Conforme pasan los días, Jhin sigue recluido, mi abogado ha tratado de alargar el proceso para no llegar al juicio final, porque sabemos que es muy probable que Jhin sea condenado así sea inocente.
Todos los días iba a delegación a visitar a Jhin, gracias a la amistad que había entre Susan y Reggins, había logrado un permiso especial para poder llevar a Tomas a la delegación a ver a su padre.
Jhin estaba tan emocionado, yo igual, a pesar de que ya se habían visto en el hospital, no habían tenido la oportunidad de compartir juntos solo hasta ese día que se nos autorizó.

Me levanto muy temprano, me pongo bella para mi amor, baño a Tomas y lo visto con una sudadera preciosa en algodón que tenia un osito en el saco, se veía tan tierno, y es que su carita es angelical, es la unión de su padre y yo, tiene una carita redonda y a medida que crece habla aun más.
-Hoy vamos a ir a ver a tu papa- le digo tiernamente
-Si papi shi, mamos- responde Tomas sin saber muy bien de quien le estoy hablando, pero estaba feliz.
Susan decide acompañarme a la delegación, algo se traía con Reggins, pero por ahora no le iba a decir nada, ella ya era una adulta libre de decidir qué hacer.
-Vamos mama, ya estoy lista- dice Susan luciendo unos jeans bastante apretados dejando a la luz sus curvas, una blusa corta reflejando su abdomen plano, un escote que no dejaba mucho a la imaginación y su cabello suelto en ondas-
- ¿Pero eres consiente de cómo vas vestida al lugar que vamos? Le digo con un aire de enojo

-Claro que, si mama, precisamente por eso me arregle así, no digas que mi amistad con Reggins no ha sido conveniente en estos momentos, además ese hombre me fascina es probable que hoy después su turno de trabajo salgamos a dar un paseo.
-Es tu problema, ya eres una mujer adulta, pero no creas que me estas ayudando, seduciendo al policía, si el quiere ayudar debe ser sin ningún interés, no me gusta que te use como forma de chantaje- le dije mirándola fijamente.
-Mama, para mi que me use de la forma que quiera jaja- suelta Susan acompañado de una enorme carcajada
Definitivamente este hombre la atraía mucho y era inevitable, ya se notaba que estaban enganchados.

Salimos a la delegación, increíble que nuestros romances se estaban viviendo de esta manera, en medio del crimen, la cárcel, policías, en especial el mío, cuanto diera por volver a tener los momentos que tenia antes con Jhin, donde fuimos a la playa y disfrutamos uno del otro.
Llegamos, y obviamente el famoso Reggins no se hizo esperar.
-Señorita Susan pero que atractiva luce usted el día de hoy, demasiado diría yo, señora Lana, ¿cómo esta?, ay el precioso Tomas, sigan tomen asiento, ya autorizo la visita. - Dice Reggins como si de una visita a un parque de diversiones se tratara.
Tomamos asiento, pasaron unos diez minutos, y nos hizo seguir a Tomas y a mí a la celda de Jhin, no era un lugar tan desagradable, gracias a Reggins, a mi abogado y al dinero, habíamos logrado una celda de las más cómodas en la delegación, esto hacía que Jhin no pasaran más mal los días que permanecía allí.
Al llegar, vimos que Jhin había logrado decorar el lugar con una mesa, con una vela, unos platos listos para una cena, unas bombas de color azul y blanco, en seguida entramos me dio un beso y al ver a Tomas, su llanto empezó a caer, lloraba mientras lo abrazaba y le decía cuanto lo amaba, fue inevitable llorar junto a él, era la primera vez en tanto tiempo que estaban tan cerca.
Llegue a pensar que Tomas iba a sentir temor, pero fue todo lo contrario, correspondió su abrazo y los dos se fundieron en el mismo como si ya se hubieran conocido desde siempre y lo llamo papa.
Jhin no podía parar de llorar.
