Oscar." 
"Pero no soy la única hija de nuestra familia." 
Davina no pudo evitar reírse. "¿Por qué estás tan preocupada por Giselle? ¿Crees que la familia Hyland está interesada en nuestros bienes? Tú eres la persona que les interesa y eres la consentida de Finceland. Giselle nunca se ganará el favor de los padres de Maverick por mucho que lo intente, así que no te preocupes." 
Gloria dejó escapar un suspiro de alivio al oír esto.
Se consoló pensando que Maverick solo estaba tonteando por diversión.
En efecto, Giselle siempre despertaba el deseo en los hombres, pero ninguno estaría dispuesto a casarse con ella.
Prestin no estaría dispuesto a casarse con Giselle, ¡y mucho menos Maverick!