Capítulo 11
1662palabras
2022-11-14 01:39
Con el Sol cerca del poniente; Yurik regresó al cauce del río que corría en dirección equivocada, donde ahora si encontró peces; ¡Pero qué peces! Peces tan grandes que se atoraban entre las piedras, no le fue difícil sacar uno de los más grandes a patadas del río, recordando su entrenamiento de tropero en los boy scouts de México, y cuando pescaba en su tiempo libre en las plataformas marinas de perforación petrolera en el Golfo de México, con la ayuda de su navaja 07 des escamó y limpió el pescado, lo ensartó con una vara y se dispuso a cocinarlo en un pedestal triangular de palos, que también construyó con una técnica aprendida con los boy scouts, mientras lo asaba pacientemente pensaba en lo que había sucedido.
-¡Diablos! Esa espada casi me corta la cabeza y de seguro fue la que decapitó al español, lo que no comprendo es la agilidad con la que pude quitarme, aunque siempre había tenido muy buenos reflejos y también soy muy rápido para correr, jamás creí que fuera tan ágil, o; ¿Será una nueva habilidad como la del lanzamiento del hacha y cuchillos?
Sacó una vez más el celular de su bolsa y lo encendió, el aparato comenzó su protocolo de búsqueda de señal, y al aparecer de nueva cuenta el comando sin servicio, hizo su acostumbrado gesto de fastidio, checó la hora y éste marcaba las 2:10, sacó de su bolsillo trasero su libreta de tránsito y se dispuso a continuar dibujando el mapa de lo recorrido, dibujó otro círculo imperfecto al Norte del Bosque de los Murmullos.
Y así los marcó, por lo menos ahora ya sabía el nombre de los lugares que había visitado, más o menos a la mitad de la página dibujó una pequeña espada y la encerró en un círculo, muy cerca de la raya sinuosa, que representaba al río, en la esquina superior dibujó una Luna con un 4 encerrado en un círculo, para indicar el cuarto día, todavía había suficiente luz de día cuando escuchó una especie de mugido a lo lejos, como el barritar de un elefante pero mucho más fuerte, de pronto vio como un precioso caballo negro de largas crines aparecía en la cima de una colina, daba una repentina vuelta a su izquierda, y corría desbocado perdiéndose colina abajo, colocó su libreta de tránsito en su bolsillo y corrió hacia donde había visto al caballo, al remontar la colina casi se cae de bruces al ver algo enorme que volando perseguía al animal en fuga.
-¡Que me rapen! –dijo en voz alta. -¡Un dragón, diablos, demonios y cielos! ¡Es igual a los dragones de: El reinado de fuego!
Corrió remontando velozmente la colina, al alcanzar la cima miró como colina abajo, el caballo negro.
No. 1 Película de ciencia ficción del año 2002 donde, en el año 2020, la civilización como la conocemos ha dejado de existir, de las profundidades de la Tierra despegaron los dragones que habían permanecido congelados durante millones de años, pronto se transformaron en una amenaza lo suficientemente grande como que las potencias militares tuvieron que utilizar su poderío nuclear para intentar destruirlos, lo que no sólo resultó insuficiente, sino que ayudó a que el mundo se transformase en cenizas, cenizas que curiosamente eran el principal alimento de los dragones de esa historia, después del holocausto nuclear quedan entonces muchos dragones y pocos humanos ocultos en comunidades suburbanas como la que lidera Quinn (Cristian Bale) en las afueras de Londres, con tan poca comida como esperanzas de sobrevivir al fuego de los monstruos, en la trama la comunidad de Quinn recibe pronto la visita de un grupo de cazadores de dragones, que liderados por un
Corría tratando de escapar de su depredador, el caballo era muy veloz pero el dragón en vuelo rasante lo era mucho más, observó impotente como el dragón se abalanzaba sobre el caballo que estaba a punto de ser levantado.
El dragón se veía unas 3 veces más grande y se sintió con deseos de ayudarlo de alguna manera, y de repente el caballo se tiró al suelo cayendo de costado, como si se hubiera tropezado en el preciso momento en que el dragón trató de atraparlo con sus garras, pasando de largo sin alcanzar siquiera a rozarlo.
-¡Así se hace, compadre!
Gritó emocionado festejando la oportuna maniobra del equino, el dragón recompuso su vuelo y dando una vuelta, se puso en ruta del caballo que ahora corría desbocado, hacia donde se encontraba el hombre observando tan singular batalla, ésta vez el dragón hizo un planeo diferente y más pegado al piso, como preparándose para levantar el caballo en caso de que este le hiciera el mismo truco, el caballo remontaba la colina y cuando sintió al dragón cerca, frenó derrapando dando repentinamente la vuelta, y de un salto pasó por encima de las alas del dragón propinándole tremenda coz con las cuatro patas haciéndolo medir el suelo con la panza, y haciéndolo tropezar cayendo descompuesto en medio de una nube de polvo y restos de pasto, a unos 20 metros de Yurik y éste, aprovechando que el dragón no lo había visto, zafó el hacha de contraincendios de su cinturón, y la aventó girando como un tomahawk hacia su cabeza, tratando de sorprenderlo, el dragón presintió el movimiento e interpuso una de sus alas.