-Jhin por favor, no llores más, puedes asustar a Tomas- le dije dulcemente
-Está bien mi amor, no lo hare más, lloro de felicidad de ver a mis dos amores juntos frente a mí, daría lo que fuera porque estuviéramos en otro sitio, en otra situación per….- Lo interrumpí
-Está bien Jhin, estamos bien por ahora aquí, ya estamos luchando por comprobar tu inocencia.
Sorprendentemente unos guardianes ayudaron a Jhin a tenernos una deliciosa cena, y un pastel, él quería, aunque con retraso celebrar el cumpleaños de Tomas nuevamente, así que los tres en esa celda cantamos el cumpleaños por segunda vez a Tomas.
Él le dio un regalo a nuestro hijo, Tomas lo destapo con tanta felicidad, era un carro de su niñez que había conservado por tantos años y que estaba avaluado en no sé cuántos millones de pesos, no entiendo como hizo para entrar el auto a la delegación, si es que allá era muy difícil todo.
-Jhin, quiero que me digas la verdad, ¿cómo estas obteniendo todos estos beneficios? Le pregunte algo asombrada por el regalo
-Lana, debo hablar contigo, hace poco vinieron mis padres y contrataron otro abogado diferente, ellos ahora me están ayudando, aportan una gran cantidad de dinero para que me puedan dar mejores tratos aquí y no me trasladen a una cárcel oficial, no tenía más opción, todos mis bienes están congelados, necesitan mi firma presencial para moverlos y aun no tengo un albacea- Dice Jhin mirándome mientras juguetea con Tomas.
-Que hiciste que Jhin, si era por dinero tú sabes que yo puedo costear todo lo que necesites, eso he estado haciendo durante este tiempo, mi abogado a tratado de dilatar el juicio buscando como ayudarte, es uno de los mejores abogados de pais y tu me sales con esto.
-Lana tu suficiente has tenido con mantener a nuestro hijo y tus cosas, no te voy a recargar lo que es mío, además mis padres tienen dinero en exceso, que sirvan de algo ya que solo me han arruinado la vida.
-Pero y ¿qué tal quieran volver a separarnos? - lo mire con mis ojos sumidos en una tristeza, que no sabia si era eso o decepción por lo que había hecho.
-No lo harán les acepte la ayuda con la condición de que no interfieran en mi relación contigo, ahora solo quiero estar contigo y con Tomas. - Me dijo con un tono de furia en su voz.
Nos quedamos en silencio por un momento, pero Tomas con sus travesuras nos hizo reír, compartimos unos quince minutos más porque no teníamos tiempo, así que deje que el y Tomas compartieran juntos, esperaba que esto se repitiera cada semana mientras Jhin estuviera aquí, que yo esperaba que fuera poco.
Al terminar la visita Jhin volví a romper en llanto, se despidió de nosotros con muchos besos y diciéndonos que nos amaba demasiado.
Nosotros también te amamos a ti Jhin Vernacci.
Al volver a la sala de la delegación me lleve una gran sorpresa al ver a Lili en compañía de su abogado.
-Hola Lana, veo que ahora el asesino disfruta d ellos beneficios de tener una familia, si Jonás estuviera vivo de seguro también tendría una conmigo. Dice Lili mirándome con odio.
-No me hables así delante de mi hijo por favor. Le dije devolviéndole la misma mirada de odio.
-Vas ver como pongo a tu jovencito tras las rejas por toda su vida, el me arrebato al hombre de mi vida por tu culpa, así que tu mereces sufrir como yo, vivir sin el amor de tu vida a tu lado.
-No me amenaces, tu no eres quien decide y Jhin va a estar libre porque el es inocente eso es lo único seguro-
- ¿y tu como lo sabes?, acaso lo conoces lo suficiente para confiar en el- dice Lili mirándome con sus ojos de arpía.
-Claro que lo conozco y estoy segura de que el es inocente, no tengo nada mas que hablar con usted Lili, con permiso. Le dije saliendo de su vista
-Lana, ¿ya te conto que después de que salieron de tu casa el puso su auto frente al de Jonás? ¿Que en medio de la carretera tuvieron una discusión?, me grito fuertemente
- ¿De que estas hablando Lili? No entiendo, de donde sacas eso- le dije volteándola a mirar nuevamente.
