Capítulo 56
1189palabras
2022-06-14 00:00
Ante miles de personas, con un gesto frío Jamie levantó una tarjeta de 10 puntos.
"¿Diez puntos?", todos se sorprendieron.
Al ver la calificación en su tarjeta, el público estalló en un alboroto.
No podían creer lo que estaban viendo. Había dado solo sietes durante todo el concurso. ¿Cómo podía dar de pronto una puntuación tan alta?
No tenía lógica.
Los jueces también estaban muy sorprendidos. Pensaron que tal vez Jamie se había equivocado de tarjeta.
Uno de ellos preguntó en voz baja: "Señor Barrett, ¿por qué le puso diez?".
Jamie estaba sentado elegantemente, con su indescifrable temperamento.
Frunció sus delgados labios y dijo: "Porque me gusta...".
El público de nuevo estalló en gritos.
¿Que está pasando?
Los jueces estaban tan conmocionados que se quedaron boquiabiertos, sin saber ni qué decir.
El señor Barrett le estaba dando una puntuación tan alta ¿porque le gustaba?, ¿era una especie de broma? Además, les preocupaba que no le habían dado suficientes puntos a Lexi hasta ahora.
De pie, tras del escenario, la chica estaba congelada. Miró a Jamie con asombro. Sus mejillas ardían y su corazón latía salvajemente.
Hubo un silencio sepulcral después de que Jamie dijera eso. Era como si todo el lugar se hubiera puesto en pausa.
Sin embargo, Jamie se hizo de la vista gorda. Simplemente frunció sus labios y continuó con una voz magnética.
"Me gusta... por su capacidad de adaptarse a las circunstancias".
¿Así que lo que le gustaba era la capacidad de adaptación de la chica?
Todos recobraron el aliento. Eso era lo que quería decir.
Los jueces suspiraron con alivio. Afortunadamente, no era lo que habían pensado.
El cuerpo de Lexi se petrificó como si estuviera clavada en el suelo. Su corazón todavía latía sin parar, simplemente era halagador que el director dijera que la admiraba.
Como si sintiera la mirada de Lexi, Jamie de repente volteó hacia donde ella estaba.
Desde lejos, ambos se miraron.
El corazón de Lexi dio un vuelco. De nuevo comenzó a latir salvajemente y tuvo que esconderse.
Además, sus mejillas parecían estar en llamas.
Por otro lado, al ver que Demi se puso pálida, su asistente rápidamente fue a consolarla.
"No te preocupes, Demi. Aunque Lexi igualó el puntaje, ella no tiene ni tu fama ni tus fans, por lo que el público no le dará muchos puntos. Su calificación definitivamente no será tan buena como la tuya".
"¡Quiero que la corran!".
No se trataba solo de tener la calificación más alta.
Demi se alteró mucho. Estaba de muy mal humor esperando la calificación del público.
Pronto, se anunciaron los resultados. Demi obtuvo 17 puntos... ¡y Lexi también!
Sus calificaciones fueron idénticas. Por lo tanto, estaban empatadas en el primer lugar.
Comparada con Demi, que ya era una diseñadora famosa, Lexi se veía como un caballo negro que había aparecido de repente.
Su impresionante trabajo llamó mucho la atención.
Mirando los puntajes en la pantalla, el rostro de Demi palideció de nuevo. No lo podía creer.
"¿Cómo es posible? ¿Por qué Lexi tiene la misma calificación que yo?".
Demi no pudo evitar maldecir en voz alta. Y entonces comenzó a entrar en crisis.
Hace dos años descubrió el talento de Lexi, y desde entonces, la estuvo obstaculizando deliberadamente, sacándola de los concursos para que no tuviera ninguna oportunidad.
Pero de pronto... ¡Estaba al mismo nivel que ella!
Una vez anunciados los resultados, todos los modelos y los diseñadores subieron al escenario para agradecer al público, marcando así el final del concurso.
Ronnie se acercó a los camerinos para esperar a Lexi.
Ambas chicas caminaron juntas, pero Ronnie solo miraba a Lexi.
