Giselle se quedó atónita y respondió con un tono hostil: "¿Qué tiene que ver eso contigo?"
Prestin resopló. "Te ves más bonita ahora. Te ves como una persona vibrante y animada."
Mientras decía eso, él extendió su mano, pero antes de que pudiera tocar a Giselle, ella la apartó con disgusto. "Mantén la distancia, eres asqueroso..."

Prestin frunció el ceño, dejando ver profundas líneas en su frente, sin embargo mantuvo las manos quietas. Después de todo, no quería que los extraños pensaran que él, un caballero, estuviera coqueteando con una chica en público.
Esa fue también la razón por la que Giselle había aceptado ir al café con él.
Prestin se recostó en su silla sintiéndose molesto. "¿Por qué eres tan brusca cuando solo quiero tocar tu rostro, pero aceptas voluntariamente que Maverick lo haga?" exclamó.
Había hecho esa pregunta tantas veces que parecía molestarle demasiado.
Giselle sonrió. "Él es más hombre que tú."
Prestin entrecerró los ojos. "Él te dejará en el momento en que se aburra de ti."

"¿Y qué? Aún estoy dispuesta a acostarme con él."
Giselle pensó que Prestin solo tenía curiosidad, pero no estaba de humor para perder el tiempo hablando con él.
"Bueno, he tomado el café y hemos hablado. Así que no me molestes de nuevo."
¡No quería estar a su lado ni un minuto más!

Giselle trató de salir del café mientras todavía había gente en el lugar.
Sin embargo, Prestin inmediatamente la agarró de la muñeca. "Giselle... me voy a casar."
"Felicitaciones. ¡Suéltame!" ella respondió tratando de soltar su muñeca.
Pero él se negó y la apretó con más fuerza. "No puedo dejarte ir."
Giselle no podía liberarse de él y dijo con frustración: "¿Qué es lo que vio Alisha en ti? Si no me sueltas, le diré a los Everett que me has estado molestando".
"¡Perfecto!" Prestin deseaba que lo hiciera. "No quiero casarme con ella. Estoy esperando a que rompan el compromiso. Si lo hacen, me casaré contigo. ¿No te preocupaba que tu hermana se quedara con la herencia de los Hawks? Si te casas conmigo, me aseguraré de que eso no suceda."
"¡Qué cosas tienes! ¿Casarme contigo?" Giselle dijo con desdén: "¿Qué te hace pensar que puedes compararte con Maverick?"
"¡Tú...!" A Prestin le molestaba que ella lo comparara con Maverick todo el tiempo. Giselle lo fulminó con la mirada sin ceder en absoluto, lo cual la hacía ver muy atractiva.
Prestin resopló mientras su ira iba disminuyendo gradualmente. "Pero es una pena que él no te quiera."
Después de eso, él la tomó por el hombro obligándola a mirarlo. "Giselle, ¿por qué no entiendes que soy el único que realmente te ama? Patrick te mintió y Maverick solo está jugando contigo."
A Giselle casi se le quitó el apetito. "Sr. Addiman, su amor es demasiado para mí." Luego, amenazó entre dientes: "Como no me sueltes, voy a gritar pidiendo ayuda. Todos en este café nos están mirando."
Sin embargo, Prestin apretó aún más fuerte su muñeca.
Ella no pudo soportarlo más y justo cuando estaba a punto de gritar, su mirada se encontró con alguien familiar, provocando que sus palabras se quedaran atrapadas en su garganta mientras entraba en pánico.
Cuando Prestin se dio la vuelta, se encontró con la intensa mirada de Maverick, cuyos ojos oscuros desprendían una profundidad misteriosa mientras paso a paso se acercaba a ellos con lentitud.
Justo cuando Prestin había encontrado la oportunidad de hablar con Giselle, era interrumpido una vez más.
Así que frunció el ceño sintiéndose frustrado, pero solo se limitó a seguir sonriendo. "Sr. Hyland, ¿está aquí por negocios?"
Era evidente que estaba ahí por negocios. Prestin lo supo inmediatamente cuando vio a Maverick acercarse con su asistente y el presidente de otra compañía detrás de él.
Pero sin tomar en cuenta la pregunta que Prestin le había hecho, Maverick caminó lentamente y se paró con firmeza frente a ellos manteniendo su mirada fija en Giselle.
Ella se sintió un poco culpable, como si la hubieran atrapado en el acto. "Rick...", lo llamó suavemente.
Claramente había un favoritismo, a pesar de que ambos eran sus ex novios.
Por ese motivo, Prestin no pudo evitar sentirse más desafiante y con una sonrisa dijo a propósito: "Oh, ¿entonces también quieres ponerte al día con tu ex novia?"
"¿Se estaban poniendo al día los dos?" respondió Maverick mientras deslizaba sus manos en su bolsillo.
Una sonrisa se dibujó en su rostro al mirar fijamente a Giselle.
"No."
"Sí."
Giselle miró a Prestin con frustración, después de notar que ambos habían respondido al mismo tiempo.
"Entonces ¿qué hacen aquí?"
A pesar de que su tono era serio, la voz de Maverick se mantuvo tranquila y serena, pero había una ligera frialdad en sus ojos al ver que Giselle miraba a Prestin.
Sin embargo, a Prestin no le agradó la forma en la que Maverick había hablado. "Lo que hagamos Giselle y yo no es asunto tuyo, ¿verdad?"
La expresión de Giselle cambió de repente.
No quería estar involucrada en ninguna decisión riesgosa que tomaba Prestin y rápidamente explicó: "No es cierto. Él me obligó a venir aquí."
En ese momento, ella se liberó de Prestin antes de que este pudiera reaccionar. Sin embargo, él alcanzó a sujetarla de nuevo del brazo, y mientras ella intentaba correr hacia Maverick. "Giselle, no irás a ningún lado."
Pero justo cuando hablaba, las manos de Prestin fueron apartadas repentinamente por una gran fuerza.
Maverick agarró sus manos y las torció hacia arriba. Prestin contuvo su grito y mientras se retorcía de dolor, lo miró y dijo, palabra por palabra: "Maverick, no seas un entrometido."
Maverick resopló y sujetó a Giselle por la cintura atrayéndola hacia él, para luego presionar su cabeza contra su pecho en un intento de declarar su autoridad. "¿Llamas a esto ser un entrometido?"