Capítulo 9
1188palabras
2022-05-07 08:55
Skye
Estaba empezando a impacientarme con Parker. Habíamos estado en la tienda de teléfonos durante una maldita hora porque no podía decidirse. Era tan quisquilloso. Qué ridículo.
“Parker, ¿puedes apurarte? Necesito comida", gruñí.
¿Por qué accedí a ir a la tienda de teléfonos antes de ir a comer? No pensé que tardaríamos tanto.
“No tardaré mucho, lo prometo”, dijo.
“Dijiste eso hace media hora. Por favor, elige un maldito teléfono",resoplé.
“Creo que tu novia se está poniendo un poco ansiosa”, dijo el chico de la tienda.
¿Novia? ¿Yo? Sí, ya lo quisiera. Esperaba que lo corrigiera, pero Parker solo se rio y asintió. Sonreí un poco, aunque solo fuese fingiendo.
“Solo necesito probar la cámara, y luego debería estar listo”, dijo Parker.
"Sí, sí", dije, poniendo los ojos en blanco.
"Aww, vamos, nena, no es necesario que pongas los ojos en blanco", sonrió con complicidad.
¿Nena? ¿Por qué me llama así? Supongo que está jugando con lo que piensa el asistente. Me reí y negué con la cabeza. Volvió a revisar el teléfono en su mano.
“Skye, déjame probar la cámara contigo”, dijo Parker.
"¿Qué? No, vete a la mierda",dije cubriéndome la cara.
No me iba a tomar ninguna foto, no cuando me veía así. Parker se acercó, tratando de quitarme las manos de la cara. Sacudí la cabeza, dándole la espalda.
“Vamos, dulzura, cuanto más rápido me dejes tomar una foto, más rápido podremos salir de aquí”, dijo, haciéndome cosquillas en los costados.
Chillé y me reí. Él se rio, girándome para ponerme de frente.
"Sonríe", dijo haciendo una mueca pícara, retrocediendo unos pasos.
"¡Bien!" Dije, lanzando mis manos en el aire.
Si nos íbamos de aquí más rápido, entonces por qué no. Sonreí suavemente y él tomó un par de fotos. Estoy segura de que mis mejillas coloradas se verán atractivas en las fotos. Parker miró el teléfono y sonrió.
"Aww, te estás sonrojando", dijo.
"Cállate", resoplé.
Parker se rio de mí, se volvió hacia el vendedor y le dijo que lo tomaría. ¡Hurra! ¡Por fin! Me excusé y salí a esperar hasta que él arregle todo y pague.
"¿Lista para ir a buscar comida?" Escuché, y Parker apareció a mi lado.
"Sí, como hace una hora", me reí.
“Lo sé, lo siento”, se rio, “soy un obsesivo cuando se trata de comprar tecnología”, agregó.
"¿Tu crees?" bromeé.
Parker sacudió la cabeza hacia mí y envolvío su brazo alrededor de mi hombro. Le sonreí radiante. Me devolvió la sonrisa, pellizcándome la nariz antes de quitarme el brazo, para mi decepción.
"¿Qué quieres desayunar?" Preguntó.
"Hmm, waffles", dije, mi estómago rugiendo al pensar en ello.
“Entonces eso es lo que tendrás, yo invito , ya que te hice esperar tanto”, se rió.
“Sí, tu invitas”, reí.
No le haría pagar el desayuno. Solo estaba molestándolo.
"Por mí esta bien", sonrió.
Bajamos por la calle para encontrar un lugar para comer. Esto se estaba convirtiendo en un hábito, Parker y yo compartiendo comidas. Estaba disfrutando mi tiempo con él. Sin embargo, sé que no debía pensar demasiado en eso. Éramos amigos, creo. Podía llamarlo así, ¿verdad? Y sé que nunca será más que eso. Yo estaba bien así.
“¿Cuándo crees que veremos a Amy?”, me reí.
"Mañana probablemente", dijo.
Eso sonaba propio de Amy. Ella era una reina del drama cuando se trataba de resacas. A mí me sirvió, supongo, porque podía pasar tiempo con Parker, y eso lo salvaba de estar solo con todo lo que le estaba pasando.
