Capítulo 58
1237palabras
2022-08-23 16:30
"¿Qué? ¿Lo saben? ¿Para qué les dijiste? Creo que estás haciendo que se preocupen intencionalmente". Eleonora estaba un poco ansiosa. Conocía bien las personalidades de Henric y Anna. Si supieran que ella estaba con Quentin, podrían angustiarse y llamar a la policía.
Quentin sonrió con frialdad y le arrojó su teléfono celular a Eleonora. "Puedes llamar a Henric y decirle que no necesita venir al Reino Unido. ¡No podrá alejarte de mí! En el pasado, no podía. ¡Ahora sigue siendo lo mismo!". Los ojos de Quentin estaban llenos de agresividad.
Después de eso, tomó el enjuague bucal de la mesa e hizo gárgaras. Luego se limpió la boca con una servilleta y se levantó para irse.
Eleonora tomó el teléfono móvil, aun se sentía el calor de las manos de Quentin.
Pensó en marcar, pero no sabía qué decirle a Anna.
Estaba desesperada por marcarle, sin embargo, tenía mucho miedo de que sus amigos armaran un escándalo.
En ese mismo momento, en Ciudad A, Jason y Anna seguían afuera de la mansión Lance.
Anna que estaba escurriendo de sudor. Jason señaló el sol sobre sus cabezas y le dijo: "Hermana, hace mucho calor. No creo que mi hermano esté escondiendo a Eleonora aquí.
Anna miró a Jason y le preguntó: "¿Qué quieres decir con eso?".
"¡Que tengo hambre! Hermana, ¿por qué no me invitas a cenar?"
Anna contestó con tono dramático: "¿Pero, por qué yo otra vez?".
Jason dijo con confianza: "¡Porque no tengo dinero!". Sus ojos claros parecían derramar chorros de agua dulce.
Cuando la gente miraba ojos tan lindos como esos, simplemente no podían negarse.
"Jason, yo creo que ya es hora de que te vayas a tu casa. Es muy probable que tu familia esté buscándote. Oh, si llaman a la policía y dicen que el joven maestro de la familia Lance ha sido secuestrado, no podría soportarlo!". Anna recordó la desesperación del ama de llaves que corría histérica detrás de Jason antes de que salieran.
Ahora, la familia Lance debía estar vuelta un lío.
"Hermana, está bien. Pero vayamos a cenar primero, ¿de acuerdo? Después podría darte mucho dinero".
Anna puso los ojos en blanco y le dijo en tono burlón: "Claro, me comprarás un auto nuevo y me darás el doble del dinero que pague por la cena".
Jason se encogió de hombros con indiferencia. "¡De todos modos, sé que a mi familia le sobra el dinero!".
¿Por qué insistía tanto con el tema del dinero? Anna sabía que algo en su cerebro no funcionaba bien, pero por momentos le daban ganas de darle un zape.
"Está bien, está bien, ¿qué quieres comer? Somos tan desafortunados que ni siquiera tenemos mi auto. ¿Pedimos un taxi?".
'Tenemos muy mala suerte hoy', pensó Anna con tristeza.
Había planeado ir a la casa de familia Lance para armar un lío y hacerles saber que Quentin se había llevado a Eleonora. Pero no esperaba que fallara en hacerlo y terminara cargando con Jason a rastras, como si lo tuviera pegado. El muchacho ocasionó que ella perdiera mucho, incluyendo su auto.
Al pensar en el dinero, Anna otra vez se sintió angustiada.
Aunque este tonto jovencito le había prometido devolverle la plata, estaba preocupada porque, después de todo, no era tan inteligente. ¿Podría recordarlo?
'Olvídalo, olvídalo, nunca discutas con un tonto. Lo tomaré como una donación', Anna pensó indignada para sí misma.
Tenía la palabra infelicidad escrita en todo su rostro.
Jason percibió que Anna estaba completamente infeliz. Extendió la mano y tocó su cara. "Hermana, no tuerzas la cara. ¡Te ves muy guapa cuando sonríes!".
