Punto de vista de Damen, unos días después
Habían pasado unos días desde la muerte de mi madre, la manada seguía de luto, todo el mundo estaba deprimido y habían descuidado sus tareas y responsabilidades; todos excepto los guardias y patrulleros, que estaban en alerta máxima porque aún no teníamos idea de cómo ese lobo rebelde se logró infiltrar en nuestro territorio sin ser detectado. Yo había estado entrenando más duro que nunca, esperaba estar lo suficientemente fuerte como para desafiar a mi padre por la posición de alfa pronto.
Mi padre estaba cada vez peor, antes de la muerte de mi madre, tenía hambre de poder, pero aun así manejaba la manada sin muchos problemas; sin embargo, se había vuelto despiadado y cruel, culpaba a la manada y estaba descargando toda su ira contra ellos. A los machos los obligaba a trabajar durante muchas horas, alejados de sus parejas, y a las hembras, a limpiar y cocinar todo el día y, lo peor de todo, era que se la pasaba con p*tas; estaba usando el 'placer' para sobrellevar la situación, y, seguramente para tratar de olvidar la muerte de mi madre. Mi padre debía entregarme la manada, y si no lo hacía voluntariamente, entonces la tomaría en mi cumpleaños. Desafiarlo era una tarea peligrosa, solo un alfa podía vencerlo, porque cualquier otro lobo que lo intentara moriría en la pelea; el enfrentamiento solo terminaría cuando uno de los lobos se sometiera al otro, es decir, cuando se rindiera, o si uno de ellos moría en la pelea, lo cual le daría la victoria inmediata al otro.

Últimamente, mi padre se había negado a entrenar o transformarse, su lobo debía estar demasiado deprimido por la pérdida de su pareja y ya no le importaba nada; cuando una pareja moría, el lobo de la otra persona a veces permanecía inactivo por el resto de su vida, se paralizaba por todo el dolor que sentía. Me parecía asombroso que yo hubiera durado tanto tiempo luego de la muerte de Cassidy, pero creía que la única razón por la que todavía seguía vivo era porque nuestro vínculo no se había formado lo suficiente como para causarle un daño significativo a mi lobo o a mí. Sí, mi lobo seguía callado y de luto, pero no había dejado de hacerme sentir su presencia en mi cabeza; aunque para ser franco, los gritos por su pareja eran muy molestos, al igual que ese dolor constante y los aullidos, pero por lo general, podía ignorarlos.
La muerte de mi madre retrasó los preparativos del funeral de Cassidy, porque el funeral de la luna era la prioridad número uno; ya todo estaba arreglado, pero no gracias a mi padre, que seguía demasiado ocupado haciendo el ridículo como para tomarse el tiempo de ayudar. ¡Al menos, él debería demostrar algo de remordimiento, dolor o cualquier emoción!, pero no estaba actuando como debía hacerlo una pareja, tenía que recomponerse pronto.
El funeral de mi madre había sido planeado para esa tarde, se llevaría a cabo en el patio trasero, el lugar estaba lleno de sillas y flores de colores, mi madre las amaba; sin embargo, a pesar de los toques coloridos en todas partes, el ambiente se veía completamente deprimente. El cielo estaba nublado, de un tono gris horrible, que en realidad, combinaba perfectamente con las telas grises que envolvían los árboles y colgaban de las sillas; se suponía que eso haría que el jardín se viera más elegante, pero, realmente parecía que ese material estaba opacando todo lo bello. Fruncí el ceño para mis adentros, sentía como si la muerte se hubiera llevado todas las cosas hermosas de mi vida, primero, Cassidy, y luego mi madre; honestamente también se podría haber llevado a mi padre, pero a él obviamente no lo consideraba hermoso.
Se esperaba que toda la manada se presentara al funeral, tenían que demostrar sus respetos a su luna, que nos había dejado demasiado pronto. No tuve la oportunidad de ver a mi madre sonreír por última vez, o escucharla reír, porque no lo volvió a hacer después de que supo que había rechazado a Cassidy hace casi un año, y ya no tendría ninguna otra oportunidad.
¿Por qué tenía que terminar lastimando a todas las personas que me importaban? Primero Cassidy, luego mi madre, ¿quién más podría seguir?
Punto de vista de Jake

El funeral de nuestra luna fue desgarradoramente triste, todos lloraron, excepto el alfa, ¡él no derramó ni una lágrima por la muerte de su pareja!, lo odio. No sabía cuánto tiempo más iba a poder quedarme aquí, en medio de la antigua pareja de Cassidy, mi madre, todavía afligida por su partida y sin siquiera querer hablarme, la p*ta que tenía por hermana, la escoria infiel de mi padre, y el alfa opresivo que estaba obligado a obedecer; no sabía cuánto más podría soportarlo, estaba desperdiciando mi vida en este lugar.
Después del funeral, regresé a mi cuarto casi que corriendo, mi habitación estaba vacía, antes solía tener fotos de chicas y amigos en las paredes, también carteles de mis bandas favoritas y cajas de CD apiladas alrededor. Sin embargo, en lugar de todos los carteles y fotografías, ahora solo había un mapa de cuando estaba buscando a Cassidy; taché todos los lugares a los que había ido y puse un pin en los que tenía planeado buscar, pero tenía miedo de quitarlo, porque eso implicaría aceptar que ella se había ido y aún no lo aceptaba.
Mi hermanita no estaba destinada a morir, su destino era encontrar a su pareja y vivir una vida larga y feliz; se suponía que envejecería y sería una buena tía para mis hijos. Ella era la única que realmente me conocía, a pesar de que en realidad no hablábamos, pero de alguna manera alcanzó a conocerme con solo observarme desde lejos, era realmente increíble.