“Se animará un poco cuando tenga comida y café”, dije.
“Sí, pero primero, vamos a comer nosotros”, dijo.
Me gustaba esa idea.
***
Parker y yo llegamos a casa dos horas después. Perdimos la noción del tiempo mientras desayunamos. Estábamos demasiado ocupados hablando y bromeando. Le llevé el desayuno a Amy a la habitación, aún sabiendo que era la hora del almuerzo.
"¿Qué les tomó tanto tiempo?", gruñó.
“Tu hermano estaba comprando un teléfono nuevo”, le dije.
Amy puso los ojos en blanco y se rio. Ella sabe cómo es él. Una vez que tuvo su comida y café, me echó. No discutí. La dejé sola. Odia la compañía cuando esta de mal humor. Me reí para mis adentros mientras salía de la habitación.
"¿Está contenta ahora?" preguntó Parker, mirándome desde el sofá.
“Sí, por un rato”, dije, sentándome a su lado.
Parker me sonrió y luego se volvió hacia su teléfono, ocupándose con eso. Decidí dejarlo. Parecía absorto de todos modos. Me levanté y fui a mi habitación. Estaba agotada. Me haría bien dormir un poco más.
Empecé a desnudarme. Me quité la remera y el pantalón, y cuando me estaba por quitar el sostén la puerta se abrió de golpe.
“Skye, ¿sabes cómo…?” Comenzó a decir Parker, pero no terminó la frase.
Vi sus ojos recorrerme brevemente mientras estaba allí parada en ropa interior.
“Mierda, lo siento, debí haber llamado”, dijo, presa del pánico.
"Parker, está bien", me reí, "¿Qué necesitas?", añadí.
No fue gran cosa. Era como si estuviera en bikini, aunque era mi ropa interior. Sería diferente si me la hubiera quitado también, entonces las cosas podrían haber sido incómodas.
"Um, yo, yo, me preguntaba si tú, en realidad ni siquiera recuerdo lo que necesitaba", dijo, rascándose la nuca.
Me mordí el labio, conteniendo una risa para que no se me escapara. Era algo lindo. Se estaba poniendo nervioso.
"Está bien, entonces", me reí.
"Lo siento, Skye", dijo.
“No te preocupes por eso. No es gran cosa" dije encogiéndome de hombros.
Asintió rápidamente y salió de mi habitación, cerrando la puerta detrás de él. Reí por dentro. Estaba mirándome por completo. Me quité el resto de la ropa y me puse un pijama.
Me metí en la cama y me tapé con las sábanas. Todavía estaba sonriendo. No le diría nada sobre como me estaba mirando. No quiero avergonzarlo de ninguna manera. Me acurruqué y dejé que mis ojos se cierren . Estaba extrañando el cálido cuerpo de Parker cerca de mí.
Dios, quien sabía que podía ser tan dependiente. Tenía que cambiar eso. No soy una persona necesitada. Probablemente fuese porque tenía un poco de resaca y estaba cansada. Todos nos ponemos un poco pegajosos cuando no nos sentimos al cien por cien. Estaba segura de que estaría bien después de dormir un poco.
Justo cuando estaba a punto de quedarme dormida, sonó el teléfono. Un mensaje de texto. Lo revisé y vi que era de Parker. ¿Por qué está enviando mensajes de texto en lugar de venir aqui?
Oye, ¿quieres un compañero de siesta? X
Parecía que no era la única que disfrutaba de nuestros abrazos. Sabía que era porque se sentía solo y necesitaba consuelo, y no me importaba ayudarlo con eso.
Si, claro X
Lo escuché venir, y pronto estaba deslizándose a mi lado.
“Te prometo que no robaré la otra mitad de tu cama por mucho tiempo”, dijo, “Justo ahora, es la única forma en que puedo dormir”, agregó, suspirando.
"Está bien, Parker, no hay problema", sonreí.
"Gracias", dijo, besándome la mejilla.
Eso hizo que mi sonrisa creciera, y los dos nos reconfortamos al menos durante las siguientes horas.