Capítulo 34
1064palabras
2023-04-24 22:59

Mateo, después de reunirse con Viviana, se fue a la casa de sus padres y ellos también estaban hablando sobre ese tema, luego vio que su esposa lo estaba llamando, él de inmediato se levantó y le respondió.
Cristal, que en ese momento estaba muy enojada con este, ya que ya habían hablado del tema y lo único que ella le había pedido, era que no la fuese a engañar como su padre una vez lo hizo con su madre, ella apenas vio que este le contestó lo primero que le preguntó fue, ¿dónde estás?

Mateo se sorprendió un poco por la forma que ella le habló, pero no le dio mucha importancia, ya que ahí mismo le respondió, estoy en la casa de mis padres y estaba a punto de preguntarle ¿por qué?, cuando solo escuchó el pitido del otro lado de la línea que ella, ya le había colgado sin decirle nada más.
Mateo solo miraba la pantalla de su teléfono sin saber qué le pasaba, pero le sintió la voz un poco enojada. Él, que sabía que en ese pueblo eran muy comunicativos, estaba pensando que quizás alguien lo había visto en aquel restaurante con Viviana, y alguien ya le había ido con el chisme a su esposa.
En ese momento se percató de que no había sido una buena idea irse sin decirle a su pareja que se iba a reunir con Viviana, pero luego lo negó en su mente, pues había escogido aquel lugar precisamente porque estaba muy alejado del pueblo y las personas que llegaban allí eran, en su gran mayoría, viajeros que solo se detenían a comer algo.
Mateo, después de colgarle a Cristal, se despidió de sus padres y de su abuelo, para volver donde estaba su esposa. Pero cuando llegó se dio cuenta de que todas sus cosas que había pasado después de su matrimonio a la casa de Cristal, la llevaban a otra habitación.
Él, se quedó viendo como las sirvientas trasladaban todas sus cosas a otra habitación, en un principio pensó que quizás se moverían a otro cuarto, pero luego se dijo, que eso era imposible, ya que su esposa le había dicho que le gustaba mucho su habitación, y para estar seguro de que no era solo sus cosas entró a verificar, y era como había pensado antes, solo sus pertenencias estaban siendo trasladada.
Así que él de inmediato se fue en busca de su esposa, para que le explicara qué era lo que estaba pasando.

Cuando la encontró, ella estaba en el estudio con don Gerardo, y dos señores más, los cuales eran los abogados de la familia, a Mateo que solo le interesaba hablar con su mujer en ese momento, así que solo saludo y luego volteo su mirada para verla y vio la mirada llena de odio que le dio, que hasta se la había olvidado, cuál era el motivo, por la que la estaba buscando.
Después de que recordó porque la estaba buscando, se acercó a ella y le preguntó al oído ¿por qué están trasladando mis cosas a otra habitación?
Cristal en ese momento se levantó y le dijo a su abuelo que siguieran con lo que estaban, que ella necesitaba hablar algo importante con su esposo, y de inmediato salió del estudio seguido por este.
Cuando ya estaban afuera, ella lo llevó hasta el balcón y le preguntó ¿todavía no sabes que hiciste mal?

Mateo, por más que lo pensó, no llegó al motivo, así que le respondió, no lo sé.
Cristal solo sacó su teléfono del bolsillo y le mostró las fotografía de él besándose con Viviana, que le habían enviado anónimamente, mientras le decía; lo único que te pedí, cuando hablamos y nos pusimos de acuerdo a llevar un matrimonio real, como lo hacen las parejas que se casan enamoradas, era que no me fueras a engañar nunca, y fue lo primero que hiciste.
Luego le dijo, todavía no ha pasado ni un mes desde que nos casamos y ya te estás besando con otra mujer, y vaya a saber qué más hicieron, sabes qué fue lo peor que hice, fue creer en ti, cuando me confesaste que te gustaba de verdad y que lo tuyo con Viviana, ya había terminado en el momento que decidiste casarte conmigo, que gran mentiroso eres.
Mateo, que seguía mirando aquellas fotos, ya que no sabía quién le había enviado esas imágenes a su esposa y estaba pensando, cuál era la intención de aquella persona al enviar esas fotos a su mujer, no le contestó nada, hasta que vio que ella se estaba dando la vuelta para irse.
Él de inmediato le cogió del brazo y la detuvo para que no se fuera, hasta que le explicara qué era lo que en realidad había pasado.
Mateo comenzó a explicarle todo, desde que llamó a Viviana para que se reunieran, hasta el beso que le dio está, sin su consentimiento, y Además le explicó el motivo por el cual quiso reunirse con Viviana, al ver que ella no le estaba creyendo nada de lo que le decía, la abrazó fuerte, mientras le decía al oído, te juro que desde que llevamos de casado no he pensado en nadie más que en ti.
Después de separarse de ella le dijo, tranquila que voy a demostrarte que lo que te digo es la verdad y también te mostraré que lo que siento por ti, es real y nunca lo he sentido con nadie más.
Luego le dio un pequeño beso para irse a buscar las pruebas que necesitaba y convencer a su esposa que no había pasado nada entre él y Viviana.
Lo primero que hizo fue ir al restaurante, para ver si le podían dar una copia del video de seguridad, ya después de haber conseguido el video, llamó a Viviana y le comentó que alguien les había tomado unas fotografías de ellos, las cuales le enviaron a su esposa.
Viviana al escuchar estas palabras solo dio una gran sonrisa, para luego preguntar ¿y qué dijo tu esposa?
Mateo no le quiso decir nada más sobre aquel tema, luego le comentó, solo te estoy llamando, para que no me espere como te lo había prometido, ya que en este poco tiempo que he pasado casado, me enamore de mi esposa y nunca la dejaré, ni por ti, ni por nadie.