Todas las miradas se dirigieron hacia ella, Sheryl pensó que la habían atrapado de nuevo. Rápidamente se puso seria y examinó la pregunta en la pizarra, por su parte Julia se regocijó desde un lado. Dudó que pudiera resolver este tipo de pregunta difícil, ya que sería muy extraño.
Inesperadamente, al segundo siguiente, Sheryl respondió la pregunta de forma ordenada analizándola por completo. Además, cada oración que dijo fue un punto clave para resolver el problema, y no hubo en absoluto detalles innecesarios. Toda la clase se sorprendió cuando vieron tal actuación, pensando: ¡Dios! ¿Es la hija de la familia rica que era ignorante e incompetente?
Incluso alguien con mejores resultados no era capaz de resolverlos, después de todo, esta difícil pregunta era una combinación de funciones y cálculo. ¿Cómo respondió fácilmente? ¿Acaso habían escuchado mal? En este momento, Sheryl se alegró en secreto, por casualidades de la vida fue Nancy quien le dio ese punto clave. Junto con el hecho de que Frederick también le había explicado detenidamente, y esta pregunta coincidía con los temas de ayer; por lo que fue pura suerte lo que le permitió responderla.
El profesor frente a ella también estaba muy sorprendido, ya que en un principio la vio distraída y estaba esperando sermonearla. Sin embargo no esperaba que su respuesta fuera tan perfecta que no pudiera encontrar ningún error incluso si quisiera, entonces no tuvo más remedio que animarla: “No está nada mal, has estado trabajando duro recientemente. ¡Sigue esforzándote!”
Se sentó y se acarició el pecho, sintiéndose aliviada de que la suerte estuviera con ella. Por otro lado, Julia estaba disgustada, no entendía lo que pasaba ¡Simplemente no podía creer que realmente respondió tal pregunta! Consecuentemente, después de la clase, corrió hacía ella para preguntarle: “Sheryl, ¿Cómo supiste la respuesta de esa pregunta? ¡Fue sorprendente!”
Ella reflexionó al ver tal actitud ¿No era nada más que una simple pregunta? ¿Acaso Julia ya estaba celosa? ¡Debía ser una broma! Entonces, fingió ser afortunada y respondió: “No fue nada, simplemente tuve suerte esta vez. Después de que Nancy me prestó sus notas, resultó que tenía el análisis clave de cálculo, así que lo copié. ¡Quién se imaginaría que el profesor justo me hiciera esa pregunta!”
Después de hablar, incluso se dio unas palmaditas al pecho para que su acto se vea más realista y señaló: “Es bueno que la suerte estuviera de mi lado. ¡Si no habría tenido una muerte miserable! ¿Cómo podría ser como tú? Julia, mírate, eres bonita y tus notas son Excelentes. ¡Qué envidia!”
Su rostro se llenó de celos al mirar a Julia, mientras que ella no pudo evitar enorgullecerse interiormente. Lanzó un suspiro de alivio, pues creyó que simplemente en la suerte y estuvo satisfecha con la respuesta. En ese momento, Nancy llegó al salón; desde que entró, toda la clase se quedó en silencio.
Es más, era como si estuvieran esquivando serpientes y escorpiones, todos se mantuvieron alejados de ella, como si tuviera lepra. Algunos incluso la señalaron con el dedo, diciéndole:
“¡¿Cómo tiene la cara para volver?!”
“Así es. ¡Si este tipo de mujer se queda en nuestra clase, solo arruinará nuestra reputación!”
“Manténgase alejado de ella, si nos acercamos demasiado es posible que otros crean que somos iguales”
“Apúrate, cambiemos de asiento...”
Cuando Nancy llegó a su sitio, al ver la actitud de sus compañeros mostró una leve expresión de vergüenza y agravio en su rostro. Finalmente, levantó la mirada para ver a Sheryl y descubrió que la estaba mirando sin expresión alguna. En un instante, una enorme sensación de pérdida la envolvió y bajó la cabeza decepcionada. Ella pensó que ya no había nadie en este lugar que le creyera, ¿Verdad?
Pero en realidad, sabía que era inocente; no importa cuánto trató de explicarlo no pudo luchar contra las dudas de los demás. Dado que nadie le creyó, ¿Cómo iba siquiera a explicarlo? Incluso si lo hiciera, ¿Quién la escucharía de verdad? Pensarían que sencillamente estaba mintiendo; Sheryl, quien estaba al lado, fue testigo de todo este lío. Aunque no tenía expresión en su rostro, todavía tenía una leve sensación de simpatía en su corazón.
De cualquier modo, no tenía la intención de defenderla durante este tiempo, esto se debía a que Julia se sintiera más celosa y sería contraproducente, empeorando así las cosas. Efectivamente, cuando Julia vio que Sheryl no tenía la intención de acercarse a Nancy, se sintió aliviada; después de que terminaron las clases al mediodía, ella la invitó a comer.
A pesar de todo, Sheryl no quería estar con ella en absoluto, en consecuencia trató de rechazarla con tacto: “No puedo, voy a almorzar con Frederick al mediodía”
¿Almorzar con Frederick? Cuando escuchó esto, se sorprendió y no pudo evitar fruncir el ceño. Se preguntó si el incidente de ayer no causó ningún malentendido entre ambos. Era imposible, no se lo creyó y sonrió a propósito: “Sheryl, realmente te olvidas de mí cuando tienes a un hombre al lado. En el pasado, no podías vivir ni un segundo sin mí, pero ahora que tienes una pareja eliges abandonarme cada vez que puedes. ¿No tienes miedo de que me enoje?”
Sheryl sonrió incómodamente y la consoló: “¡Oh no! Entonces ¿Qué debo hacer?”
En el momento en que Julia escuchó su respuesta, la abrazó como una niña malcriada y le contestó: “Ya que ese es el caso, ¿Por qué no me llevas contigo? También tengo hambre, así que quiero comer algo. Si no quieres acompañarme, entonces iré contigo. ¿De acuerdo?”
Dada su personalidad, definitivamente no rechazaría la oferta; en cambio no se esperó que se negara muy avergonzada: “Esto... No sería muy conveniente”
Cuando escuchó esto, no pudo contener su ira y le recriminó: “Soy tu amiga, ¿Cuál es el inconveniente? ¡Sheryl, me he dado cuenta de que has cambiado mucho! ¿No odias estar junto a Frederick? ¡Ahora eres una persona completamente diferente!”
Por supuesto, sabía perfectamente que Julia no era tonta, si las cosas no salían como ella quería, empezaba a dudar de sí misma. Como era de esperar, no pudo contener su ira; Sheryl fingió ser inocente y dijo: “Julia, ¿Crees que quiero hacer esto? No me dieron otra opción. Sabes, mi papá me obligó a estar con Frederick y él está enfermo. No quiero causarle problemas”
Se sintió un poco más cómoda después de escuchar esas palabras, y contestó: “Así que es eso. Deberías haberlo dicho antes, te malinterpreté por completo”
Después de una breve pausa, continuó: “Pero dado que ese es el caso, ¿No es mejor que vaya contigo? En primer lugar, podríamos comer hasta saciarnos; y en segundo lugar, te ayudaría a protegerte de Frederick en caso de que él se te insinué ¿Verdad?”
Sheryl asintió con una leve sonrisa, viendo que hoy no aceptaría un no por respuesta. Aunque se sentía un poco impotente, no tuvo más remedio que aceptar: “Está bien, vayamos juntas”