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Que apenas fue rasgada por el hacha, el dragón gris inquisitivamente volteó hacia el lugar donde había venido el objeto, y observó a quien ya lo esperaba con la espada desenvainada y sosteniéndola en guardia alta, gritó, desafiándolo imprudentemente.
-¡UUUOOOOOOOOOOOOOOOO!
El dragón de 2 aletazos levantó el vuelo y empezó a volar en círculos como estudiando a aquel desconocido enemigo que lo desafiaba, y Yurik confiado en que la espada al sentirse atacada sola iba a despedazar a su enemigo, esperó pacientemente a que la bestia efectuara su ataque, recordando y tratando de usar la misma técnica que la espada utilizó con él, el monstruo hizo un aproximamiento de amenaza como estudiando la estrategia de aquél nuevo y desconocido enemigo, y se lanzó en vuelo rasante sin pasar muy cerca.
Yurik calculó la distancia más corta entre el vuelo del dragón y él, y con las 2 manos le aventó la espada, ésta solo dio 2 vueltas en el aire cayendo ensartada en el suelo, el dragón dio una vuelta dispuesto a levantar con sus garras a su enemigo, quien al ver que la espada no contraatacó como lo esperaba corrió colina abajo velozmente por entre los pastizales, y al sentirlo cerca repitió la maniobra que le había enseñado el caballo, sin frenar dio un repentino giro a la izquierda y con una maroma logró esquivar el aletazo que le pasó rozando, y el dragón ya contrariado por las continuas fintas en las que caía, escupió de su hocico varias bolas de fuego, incendiando los pastizales, obligándolo a correr colina arriba tratando de librar el fuego.
Corriendo se sintió perdido al ver que su enemigo se abalanzaba nuevamente sobre de él, y esta vez estaba seguro que ya no iba a tragarse el truco de los cambios de dirección, mientras corría colina arriba, alcanzó a ver una gran roca parada cual si fuera un monolito, con el Sol cayendo detrás de ella, y hacía ella se dirigió, el dragón volaba siguiéndolo y teniendo dificultades para enfocarlo por los reflejos del Sol que caía por detrás de la gran roca, deslumbrándolo, y cuando ya estaba seguro de que su presa no podría escapar, levantó su cabeza disponiéndose a levantarlo con sus garras, pero tan solo se escuchó un golpe seco y una nube de polvo cubrió el ambiente, el dragón cayó fulminado, la piedra se movió un poco desbalanceada por el contundente golpe que se dio el dragón, al chocar de cabeza contra ella, que cayó al tiempo en que Yurik salía de detrás de ella, ya que se había escondido ahí en el último momento en que el dragón trató de levantarlo, al verlo inerte y sin conocimiento, aún desconfiado sacó su navaja 07 de la funda y se acercó para rematarlo, sonriéndose divertido y hablando consigo mismo.
-¡Si loco, imbécil y animal! De seguro voy sacar filetes a un dragón para la cena con una navajita; ¡Mejor me voy de aquí antes de que reaccione!
Y diciendo esto se alejó lo más rápido que pudo al salir del humo de la batalla y del incendio, mientras el dragón seguía tirado inconsciente, miró al caballo negro de largas crines en una colina cercana, relinchando y parándose en sus patas traseras, como saludándolo o agradeciéndole por haberlo ayudado, levantó la mano como contestándole el saludo.
Y el caballo se alejó con un trote tranquilo.
El dragón despertó dando un rugido y se sacudió tratando de despabilarse; Yurik al escucharlo se agachó para ocultarse entre los pastizales, mientras el dragón emprendía un vuelo torpe y descompuesto, alejándose, con más ganas de escapar que de localizar al que lo había golpeado y recomponer un ataque, al verlo alejarse suspiró aliviado y se dispuso a buscar su hacha y a la fallida espada.
-¡Que me rapen si es poderosa esta espada, de plano sirvió para nada!
Refunfuñaba, mientras buscaba sus armas, encontrando el hacha entre los pastizales y la espada donde había quedado ensartada, la enfundó en su espalda y regresó al río todavía malhumorado, pero se sintió contento al descubrir que ahí estaba su pescado, ya perfectamente cocinado, y mientras se lo devoraba pensaba en cómo había sido posible que la espada que parecía tan poderosa, y hasta tener vida propia no funcionara, se puso a recordar los cuentos de hadas y las historias en películas y juegos de video sobre caballeros y espadas.
-¡Méndiga! Si tan solo funcionara contigo el ritual de la espada cantarina al menos me cantarías una canción; ¡Eeesssssoooo! –gritó emocionado. -¡Un ritual! ¡La espada necesita un ritual o una clave de activación! ¡Como las esferas del dragón!