Skye:
Había llegado el día en el que Parker se mudaría a su nuevo apartamento. Así que Amy, Lewis y yo pasamos el día ayudándolo a mover el resto de sus cosas.
"Bueno, hermano mayor, admito que te extrañaré un poco. Pero no te olvides que existo", Amy hizo un puchero.

"Viviré a unos minutos, Amy, no al otro lado del mundo", se rio entre dientes.
"Sí, pero te olvidarás de mí porque tú y Skye ahora tienen su pequeño nido de amor", bromeó. 
Parker rodó ojos y se rio. Yo hice lo mismo. Luego me reí y reclamé: "Seguiré viviendo contigo, ¿recuerdas?"
"Sí por ahora. Te doy un mes para que termines viviendo con Parker", replicó. 
"Yo nunca te abandonaría", me reí.
"Sé que no me abandonarías, pero ese momento es inminente. No es que sea algo malo", dijo con una sonrisa. 

"No me importaría que dejaras a Amy sola", intervino Lewis. 
"Si no los conociera, pensaría que están intentando deshacerse de mí", resoplé. 
“Oye, siempre eres bienvenida en mi casa, mi amor”, me recordó Parker, guiñándome un ojo. 
"Al menos alguien me quiere en su casa", bromeé.

"Oh, deja de ser dramática", se burló Amy. 
Esperaba con ansias poder mudarme con Parker, pero tenía que esperar a que ambos estemos listos. Además, no estaría dejando a Amy pagar la renta sola, porque estaba segura de que Lewis estaría feliz de ocupar mi lugar. 
Le mostré a Amy el dedo del medio, y todos nos reímos.
"Ahora dime, hermano mayor, ¿vas a estar bien viviendo solo?"
"Estoy seguro de que me las arreglaré, hermana", respondió entre risas. 
"Bien, entonces los dejaremos solos para que se acomoden", sugirió. Luego hizo una mueca de asco. ¡A pesar de que fue ella quien lo dijo!
“Oigan, gracias por ayudarme”, sonrió Parker. Les dimos un abrazo de despedida, y se fueron. 
"¿Desempacamos tus cosas?", pregunté. Cuando lo miré, me percaté que su expresión denotaba que tenía otras intenciones. Levantó las cejas y me acercó a su cuerpo. 
“Estaba pensando en actividades más divertidas.”
"No lo dudo, pero con todo lo que hay esparcido, puede ser un poco peligroso. Además, no me quiero acostar en una cama sin sábanas", me burlé. 
"Buen punto. No necesitamos terminar en el hospital", estuvo de acuerdo.
"Así es. Pero una vez que guardemos algunas cosas y ordenemos tu cama, entonces seré toda tuya, incluso sin ropa".
"Mmm, lo espero con ansias."
Me dio un suave beso antes de separarnos y ponernos a trabajar. No necesitábamos desempacar todo, solo lo suficiente para que tuviera lo necesario. 
Claro, estaba muy emocionada por él; pero también iba a extrañarlo mucho. 
"Ni siquiera sé por dónde empezar", se quejó.
"¿Qué tal si empezamos en la sala de estar?"
Parker asintió y comenzamos a colocar todo en su lugar. No tenía demasiadas cosas, así que si éramos eficientes, podríamos terminar rápido. 
***
Colapsamos en su cama después de hacer el am*r durante una hora seguida. 
“Todo el arduo trabajo que ejecutamos para poder hacer esto, definitivamente valió la pena", manifestó. 
Luego, me abrazó. Yo asentí y me acurruqué contra él. Estaba demasiado cansada para hablar. Permanecimos en silencio durante los siguientes minutos mientras Parker me hacía caricias en la espalda.
“Skye, ¿te gustaría mudarte conmigo?”, preguntó con voz nerviosa. Entonces, me volteé para mirarlo. 
"¿Quieres que me mude aquí?", repetí. 
“Sí, me encantaría”, sonrió.
"A mí también me gustaría. Es algo que podemos discutir cuando ambos estemos listos para dar ese paso, y una vez que me asegure de que Amy estará bien."
“Ya estoy listo”, soltó.
"¿Lo estás?", pregunté. La sorpresa en mi voz era evidente. No esperaba que lo dijera. 
"Sí, pero si no estás lista, lo entiendo", me sonrió. 
"Me puedes dar un poco de tiempo para pensarlo y hablar con Amy?" 
"Claro. Tómate el tiempo que necesites. Pero creo que Amy estará bien. En el momento en que decidas mudarte, Lewis ocupará tu lugar", dijo riendo. 
"Sí, también lo creo."
“Piénsalo y luego me dices, ¿de acuerdo?”
"Lo haré. Lo prometo."
Me acerqué y le di un suave beso. Me gustaba la idea de vivir con él, pero tal vez era demasiado pronto. Sí, vivíamos juntos cuando él se alojaba con nosotras, pero era diferente. De todos modos, lo pensaría. Y para ser honesta, sentía que terminaría diciendo que sí.  
Había querido estar con Parker durante mucho tiempo, así que quería aprovechar su compañía al máximo.
“Si decides mudarte, le darás un toque femenino al apartamento”, comentó mientras me besaba la frente. 
"Ya lo pensé", dije con una sonrisa pícara. 
"Tomaré eso como una buena señal."
"Lo es."
Su rostro se iluminó cuando dije eso. Y al igual que yo, creo que ya anticipaba que me terminaría mudando. Sin embargo, no quería decir otra cosa por miedo a presionarme. 
Rodé los ojos juguetonamente y lo besé. 
"Te amo", murmuró. 
"También te amo."
Cuando dejamos de besarnos, nos acurrucamos de nuevo. 
"Entonces, ¿qué sigue?", preguntó.
"Hmm, la cocina o el sofá, y luego la ducha", propuse. 
Ya sabía lo que estaba pensando cuando dije eso. 
“Mmm, está bien.”
Todavía nos quedaban cajas que desempacar, pero era muy probable que lo dejemos por el día, ya que estábamos ocupados haciendo otras cosas.  
Podía imaginarnos viviendo juntos en su apartamento. Pero aún se sentía un poco extraño tenerlo para mí. Sentía que despertaría y me daría cuenta de que todo fue un sueño. Después de todo, no todos los días una termina con el hombre de sus sueños. Era una mujer muy afortunada…