-Ay querida aun no sabes todos los detalles de la muerte de Jonás, solamente sabemos que Jhin es culpable. - Dice Lili en un tono burlón y de satisfacción al ver mi rostro de sorpresa.
En mis pensamientos solo rondaba la idea de que Jhin me estaba mintiendo y ocultando detalles acerca de esa noche, una nube se posó en mi cabeza, pero no quería que esa mujer me viera llorar, así que delante de ella no me quebré.
-Lo que tengas que decir díselo a nuestro abogado, no tengo más que hablar- Le dije y la deje ahí brotando su veneno.
Busque con la mirada a Susan y allí estaba enganchada en el escritorio de su ahora investigador favorito, yo llevaba Tomas en brazos, pero sentía que me temblaban y lo podría dejar caer.
-Nos vamos Susan no tenemos nada más que hacer aquí. - Le dije entregándole a Tomas
-Pero ma, que paso, estas pálida, cálmate- Dice Susan recibiendo a Tomas, voltea a mirar a Reggins, le hace una señal de despido y sigue mis pasos.
-Mira no preguntes, toma las llaves del auto porque no creo que pueda conducir en este estado, ya hablaremos de eso luego.
Mientras Susan conducía no dejaba de pensar, por fortuna Tomas se durmió del cansancio así que tuve un poco de tiempo mientras llegábamos a casa para pensar.
-Mama que paso necesito que me digas porque estas así- dice Susan algo confundida
-Hija, Jhin me ha estado mintiendo y omitiendo detalles de la noche del homicidio de Jonás, ese día él lo persiguió y se vieron en la carretera
-Como así no entiendo se vieron y ¿qué? ¿Le hizo algo, lo lastimo?
-No lo sé hija, solo se de ese encuentro, pero Jhin nunca me dijo que habían hablado luego de la fiesta, ahora estoy confundida, yo estaba segura de que Jhin era inocente pero ahora no sé qué pensar.
-Mama tu solo sabes que se encontraron, pero no hay certeza de que le hizo algo en ese momento ¿o sí? Pregunta Susan sin dejar de mirar hacia al frente mientras conduce
-No se hija, eso solo me lo dijo Lili, esa mujer me saca de casillas, quisiera romperle los dientes cada vez que la veo, es tan provocadora.
-Mama, todo tiene una explicación debes hablar primero con Jhin, el debe decirte todo como es.
-Pero es que me está ocultando cosas, me oculto que sus padres ahora habían contratado otro abogado y estaban ayudándole en la cárcel, cuando antes decía que había renunciado a ellos. Es que me confunde.
-Mama, se cómo te sientes, voy a tratar de averiguar todos los detalles con Reggins, exactamente que hay en contra de Jhin, sabemos lo que nuestro abogado nos comunica, pero no sabemos que tiene la otra parte, mama yo creo que el abogado que contrataste solo esta cogiendo tu dinero, porque no veo que este haciendo nada por salvar a Jhin ya lleva meses en la delegación y no veo que avance el proceso- Dice Susan con seguridad.
-En eso tienes razón, mañana mismo hablare con él y con nuevo abogado, necesito ponerme al pendiente, solo me he dedicado a visitar a Jhin y he descuidado el proceso y por lo visto Lili considera que lo tiene mas que ganado, ahora me hizo dudar nuevamente de Jhin.
-Mama, yo conozco a Jhin desde que éramos unos niños, el tuvo sus problemas de personalidad, pero es que la mujer con la que los tuvo era una musaraña enredadora, y lo hizo sufrir, pero él no es capaz de matar una mosca
-La gente cambia hija, dije mirando por la ventana.
-Lo se mama, pero Jhin no es de esos y yo te voy a ayudar- Dijo aparcando el carro frente a nuestra casa.
-Hija ya has hecho suficiente por mí. Le di un beso en la mejilla y me bajé del auto con mi bebe en brazos, por ahora solo quería descansar, había sido un largo día.