Capítulo 34
1103palabras
2023-02-14 14:04
Luego de que el médico culminase de vendar la herida de Hannah, ella le dio las gracias. Así pues, corrió hacia el salón donde se desarrollaría el banquete.
Antes de que llegase, se percató de que William y los demás todavía se hallaban parados fuera del recinto; conversando unos con otros. En el caso del primero, charlaba con Gerald con la cabeza gacha.
Y visualizando a todos con mayor atención, respiró hondo, aminoró la marcha y se acercó. En efecto, cuando la notaron, por lo menos el par antes mencionado se detuvo.
Su mirada se encontró con la de William de casualidad, e instantáneamente cayó en sus oscuras e insondables pupilas por un segundo. Inmediatamente después, frunció las cejas y rápidamente ocultó el rostro para disculparse: "Siento llegar tarde".
En tanto, el caballero dirigió sus ojos hacia su mano izquierda lesionada. Contemplando la gasa, enunció: "Vamos".
"Sí, Señor Presidente", replicó; a su vez que todos asentían al unísono, siguiéndole.
"Dios mío, Señorita Porter. ¿Qué le ha ocurrido a su mano?", preguntó preocupado el dirigente de Fliysau a su llegada; mientras pasaba olímpicamente de William.
Sucede que, la chica atisbó a su jefe por el rabillo del ojo. Al darse cuenta de que él no tenía intenciones de explicar, rio cortésmente al mayor y respondió: "Me he hecho daño sin querer. El médico ya me ayudó a lidiar con ello y ahora estoy bien. Gracias por su preocupación, Señor Presidente."
Con una sonrisa, el mencionado afirmó con la cabeza y dijo: "Una dama tan joven y hermosa como usted me hará sentir afligido incluso si es un pequeño rasguño. Recuerde tener más cuidado la próxima vez".
Hannah le devolvió el gesto y contestó: "Gracias, Señor Presidente. Así será".
"Parece que han descansado bien. Disfrutemos pues de la fiesta que se nos avecina", pronunció finalmente William con indiferencia.
"Jaja…". El Presidente de Fliysau soltó una sonora carcajada. Tras una pausa, agregó: "Para ser honesto, ya tengo hambre".
"¡Entremos entonces!", enunció William.
"Por supuesto", exclamó la visita.
......
De vuelta en la oficina de traducción, Steven se enteró que Willow habría lastimado a Hannah; y no conforme con ello, buscó seguir a Annabel para acercarse a su jefe, tratando de tomar el lugar de la chica para los siguientes eventos de la tarde. Entonces, solicitó a alguien que llamase a la susodicha a su despacho porque deseaba averiguar qué estaba pasando.
"Sr. Albert, es verdad que herí a mi compañera, pero fue un accidente. Solo quería hablar con ella porque me preocupaba que estuviese nerviosa por su primer gran evento, no era mi intención. Además, me he disculpado y a ella le ha parecido bien", expresó la mujer con un deje de culpa. Continuó: "En cuanto a seguir a la secretaria para encontrarme con el Señor Presidente, eso fue porque escuché que Hannah fue a la enfermería debido a la lesión y le preocupaba sobremanera que ésta llegase tarde al banquete. De hecho, se hallaba inquieta de que pudiese estar en mal estado; así que, me solicitó hacerme cargo por el momento. No estaba pensando en nada más. Simplemente no quiero que la atmósfera en el almuerzo sea incómoda debido a un problema de comunicación", explicó.
"¿Me estás diciendo la verdad? ¿Fue solo un accidente?", trató de confirmar Steven de nuevo. Y es que, como director del Departamento de Traducción conocía perfectamente el carácter y la actitud de todos y hacia todos.
"Sr. Albert, incluso Hannah me ha perdonado. Si realmente lo hubiese hecho adredes, ella habría orquestado algo, ¿no?", señaló. A continuación, sonrió; y luego con un rostro serio, agregó: "Juro que pronto me caerá un rayo y me despedirán de la Mansión del Presidente si le lastimé a propósito para quitarle su lugar en los próximos eventos".
Observando a Willow, Steven no supo cómo refutar. Un momento después, suspiró; y levantándose expuso: "Fue el Presidente de Fliysau quien nombró a Hannah como intérprete principal durante su visita. No fue decisión nuestra ni del Señor Scott. Por lo que, tenga cuidado con sus pasos y no cause ningún problema. De lo contrario, no solo afectará su futuro sino también la relación amistosa entre nuestro país y Fliysau; siendo este departamento el que asuma las consecuencias de ello".
Cuando Willow escuchó esto, no pudo evitar fruncir el ceño. Nunca esperó que fuese el dirigente vecino quién designase a la joven como traductora especializada.
Tal parece que solo le restaba tragarse su ira, y no hacer nada al respecto.
"Sí, Señor Albert. No se preocupe. Durante la estadía del Presidente de Fliysau aquí, nunca volveré a acercarme a Hannah, y no interferiré con su trabajo", prometió la fémina con una sonrisa.
"¡Genial!", asintió Steven. Seguidamente, añadió: "Todos estamos aquí para servir al Señor Presidente y a nuestro país. Lo más importante es desempeñar bien nuestro papel. Es mejor no causar ningún problema".
"Entendido, Sr. Albert. No se preocupe. Le recordaré", respondió.
......
En casa de la familia Porter, Melissa se encontraba histérica; puesto que la habrían expulsado de Canics Group. Así pues, les informó a Davis y Lana que deseaba casarse con Kevin sin importar nada ni nadie. De lo contrario, se suicidaría.
"Todo se debe a tu preciosa hija que sedujo a su hombre tan pronto como regresó, y ahora la reputación de nuestra familia está arruinada", gritó la mayor; observando con preocupación las intenciones de su niña de quitarse la vida. A continuación, chilló a su marido: "No sé qué le habrá dicho esa p*rra a ese muchacho, y no tengo idea de qué trucos jugó para que de repente cambiase de opinión sobre Mel. ¿Cómo se atreve a pedirle a alguien que arrojase a mi pequeña de Canics Group? Si este asunto se difunde, ¡a nadie le importará nuestra familia en el futuro! Ugh, ya siquiera me atrevo a salir y conocer gente".
Mirando a Melissa que lloraba, Davis se sintió frustrado. Con el ceño fruncido, se apoyó en el sofá y preguntó con tristeza: "¿Es él el único en el mundo? ¿Por qué insistes en casarte?".
"¡Papá, no contraeré nupcias con nadie más excepto con Kevin!", se lamentó Melissa nuevamente.
"Casi todos conocen la relación entre Mel y el joven, y saben que ella es su futura esposa. Ahora, que Hannah ha hecho tal escena, estoy seguro que la familia Byrne no le tomará a la ligera. Esto no solo se trata de la reputación de su persona, sino también la de nuestra familia. Si este problema persiste, ¿Quién se preocupará por nosotros en los días venideros? ¿Quién querrá casarse con mi niña? Con tu otra hija aquí... ¡Todos estaremos condenados!", Lana analizó.