Capítulo 60
1328palabras
2022-08-25 00:00
"Pero, ¿por qué sigues tan enredada con Quentin? ¿No se han divorciado ya?".
Evidentemente, ella no entendía por qué estada dispuesta a quedarse con él. ¡Aquella era una mala decisión!
"Eleonora, me deberás otro gran favor, ¿entendiste? Si no me das una explicación razonable cuando regreses, ¡tendrás que atenerte a las consecuencias!".
Al escuchar la advertencia de su amiga, ella colgó el teléfono y la llamada concluyó para ambas.
Sin embargo, el teléfono de Anna volvió a sonar de inmediato, por lo que ella contestó sin pensarlo dos veces y preguntó; "Eleonora, ¿hay algo más que no me hayas explicado?".
"¡Ana, soy yo! Yvonne".
La mujer, completamente sorprendida y pasmada, respondió; "Oh, eres tú. ¿Qué pasa?".
"¿Cómo has sacado a Jason? Por tu culpa, ahora toda la familia Lance está hecha un desastre; ¡hasta casi llaman a la policía!", dijo Yvonne con una actitud no tan buena.
"¿Qué quieres decir con eso? Jason me siguió hasta aquí voluntariamente. Hablas de mí como si fuera una secuestradora atroz, cuando claramente es la familia Lance quien tiene el poder de secuestrar a gente inocente", exclamó Anna con ira.
Al oírla, la chica se quedó atónita. Por lo tanto, se detuvo en la entrada del aeropuerto y encontró un lugar con menos personas.
Al parecer, aquellas palabras significaban algo más. ¿Acaso Anna también sabía que Eleonora y Quentin se habían ido juntos al Reino Unido? Si no, ¿qué razón tendría para decir aquello?
Claramente, ella quería preguntarle a qué se refería pero, teniendo en cuenta que acababa de tomar el puesto de prometida del gran Quentin Lance, tenía miedo de que la respuesta la hiciera quedar mal, así que prefirió no preguntar.
"Anna, no estoy molesta contigo, ¿de acuerdo? Pero justo ahora, la madre de Jason, la Sra. Yu, llamó y casi se vuelve loca. Me ha contado lo que ha sucedido hoy en la mansión Lance y claro, no hace falta decir que supuse de inmediato que se trataba de ti. Oye, ese hombre es su tesoro, así que espero que no le hagas daño y lo envíes a casa en seguida. Yo los convenceré para que deje este asunto de lado", dijo Yvonne con el ceño fruncido y con un tono de voz impaciente, lo cual hizo que la mujer se pusiera de mal humor.
"Yvonne, ¿qué quieres decir? ¿A qué te refieres con convencer a los Lance de que dejen este asunto a un lado? ¿Qué crees que hice mal? Te acabo de decir que Jason insistió en ir conmigo, ¿o es que no me has escuchado? No pude mantenerlo alejado de mí, es todo lo que pasó. Hoy, él casi destruye mi coche. Además, perdí dinero y tuve que pagar por su comida. Me he convertido en su tonta. ¡Por Dios!¿Qué me pasa?", dijo agraviada y resentida.
"Anna, no estoy de humor y no tengo tiempo para enojarme contigo. ¡Solo dime dónde están tú y Jason, y le pediré a la familia Lance que lo recoja! En cuanto a tus gastos, ellos te pagarán el doble".
"Eso suena bien. Bueno, ayúdame con este molesto problema. Ahora estoy en el Gold Leopard Restaurant, en la calle comercial de la ciudad!", concluyó Anna enojada para luego colgar el teléfono.
Cuando volvió a su asiento, vio que Jason seguía inmerso en varios manjares.
"¿Que no eras un joven millonario? ¿Acaso no has visto comida antes?", le dijo malhumorada.
"Hermana, ¿qué pasa? El helado aquí es realmente delicioso. Es Haagen-Dazs. ¡Pruébalo!". Jason, que no se dio cuenta del mal humor de la chica, llevó una cucharada de helado a su boca.
Sin embargo, como ella estaba un poco enojada, apartó la cuchara con desgana y esta cayó al suelo junto al helado.
El chico se quedó inmóvil, sorprendido por la repentina acción de la joven, y su par de ojos tan claros como el agua la miraron con lástima.
