POV JONH
Ya no nos quedaba tiempo y lo sabía, necesitaba encontrar el hechizo para poder volver al pasado, pero para eso tenía que encontrar a quién canalizar, mi magia no era suficiente y sabía que si yo lo intentaba en mi estado actual podría hasta morir, sin embargo, el canalizar a alguien con poder me ayudaría a hacer lo que quiero y salir ileso o por lo menos eso es lo que creía.
-La única con magia suficiente es la abuela- Me dice Alex, habíamos decidido venir a la casa de los Stone para hablar con tranquilidad en el despacho de mi amigo- Pero se debilitó en el ataque del internado.

-Lo sé- Contesto masajeándome la sien- La única que queda es mi madre y tu hermana, a mi madre no la puedo usar por obvias razones y a Lilith tampoco porque ella no controla su magia como para que la pueda usar yo.
-La podemos dormir- Me dice mi amigo y yo lo quedo mirando de mala gana- No estoy diciendo que no se lo vamos a decir, yo estoy hablando de que utilicemos su magia mientras esté dormida, pero que obviamente se lo digamos.
Ruedo los ojos, sé que él no quiere hablar de este tema con su hijo y mucho menos con la mía, por lo menos hasta que no sepamos bien que es lo que va a pasar y por eso es mi desconfianza hacia él.
-Dominic- Le hablo mirándolo a los ojos- Te conozco, sé cuáles son tus intenciones con respecto a nuestros hijos, y si no fuera por lo que está por pasar jamás estaría en contra tuya y lo sabes, pero se volvió una urgencia el que hablemos con la verdad con nuestros hijos.
-Mi verdad a comparación de la tuya no es tan grave- Me recuerda enojado- ¿Cómo mierda le explico a Samantha, a Sasha y a Emmet la maldita verdad? Cuando Samantha perdió la memoria suspire aliviado pensando que jamás se enteraría de la verdad, pero acá estamos, dieciocho años después, con ganas de seguir como hasta ahora, pero una maldita profecía amenaza nuestras vidas una vez más y yo tengo que decir la verdad de algo que hice solo porque era mi maldito deber.
- ¿Es verdad? - Pregunta una vos de mujer abriendo la puerta- Pensé que me estaba volviendo loca cuando los recuerdos empezaron a venir en mi cabeza y resulta que es realmente verdad.

Dominic y yo nos quedamos helados mirando a Samantha, hubiera querido no estar presente cuando ella se enterará de la verdad, sin embargo, acá estaba sin poder decir nada y también sin querer decir nada por qué sabía que la iba a herir.
-Jonh di algo- Ella me suplica con la mirada- Di que todo lo que está ahora en mi mente no es verdad, dime que Sasha y Emmet si son mis hijos.
No logro articular ninguna palabra, no podía mentirle, no de nuevo.
Dominic trata de acercarse a Samantha y ella se aleja.

-No lo hicimos apropósito- Le dice él a Samantha- Las cosas sucedieron así, tú habías desaparecido y yo tenía una compañera a la que tenía que convertir en mi Luna y así lo hice, ella quedó embarazada, pero nadie lo supo porque cuando me lo iba a decir ella fue secuestrada, meses después apareciste tú con dos bebes en tu brazo y supe que ellos eran míos, tú no recordabas nada, la única que pudo decirnos lo que te había pasado era Isabella que te había rescatado gracias a Leía.
-Pudiste decirme la verdad- Lo acusa ella- Ambos pudieron hacerlo y decidieron mentirme, decidieron hacer pasar a los niños como míos
-Tía- Habla Alex acercándose a ella y abrazándola- Ellos hicieron esto para proteger a Sasha y a Emmet, sabes que mi madre no te hubiese mentido si no fuera en verdad necesaria.
Las palabras de mi hijo apaciguaron un poco la ira de Samantha, ella siempre había tenido una debilidad por mi hijo mayor, supongo que era por el simple hecho que era el que más se parecía a Isabella de mis tres hijos, ni siquiera Lilith se parecía tanto a la madre como se parecía Alex y eso me hizo acordar lo que decía mi tío “El primer hijo siempre se parece a la madre y la primera hija al padre” y tenía razón, Lilith se parecía más a mí y a mi madre, aunque a esta última solo esperaba que se pareciera solo en el físico y que no heredara sus ideales estúpidos.
-Cuando desapareciste Isabella y Leía hicieron de todo para encontrarte- Le dije recordando lo que había pasado en ese entonces, Isabella casi muere intentándolo, pero nada resultaba, después vino el embarazo de Leía y el cese de su poder, sin embargo, como lo dijo Dominic Leila desapareció antes de que pudiera decirle a alguien sobre su embarazo y lo supimos recién cuando apareciste un año y medio después, Isabella había quedado embarazada de Lilith y Deimon y no sé, el cómo o por qué pudo recibir una señal de Leía y supo dónde estaban, así fue como Isabella pudo rescatarte y a los bebes contigo.
-Desde que murió Isabella estuve teniendo sueños, una mujer gritando, los llantos de unos bebes y después la oscuridad terrible que había en el lugar, no era una oscuridad normal, era una oscuridad pesada- Habla ella cerrando los ojos- Escuche el grito de Isabella diciendo acá estoy, pero no me lo decía a mí, se lo decía a la otra chica.
- ¿Te acuerdas del día que desapareciste?
-No- Niega- Solo recuerdo la discusión que tuvimos, porque tú querías dejar todo y que nos fuéramos, no querías aceptar que yo no era tu Luna.
-Eso pasó dos días antes de que desaparecieras- Digo pensativo- Después fuiste al instituto a informar que no darías más clases y luego de ese día nadie te vio más.
Los cuatro nos quedamos pensando, habíamos dejado el tema de la desaparición de Samantha y Leía mucho tiempo sin resolver y tenía la leve sospecha de que lo que había pasado con ellas también tenía algo que ver con lo que estaba por pasar con mi hija y sus amigos.