Skye
Yo estaba en casa, Amy estaba en el trabajo y Parker estaba fuera buscando algo para almorzar. Estaba recostada en el sofá viendo el canal de crímenes. Oí un golpe en la puerta. Gruñí porque no quería molestarme en ir a contestar. Iba a ignorarlo, pero entonces hubo un segundo golpe. Quizás Parker había cerrado la puerta al salir y olvidó sus llaves.
Moví mi culo del sofá y fui a contestar. Cuando abrí la puerta, la persona del otro lado era la última que esperaba ver.

"¿Heidi?" dije, sorprendida.
¿Qué demonios estaba haciendo ella aquí? Había estado intentando hablar con Parker. Él no quería. ¿No captaba la indirecta?
"¿Parker está en casa?", preguntó ella.
"No. ¿Qué estás haciendo aquí?" dije, molesta.
"Necesito hablar con Parker. ¿Sabes cuándo volverá?", preguntó.
"No, y si lo supiera, no te lo diría", siseé.

“Lo que está pasando entre Parker y yo no tiene nada que ver contigo, Skye”, siseó de vuelta.
En realidad, perra, ¡sí tenía que ver porque él estaba conmigo ahora!
Oh, cómo deseaba poder decirle eso. Estoy segura de que eso la callaría. Sí, Parker le dijo que estaba saliendo con otra persona, pero me preguntaba cómo reaccionaría si supiera que esa persona soy yo.
"Sí tiene. Parker es mi amigo. Hermano de mí mejor amiga y tú le rompiste el corazón, Heidi”, le dije, “lo dejaste por un extraño que acababas de conocer. ¡No mereces hablar con él! Se merece algo mejor que tú" añadí.

Con cada segundo que ella estaba de pie frente a mi, más me enojaba. ¡La odiaba! Odiaba lo que le hizo a Parker.
“Sé que es más que eso. Siempre has sentido algo por Parker”, dijo, “pero debes saber una cosa, Skye, él no está interesado en ti, no tienes nada contra mí. Lo recuperaré. Puede que me odie en este momento, pero todavía me ama”, agregó.
“No, él ya no te ama”, dije con firmeza, “ahora está con otra persona y ella lo trata mejor que tú”, agregué.
“Sea quien sea, es solo un substituto”, se rio Heidi. “Él volverá a ser mío en poco tiempo, y no hay nada que puedas hacer al respecto”, agregó.
“¡Aléjate de él, Heidi! Lo hiciste pasar un infierno" dije y luego cerré la puerta en su cara.
Había tenido suficiente de ella. Y siendo honesta, todo lo que dijo sobre ser un substituto me había afectado. Sé que Parker aseguraba que no era así, pero él y Heidi estuvieron juntos mucho tiempo. La amaba profundamente. ¿Cómo podía competir yo con eso? Suspiré, volviendo al sofá y dejándome caer en él. No debía dejar que ella me afectara.
Solo esperaba que no se crucen. Deseaba poder haberle dicho que era yo quien ahora estaba con Parker. Aunque sabía que no podía. Nadie podía saber. Era más desafiante de lo que pensé que sería, mantenernos en secreto. Ojalá pudiéramos actuar como una pareja promedio. Ir a donde queramos y hacer lo que queramos.
¡Dios! Estaba perdiendo la cabeza, y todo era culpa de ella. Gruñí con frustración, pasándome los dedos por el pelo. ¡No! Tenía que detenerme. No la dejaría llegar a mí.
Volví a centrar mi atención en la televisión y esperé a que llegara Parker.
"¿Me extrañaste?" Él se rio, entrando en la sala de estar.
"¡No!" me reí.
"Eso duele, nena", hizo un puchero.
"Solo estoy jugando, bebé", sonreí.
Se acercó, agachándose para besarme antes de sentarse a mi lado. Sabía que iba a tener que decirle que apareció Heidi. Respiré profundamente, apoyando mi mano en su rodilla. Se volvió hacia mí.
“Skye, ¿qué pasa?”
Sabía que se había dado cuenta de que algo andaba mal en el momento en que me vio.
"Heidi apareció en la puerta cuando estabas fuera", le dije.
"¿Qué? ¿Por qué? Ella no tenía derecho”, dijo molesto, “¿Qué pasó?”. agregó.
Le conté todo lo que pasó y todo lo que ella dijo. No omití nada porque así es como funcionábamos. Éramos honestos el uno con el otro.
“Skye, lo siento, nena”, suspiró, “Sabes que eso no es cierto, ¿verdad? No eres una substituta" añadió, uniendo sus dedos con los míos.
“Lo sé, pero Parker, no quiero competir con ella, con lo que ustedes dos tenían”, dije honestamente, “Sé que la amabas profundamente”, agregué.
Odiaba que me estuviera acomplejando todo esto. No podía evitarlo. Había deseado a Parker durante mucho tiempo, y no pensé que alguna vez lo conseguiría. Yo creía que él se establecería con ella. Pensaba que se casarían y tendrían una familia.
“Skye, no necesitas competir con nadie”, dijo, “si todavía quisiera lo que Heidi y yo teníamos, habría vuelto con ella. No quiero eso, ni a ella. Solo te quiero a ti”, agregó.
"¿Está seguro?"  pregunté.
“Sí”, sonrió, besándome suavemente, “estoy feliz contigo, hermosa”, agregó.
“Bien porque yo también estoy feliz contigo,” sonreí yo.
Parker me sonrió brillantemente, besándome repetidamente. Me sentí mejor después de nuestra charla.
“Ahora, comamos antes de que la comida se enfríe”, dijo.
Almorzamos durante un largo rato, charlando mientras lo hacíamos.
“¿Qué te parece salir a pasar la noche del próximo sábado? Amy tiene sus propios planes, así que podríamos escabullirnos y ella nunca lo sabría”, sugirió.
"Sí, suena perfecto", dije con entusiasmo.
"Bien, planearé algo", respondió, besándome.
Me gustaba la idea, escaparnos los dos por la noche. Sería bueno alejarse de aquí, alejarse de todo. Apoyé la cabeza en su hombro y él deslizó su brazo alrededor mío.
"Lo espero con ansias", afirmó, besando la parte superior de mi cabeza.
"¡Yo también!" Dije, mirándolo.
Disfrutaba pasar mi tiempo con él. Puede que ya estuviera un poco loca por él. No tenía idea de a dónde iría esto o si duraría, pero una cosa que sí sabía era que iba a aprovecharlo al máximo.