"Yo solo quise que probaras. ¿Qué te pasa?".
Al notar su inocencia, el corazón de Anna se ablandó y su actitud se suavizó. Claramente, el inocente chico no merecía su ira.
"Jason, ¿qué quieres comer? Por favor, ¡date prisa y cómelo! Ya hay que ir a casa antes de que se haga más tarde".
"Hermana, tú también deberías comer. Has estado hablando por teléfono todo el tiempo y no has comido casi nada".
Aunque el joven fue atento, ella no tenía ganas de comer en absoluto.
Casi media hora después, se escuchó una conmoción desde afuera del restaurante.
Entonces, un grupo muy numeroso de personas de la familia Lance apareció en el restaurante.
En ese momento, Anna se dio la vuelta y vio a una hermosa y glamurosa mujer de mediana edad, quien iba vestida con ropa decente de famosas, lujosas y preciosas marcas, así que todos pensaron que debía ser la madre de Jason, la segunda esposa de Wilson.
Junto a ella, estaba la anciana ama de llaves que vio esta mañana y dos mujeres más, que parecían ser las niñeras. Además, había dos hombres fuertes vistiendo camisetas negras ajustadas, luciendo como instructores fitness o una especie de guardaespaldas.
¡Todos ellos se veían demasiado bien!
Las personas que estaban cenando en el restaurante se agruparon de inmediato para observar lo que sucedía.
"Mamá, ¿qué haces aquí?". Jason, que estaba comiendo y bebiendo hace un momento, vio a su madre y se asustó tanto que la cuchara se le cayó al suelo.
La hermosa mujer corrió de repente hacia él y lo abrazó con fuerza. "Jason, me asustaste. Pensé que esos malvados te habían llevado. Gracias a Dios tu cuñada se enteró que estabas aquí y me lo dijo, de lo contrario, habría llamado a la policía", dijo mientras lloraba y lo miraba detenidamente para observar si estaba lastimado.
Su comportamiento exagerado solo hizo que Anna, que estaba parada a su lado, se sintiera avergonzada, ya que la gente que estaba allí comenzó a cotillear sobre ellos.
"Señora, no soy una mala persona ni tengo malas intenciones. Si yo fui a la familia Lance esta mañana, fue porque quería preguntar sobre el paradero de Eleonora y saber por qué su joven amo se llevó a mi amiga. Sin embargo, cuando me retiré, el joven Jason me siguió por accidente. Yo no quise llevármelo", explicó Anna.
Cuando la hermosa mujer se dio la vuelta, sus hermosos ojos perdieron la dulzura con la que miraba a su hijo, y en su lugar, solo se podía notar el desdén y la insatisfacción en ellos.
"¿Tú eres esa tal Anna? ¿La amiga de Eleonora?".
"Sí, soy yo".
"Mmm... Déjame decirte algo. Eleonora no tiene nada que ver con nuestra familia Lance, así que creo que es inapropiado que vengas a buscarla a nuestra casa. Hacer eso solo hará que Yvonne tenga problemas innecesarios con Quentin, recuerda que ellos acaban de comprometerse".
"Señora, sea un malentendido o no, usted puede preguntarle a su joven amo. Por otro lado, ya le dije que el joven Jason salió conmigo por accidente. ¡Ahora que están aquí con él, me voy! No quiero hablar más con usted". Anna odiaba a los ricos que eran agresivos; y como la mujer que tenía en frente estaba llena de desdén y odio, ella solo sentía mucho disgusto.
"Mamá, ella no es una mala persona, ¡de verdad que no! Yo soy el que cometió un gran error hoy. He dañado su auto, y le he pedido que me invitara una gran comida. Mamá, ella es como mi hermana Eleonora, ¡es una buena persona!", comentó el joven rápidamente para ayudarla.
Al oírlo, la hermosa mujer sacó un cheque de su bolso de cuero de edición limitada y se lo entregó a Anna con desdén. "Bueno, ya que mi hijo ha dañado tu auto y le has invitado una 'gran comida', ¡estos 500 mil dólares son suficientes para que puedas comprar un auto nuevo! Después de todo, la gente como tú necesita dinero, ¿no?". De forma deliberada, ella enfatizó las palabras "gran comida" para hacerla sentir mal.