Los días habían pasado volando y los había pasado encerrada en la habitación, tenía muchas cosas en las cuales pensar, muchas cosas las cuales ni siquiera había podido terminar de asimilar y eso me hacía querer alejarme de todos.
Aine había venido todos los días a traerme la comida y a preguntarme cómo estaba, ambas sabíamos que no estaba bien, sin embargo, ella simulaba que me creía cada vez que esas palabras salían de mi boca.
El mentir “Estoy bien” y “Todo bien” se habían vuelto las palabras más frecuentes que salía de mi boca cada vez que ella preguntaba y aunque no me gustaba mentir, no tenía ganas de explayarme más de lo que lo hacía y la verdad agradecía que ella no me insistiera.

Los chicos, cada uno de ellos habían decidido darme mi tiempo, estaba segura de que ellos creían que les tenía miedo o algo parecido, lo que a decir verdad un poco sí, jamás en mi sano juicio había imaginado que vampiros y lobos fueran una realidad, pero lo que más miedo me daba era lo que yo era, si ellos estaban en lo correcto al yo salir de los territorios de los Stone mi poder se iba a descontrolar y no solo podría hacerme daño a mí, sino también a los que me rodeaban.
El diario de mi mamá no me ayudaba de mucho tampoco, ella solo hablaba de mí y de cómo mi poder se había controlado solo, ella no sabía por qué mis poderes se había mantenido a raya todos estos años después de descontrolarse cuando era chiquita y la única solución que tenía era preguntarle a Daniel, si mi mamá no lo había logrado ella misma, significaba que él tendría que saberlo él, pero parecía que no quería hablar conmigo porque cada vez que le mandaba un msj o lo llamaba jamás me contestaba y no tenía a nadie más a quien preguntar, a nadie que me conociera desde que era un bebe.
Mi padre no contaba por qué a él no lo conocía, él podría mentirme y yo no lo sabría, en cambio, Daniel y mi mamá eran dos cosas diferentes, siempre sabia cuando uno de los dos me mentía y por eso lo necesitaba a Daniel, ya que mi mamá no estaba para decirme toda la verdad, aunque la verdad estaba dudando que me devolviera los msj o que me llamara por lo que tendría que hablar con Emmet y preguntarle si es que sabía algo más de mi familia, pero por lo pronto lo importante era vestirme para la fiesta que iba a dar mi suegra, si no iba lo único que iba a ser era que todos hablaran y era lo que menos necesitaba en este momento.
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POV JONH
Parar la reunión de mi madre hace días había traído repercusiones, había cobrado demasiados favores para parar esa reunión y la verdad aún no sabía si había valido la pena, mi madre siempre tenía las de ganar, no necesitaba que nadie este de acuerdo con ella, y podía hacer lo que ella quisiera, sin embargo, eliminar a más de la mitad de las familias que no eran puros como nosotros era algo que no podía hacer por su cuenta, si no ya lo habría hecho o por lo menos eso era lo que yo pensaba, mi hijo pensaba algo completamente diferente.

-Mi hermana está completamente loca- Me dice mi tío entrando a mi habitación- Tenemos que pararla.
- ¿Qué hizo ahora?
Él me mira como si no entendiera mi pregunta, como si para él fuera una completa sorpresa que mi madre no compartiera nada conmigo como siempre.
-Quiere atacar a los lobos- Me dice y yo lo miro sin creerle- Dicen que se va a anunciar que tu hija y Emmet Stone se van a comprometer y ella quiere parar esto, porque si llega a pasar el compromiso ya no va a poder separar a las especies distintas.

-Lilith está en su derecho a comprometerse con quien quiera.
-Dile eso a tu madre- Susurra- Aunque tú y yo opinemos que Lilith no nos debe nada a nosotros, tu madre es completamente diferente a nosotros, ella siempre va a pensar que cada uno que tenga un poco de sangre nuestra en sus sistemas nos debe, por lo que a lo que a tu mamá respecta ella tiene el poder sobre la vida de tu hija.
Mi tío tenía razón, mi madre no dejaría que mi hija manchara nuestra sangre, no cuando éramos de las pocas familias puras.
-Tendremos que parar lo que sea que mi madre quiera hacer- Le digo agarrando un abrigo y saliendo de mi habitación con mi tío siguiéndome de cerca- Llamaré a los Stone para que estén avisados y por las dudas también llama a Daniel y dile que vuelva, estoy seguro de que mi hija va a necesitar hablar con la persona que ha estado con ella desde que nació.
-No voy a traer a mi hijo- Me dice lo más despacio que pudo- Sabes que si pone un pie en Nueva Orleans va a tener que hacer lo que nosotros hacemos y él lo que menos quiere es vivir así.
-Tampoco quiero que viva así- Le aseguro- Pero Lilith no quiere hablar conmigo y creo que va a tener más peso lo que le diga alguien que la conoce desde siempre que alguien que apenas conoce.
-Puedo ver si los puedo juntar sin que ella tenga que salir del país y sin que él tenga que entrar.
Asiente a lo que él dice, si él podía hacer eso le debería un favor, yo tampoco quería deberle más de lo que le debía a Daniel, aunque por mi hija estaba dispuesto a hacer cualquier cosa.