Él sonrió y dijo: ¡Felicidades!", "Ganaste!".
Con este triunfo, sería mucho más fácil ganar en la ronda final.
Lexi estaba de muy buen humor. "Todo fue gracias a tu incansable ayuda. Realmente te aprecio".
"Ni lo menciones".
Ronnie lanzó una cálida sonrisa.
A un lado estaba Aliyah de pie, portando el hermoso vestido, pero aunque lucía extremadamente atractiva, Ronnie la ignoró por completo.
Miró a Ronnie y su corazón estaba desconsolado. Moría de celos.
"Ronnie...", dijo tímidamente.
Su voz era suave, con tono sentimental.
Aliyah se veía hermosa, pero también un poco miserable.
Ronnie parecía haber notado a Aliyah hasta ahora. La escaneó de arriba abajo, pero su mirada era particularmente fría.
Luego, miró Lexi y le dijo:
"Ya casi termino de empacar tus cosas. ¿Puedes esperarme un momento?, iré después de hablar con Aliyah".
"Okey".
Después de lo que había pasado, Lexi la odiaba. No quería estar con ella ni un minuto más.
Sin embargo, no le importaba lo que los dos se quisieran decir, ya que solían ser amantes.
Lexi se retiró.
Al ver que Ronnie se había quedado, los ojos de Aliyah se iluminaron con esperanza. Sus rojos labios esbozaron una hermosa sonrisa.
Le preguntó: "¿cómo estuvo mi show? Antes me decías que era la más hermosa en el escenario".
Solían soñar que algún día Aliyah modelaría los diseños de Ronnie.
Pero ahora...
El hombre se acercó y agarró el dobladillo del vestido.
Sus dedos tocaron la parte donde se derramó el vino tinto.
Aunque la mancha ya estaba seca, aún se percibía el olor a vino.
"¿Lo hiciste a drede?", preguntó.
Aliyah se congeló por un momento y aunque la culpa se veía en sus ojos, contestó con seguridad: "Ronnie, ¿de qué estás hablando? No entiendo".
"Aliyah, ¿crees que soy estúpido?", hizo una pausa y le dijo: "¡No importa lo que digas, no creo que seas inocente!".
Ronnie se rió con frialdad mientras la veía con desprecio.
"Te lo advierto. No vuelvas a meterte con Lexi. No creas que te tendré misericordia, nuestra relación ya terminó".
Esas palabras se clavaron directamente en el corazón de la chica.
Su rostro se puso pálido y de pronto las lágrimas se acumularon en sus ojos.
"Ronnie, yo no hice nada. ¿Cómo puedes decirme eso?".
Sin embargo, el hombre ni siquiera se molestó en mirarla de nuevo. Se dio la media vuelta y se fue.
Aunque habían sido muy cercanos, ahora parecía extremadamente distante. Ya no quedaba ningún rastro de amor entre ellos.
Un hombre puede volverse despiadado después de una ruptura.
Aliyah se sintió mareada y casi perdía el equilibrio. Como si estuviera a punto de colapsar.
No hace mucho, Aliyah había vuelto del extranjero. Estaba segura de tener una oportunidad de regresar con él.
Sin embargo, desde que apareció Lexi, todo cambió.
'¡Es culpa de ella!', pensó.
Los ojos de Aliyah se llenaron de odio. "¿De verdad te gusta tanto?", le gritó.
Los pasos de ese hombre se congelaron. ¿Le gustaba Lexi?
La pregunta se dibujó en su rostro, luego frunció sus labios y se alejó sin decir nada.
Él no contestó, pero ese silencio fue desgarrador para Aliyah.
Después de estar juntos durante tantos años, conocía a Ronnie mejor que nadie. Cuando él decía que le gustaba una persona, lo más posible era que no le gustara tanto. Pero si no lo admitía ni lo negaba, eso significaba que realmente le gustaba desde el fondo de su corazón.
'¿Sabrá Ronnie que Lexi es la prometida de Jamie?', se preguntó.
Aliyah murmuraba, sus ojos estaban enrojecidos.