— Estaban tentando al Diablo, un diablo que aún no conocían, una Loba Blanca que no conocían cuyas cualidades asesinas estaban por salir a la luz, el Alfa de los Alfas analizó a la loba por escasos segundos, pero está se había lanzado con dirección al Alfa sin preámbulos la mente de Lillith era poderosa y enlazaba fácilmente al Alfa, mientras que 3 miembros de la Hermandad habían llegado - Atajen a Rox y si la sueltan los mato - La poderosa voz de la loba hizo que los guardias recién llegados obedezcan su orden, mientras Killian ya se encontraba atendiendo a los heridos.
— Beta, tenemos muchas amenazas aún por los alrededores - Informó un guardia a Killian se notaba la preocupación en el rostro del hombre, mientras el Beta realizaba el recorrido correspondiente para asistir a los heridos y ordenar preparar una digna sepultura a los miembros de la hermandad que han muerto, pero antes de brindar cualquier orden Killian había ido en busca de Seúl, puesto que la fragancia del Alfa se sentía a escasos centímetros del territorio recientemente conquistado, al mismo tiempo que los pasos del Beta avanzan Fran Depolo también se encontraba transitando y resguardando su presencia por detrás de los árboles, pero la mirada del Beta ya lo había encontrado.
— La cobardía recorre por las venas de los descendientes Depolo - Killian en un abrir y cerrar de ojos se había colocado a espaldas de Fran.

— ¿Quién eres tú? - Preguntó el antiguo Alfa de la manada recientemente consumada por los Desterrados, acostándose al encontrarse con la imponente presencia asesina e intimidante de Killian Vankfort.
— No estás a la altura de saber quién soy - El Beta había dado 1 paso más con dirección al hombre - Lo único que tienes que saber es que tus hijos también son los míos y no estoy hablando de sangre, estoy hablando de que ambos pueden acabar en mis garras al igual que el padre - con aquellas palabras Killian se alejó, pero 10 desterrados más había hecho acto de presencia, eran los mismos guardias que habían sido condenados con Killian - Quiero que todos los guardias de Rosas de Luna incluyendo al Alfa estén en presencia mía en la casa de la manada de la extinguida manada Rosas de Luna en menos de 20 minutos.
— ¿Piensas que mi hijo va a dejarte quedarte con su manada? - Preguntó Fran.
— No estoy hablando con mis esclavos, estoy hablando con los guardias y lleven al veterano en alguna de las celdas que supongo que tiene la manada - la voz de Killian estaba combinada con la de su lobo y los guardias habían obedecido las órdenes es del Beta, Fran que había hecho el intento de alejarse fue atrapado de manera inmediata nuevamente, ninguno sabía los verdaderos planes que tenía Killian Vankfort ni siquiera que tanto podría cambiar, puesto que todo indicaba que el Beta no pensaba volver a someterse bajo las órdenes de Saúl Depolo.
— Mientras tanto, Saúl, que había salido escasos centímetros de su casa, había tomado la decisión de volver nuevamente a entrar y aquello había dejado en total Oscuridad al Alfa, puesto que él estaba muy ajeno a las decisiones que Killian estaba tomando, mucho menos se estaba dando cuenta que el Territorio de la Hermandad podría sufrir una transición aquello podría dejarlo sin el Territorio de la Hermandad La Manada mucho menos sabía que el Alfa de los Alfas estaba tentando a la muerte al desafiar a una Loba Blanca.
— Mientras que Rox se encontraba sostenida por los guardias, entre tanto Lillith y el Lobo del Alfa estaban frente a frente, ambos tenían una pequeña Línea que demostraba que al cruzarlas los Lobos estarán en Guerra, una Guerra de dos que no lastima a los que habitan en sus alrededores solamente ellos tenían el objetivo de eliminarse.

— Lillith se había impulsado hacia el cuerpo del lobo Alfa, que había reaccionado con otro salto colisionando en contra del cuerpo de la Loba Blanca ambos tenían la mentalidad de matarse o por lo menos Lillith la tenía - No pongas resistencia voy a destruir cada milímetro de tu pelaje blanco voy a quitártela y voy a dejarte a mi merced - murmuró el Alfa, pero aquello solamente había enfurecido a la Loba Blanca que rugió y con las garras filosas y venenosas con la que contaba Lillith había provocado un pequeño corte en el abdomen del Alfa, Lillith había realizado un movimiento sorpresivo quedando por debajo del cuero del oponente, pero aquello fue para que en un impulso más salvaje la loba desterrada con todas las fuerzas logró que su cabeza y sus colmillos alcancen la piel del Alfa arrancandoa un pedazo de piel del Alfa, ambos habían caído, para la loba Blanca la sangre del Alfa se sentía asquerosa ya su pelaje tenía pequeñas manchas de sangre, el pequeño pedazo de piel arrancada por Lillith fue tirado al suelo ya con su hocico manchado con la asquerosa sangre del Alfa.
— El lobo había gruñido retomando la compostura de manera inmediata enfurecido por la acción de Lillith volvió a enfocar a la loba con Fuego en la mirada y se había lanzado atacando a la loba, esta vez la rabia del Alfa ya era más perceptible, pero no podía decirse que la fuerza del hombre era mayor que de la Loba, porque Lillith tenía lo suyo, pero el Alfa había arremetido con fuerza por el cuerpo de la loba logrando que Lillith fuera empujada brutalmente aquello había sido raro la loba ante aquel ataque no había realizado el intento de defenderse razón por la cual el Alfa la había desestabilizado, el lobo pensaba que Lillith empezaría a ceder, pero la oscuridad sin importar que la loba era de pelaje Blanca la había acogido y lo único visible era su intensa mirada roja - Mañana todo tu congreso se postrara a mis pies y tu sangre será derramado por el suelo convirtiéndola en una zona maldita como tu miserable vida que acabara está noche - La voz de Lillith era poderosa y la seguridad en ella hizo que el Lobo a través del enlace gruñera al sentir aquella amenaza.