Jason la tocó de forma tan inesperada que Anna se quedó atónita. Reaccionó y rápidamente apartó su mano. En ese momento, Anna descubrió que su rostro estaba ardiendo.
La sonrisa del muchacho era pura y dulce, siempre sorprendía a la gente. "Hermana, ¿por qué estás tan sonrojada?".
¿Qué significaba eso?
Él era un hombre y le había tocado la cara. ¿Cómo podría no sonrojarse?
Oh, ella olvidó que él era un tonto; claramente entendió que se trataba de una persona con retraso mental.
Anna tuvo que repetírselo varias veces para controlar las emociones en su corazón.
Anna paró un taxi en el camino y los dos se subieron.
Le dijo al conductor: "Llévenos al centro por favor".
"Jason, ¿ya pensaste qué quieres comer?".
"¡Hermana, quiero que tengamos una gran comida!".
Anna tocó su billetera arrugada y dijo como si fuera una sirvienta mala: "No me alcanza para invitarte a una gran comida. ¿Por qué no vamos a un buffet?".
"Eso hermana, un buffet sería ideal. ¿Tienen helado?".
La joven puso de nuevo los ojos en blanco, le contestó un poco fastidiada: "Sí, tienen helado...".
Mientras hablaban, Jason vio que un Porsche rojo pasó justo a su lado.
Jason se dio unas palmaditas en el pecho y dijo: "¡Eso es tan peligroso!".
Vio que era el coche de su madre. Parecía que iban a la villa de su hermano para buscarlo.
Afortunadamente, ellos se acababan de ir de ahí.
Jason no disimulaba la expresión de felicidad en su rostro.
Anna levantó la vista y vio que el muchacho tenía una sonrisa extraña.
Le preguntó con un poco de vergüenza: "Jason, ¿de qué te ríes? ¡Sonríes de forma tan malvada!".
Rápidamente agitó la mano y dijo: "¡No, no!".
"¡Si es lo que estás pensando, te golpearé!". Anna levantó la mano y lo amenazó.
Jason hizo un puchero. "Hermana, eres tan enojona. Eso no pasaba con Eleonora. ¡Ella nunca se enojaba!".
Eleonora, Eleonora... Este niño estaba hablando de Eleonora otra vez.
Al pensar en ella, el corazón de Anna volvió a hundirse en la preocupación. ¡Quentin se la había llevado!
Ni siquiera podía comunicarse con ella por teléfono, sentía que las cosas no andaban bien.
Quentin la había privado del derecho a hacer una simple llamada telefónica. ¿Cómo podría estar bien?
El rostro de Anna se llenó de tristeza inmediatamente.
"¡Todo por culpa del hermano mayor de este chico!".
Anna volteó a mirar a Jason con odio.
'¿Sus familiares estarán preocupados?' pensó maliciosamente.
¡Definitivamente se lo merecía!
Anna saboreó el placer de la venganza en su corazón.
Pero de pronto volvió a sentirse culpable.
No valía la pena estar enojada con un tonto.
Anna miró a Jason, el chico venía muy sonriente a su lado.
La luz y la sombra fuera de la ventana cubrieron su perfil con una suave capa.
Qué chico tan maravilloso. Cuando estaba en silencio, parecía un ángel. Era tan lindo que cualquiera se pondría de buen humor al verlo. Lo malo es que solo era un tonto.
¡Ay, era una verdadera pena!
Anna suspiró de la emoción. En eso, el conductor dijo que ya habían llegado a la zona centro y les preguntó a qué buffet querían ir.
Anna eligió el Silver Leopard.
El conductor se encaminó hacia el restaurante.
A la chica le dolía un poco el corazón. Ya solo le quedaban unos mil yuanes. Apenas le alcanzaría para pagar esa comida.
Sin embargo, se animó al ver que el chico guapo a su lado era genial y muy responsable. Aunque era hermano del odioso Quentin.
Tan pronto como los dos se sentaron en el buffet, Jason saltó para servirse un plato enorme de comida deliciosa.
De pronto, sonó el teléfono de Anna. Era un número extraño.
Anna lo miró y supo que era una llamada de Londres, Inglaterra.
Los latidos de su corazón se aceleraron un poco.